Capítulo 17

Cuando al fin están en la finca, Máximo y Santiago llevan las compras al interior de la casa, Nadia arrastra a Nátali hacia el sector de los árboles frutales, unas jugosas mandarinas eran su objetivo. Ella tiene vagos recuerdos de su primera infancia, vivían en una finca, así que esta le trae recuerdos y sensaciones agradables.

Pilar en su momento no dejó que su hija padeciera los cambios de su padre, él era consentidor con la niña y eso no cambió, la violencia solo fue hacia su esposa, así Nadia no tuvo una infancia traumática. Lo hizo por su hija que era lo más importante, por ella estaba dispuesta a todo, incluso a ocultarle la verdad para no hacerla sufrir.

Las chicas se sientan en el pasto a hablar y a comer mandarinas, naranjas y guayabas; en un momento de seriedad de Nadia, le expresó a su amiga el deseo de que su madre también encuentre un hombre que la ame y la cuide y si viene acompañado de una abuela como Margarita aún mejor; Nátali se ríe ante las ocurrencias de su amiga, pero está totalmente de acuerdo en que el paquete que trajo consigo Max es más que bueno, la abuela es un ser maravilloso, así que le dice que ella se la va a prestar de vez en cuando.

En casa, la abuela entra apresurada a su habitación y los insta para que la acompañen. Lo primero que les muestra es la retro de madera, Máximo la reconoce de inmediato, sus ojos se iluminan tomándola en sus manos. Comienza a contarle a Lauren que él ayudó a su abuelo a labrarla, aunque hacía más travesuras de lo que ayudaba.

La hermosa cuna también fue vista por el hombre poniéndolo un poco sentimental, extraña demasiado a su abuelo, pasó momentos increíbles a su lado, ¡tantas enseñanzas!, ¡tantas historias!, Cristóbulo era un hombre muy sabio, daba buenos consejos, tenía la paciencia de enseñar a los más pequeños, fue él precisamente quien le enseñó a leer, a sumar y un sinnúmero de cosas más. Cuando Máximo entró a la escuela, sobresalió por sus conocimientos, él tiene una facilidad para aprender innata, de ahí su elección para la pedagogía, está seguro de que la educación es la clave para un buen futuro.

Su abuelo le enseñaba a través del juego, así que para él no fue tedioso aprender, al contrario, disfrutó cada lección como si solo se tratara de diversión.

*

Lauren ve a Máximo en ese estado conmoviéndose mucho, es un hombre fuerte, pero verlo con lágrimas en los ojos, aunque sea por la emoción, le deja ver lo sensible que es en su interior, que valore de esa manera tan profunda a su familia y lo que hicieron por él, hace que lo admire aún más. Para una mujer es muy noble que un hombre se deje llevar por los sentimientos de vez en cuando, no siempre tienen que mostrar que son indestructibles.

Las chicas ingresan a la casa; con sus chaquetas hicieron unas bolsas improvisadas para llevar las frutas que les sobró, ya están completamente llenas y además quieren compartir con los demás, en especial Nadia que desde un principio ya había separado unas frutas para Santiago, aunque aún él no les cuenta sobre su rompimiento con Patricia, ella ha escuchado rumores de que ya no están juntos, así que ahora se irá de frente en su conquista, no va a permitir que de nuevo otra se le adelante, lo que ella no sabe es que hace mucho que lo conquistó, Santiago está enamorado de ella hasta los huesos, solo le está dando oportunidad de que ella conozca nuevas personas y viva nuevas experiencias.

Están reunidos en el comedor comiendo y hablando, planeando los detalles para la boda, de mutuo acuerdo han decidido que la ceremonia se realice en la cabaña de Máximo, inicialmente él propuso contratar un salón de eventos, pero cuando Lauren nombró la cabaña él estuvo feliz, no solamente es su lugar favorito desde hace muchos años, sino que fue allí donde por primera vez estuvieron unidos en cuerpo y alma y se amaron sin reservas. Aunque Margarita desea que sea en su finca, respeta la decisión de la pareja y entiende sus razones, posiblemente vivan en ese sitio y será un lindo recuerdo saber que la boda fue allí, en su nidito de amor.

...----------------...

Al día siguiente, Santiago se levanta temprano a hacer su rutina de ejercicios como cada mañana; espera a Nadia, ya que la noche anterior ella se autoinvitó para hacerla juntos, él sabe el esfuerzo que la chica tendrá que hacer para levantarse, una de las cosas que ella más disfruta hacer es dormir, pero contra todo pronóstico, Nadia aparece con un conjunto deportivo compuesto por un top y una licra un tanto corta, lo cual es perjudicial para la paz mental del chico con las hormonas propias de la adolescencia.

Lo primero que hacen es trotar para calentar, cuando ven que ya se han alejado bastante de la finca deciden parar para regresar, pero antes, Santiago le indica a Nadia algunos ejercicios de fuerza aprovechando unos troncos que encontró, así se la pasan un buen rato, hasta que se dan cuenta de la hora, ya casi deben estar por servir el desayuno, deben darse prisa.

Nadia toma la mano de Santiago y él la deja hacerlo, caminan riendo mientras Nadia cuenta cuanta ocurrencia se le viene a la cabeza, en un momento ella detiene sus pasos, Santiago gira para ver que sucede, la chica solo lo observa en silencio, está a punto de confesarle sus sentimientos, pero tiene miedo de la reacción que él pueda tener.

Santiago solo la observa, conteniendo unas terribles ganas de besarla, ella se ve tan tierna, con sus ojos brillantes y sus labios ajustados, de repente ella entreabre sus labios y los moja con su lengua enviando la cordura de Santiago a la mierda.

El chico suelta la mano que le tenía sujeta, se acerca y tomándola por la cintura la besa con desesperación, lleva tanto tiempo deseando este momento, tanto tiempo tratando de mantenerse distante, pero cada día se le hace más difícil, ya ella no es la niña que se conformaba con mirarlo de lejos mientras se sonrojaba, ahora ella busca contacto, busca cercanía y aunque su cerebro ordena actuar de una manera, su cuerpo decide otra y lo peor es que este parece mandarse solo, ¡pero vaya que es bueno dejarse llevar!, disfrutó el beso más de lo que había imaginado.

Nadia lo mira asustada, eso sí que no lo vio venir, Santiago nunca ha dado indicios de que ella le guste, de hecho a medida de que han ido creciendo se ha distanciado más de ella, así que está terriblemente confundida.

Santiago sabe que actúo de forma totalmente contraria a sus planes, pero en realidad no se arrepiente, los planes de vivir nuevas cosas antes de estar juntos parece que se están yendo por el desagüe porque ahora que ha probado esos ricos labios no está dispuesto a permitir que otro los obtenga, esa chica es solo suya y desea dejarlo en claro.

- Potranquita indomable, me gustas, me gustas mucho y ya no quiero callarlo más, me estoy volviendo loco por ti _ dice Santiago volviendo a besarla, mientras Nadia está cada vez más confundida, ese apodo se lo puso hace mucho tiempo, debido a que ella era una niña ingobernable, vivía brincando por todo lado como una potranca sin amansar, pero después de un tiempo no lo había usado más.

Nadia lo mira con cariño, nunca antes había sido tan productivo madrugar, si hubiera sabido que levantarse a hacer ejercicio con Santi daría tan buenos resultados, lo habría hecho desde hace mucho tiempo.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***