Capítulo 11

La pareja come tranquilamente, muy pocas palabras se han dicho y es que Máximo no la quiere presionar, su abuela dice: "barriga llena, corazón contento" y aún les falta algunos bocados para terminar.

Lauren se ha ido tranquilizando un poco, cuando llegó estaba nerviosa, no sabía como lo tomaría Máximo, pero poco a poco se ha ido contagiando de su calma.

- Preciosa, ahora dime, ¿qué razón tienes para dejarme abandonado como si fuera un trapo viejo? _ inquiere Máximo sin dejar de mirarla.

Lauren le expresa sus inseguridades, lo más importante es que no quiere que él salga afectado en el colegio.

El hombre la levanta de la silla y la sienta en sus piernas.

- Eres más perfecta de lo que imaginaba, me encanta que te preocupes por mí, pero te aseguro que nada malo va a pasar, no estoy saliendo con una estudiante, es con su madre y eso hace parte de mi vida privada _ Máximo habla con seguridad, está dispuesto a luchar por ella y por ese amor con todas sus fuerzas _ así que no dejaré que te libres de mí tan fácilmente, ya me habías asustado, pensé que ya no te gustaba o que habías descubierto que amas a otro hombre _ Máximo finge cara de terror, haciendo que Lauren se ría.

Comienza a besarla, se levanta de la silla alzándola en sus brazos y caminando hacia su habitación.

- Eres mi mujer, nada ni nadie nos va a separar así tan fácilmente, juntos vamos a superar cualquier obstáculo, ¿estás de acuerdo? _ Máximo usa su voz más sensual, Lauren solo asiente, en ese momento no puede pensar con claridad. Las sensaciones de su cuerpo se han adueñado de ella.

El par de amantes desnudos se dejan llevar por la pasión que los invade cuando están a solas, una llama abrasadora funde sus cuerpos en uno solo, se compenetran a la perfección, tanto que parecen hechos a la medida, el uno para el otro.

Son dos almas gemelas, que no pueden ser separadas por nada en el mundo. Una vez que se encuentran el destino queda escrito.

Máximo se permite disfrutar del amor que Lauren le hace sentir, desde que llegó a su vida sabe que es posible superar el dolor y tener una segunda oportunidad para amar y ser amado.

Una vez han quedado saciados, Lauren se acuesta boca abajo y levanta la cabeza para mirar a Máximo que está en posición contraria, quiere contarle la traición de su gente.

- Imagínate que Pilar, mis hijos y Nadia sabían desde hace un tiempo quién eras tú y me lo ocultaron, incluso trataron de impedir que fuera a la asamblea de padres y lo descubriera _ Lauren aún está molesta por eso.

Máximo se ríe, su mujer se ve muy graciosa frunciendo el ceño, esa cara de molestia la hace ver aún más hermosa, parece una chiquilla caprichosa.

- ¿Eso quiere decir que están de acuerdo con lo nuestro? _ Máximo está feliz. Sabe perfectamente que para ella, sus hijos son la prioridad y por ende es muy importante lo que ellos puedan pensar.

Algo que le preocupaba es que los hijos se opusiera y ella terminara la relación, incluso cuando ella llegó con esa actitud pensó que eso era lo que había pasado. Una guerra contra unos hijos celosos es casi imposible de ganar.

- Tanto que se atrevieron a traicionarme _ Lauren sigue en su posición de indignada.

Máximo vuelve a reír ante los berrinches de su chica malcriada.

- No te molestes con ellos, sé que no lo hacen para lastimarte. Ven yo te doy una compensación por esa alta traición _ Máximo está dispuesto a pagar el precio por ellos.

Lauren es arrastrada y queda encima del hombre que ya está listo para devorarla de nuevo.

Unas horas después en el estacionamiento:

- No te dejaré ir sola, yo te llevo en mi carro, mañana voy por ti para ir a la clase de yoga, luego venimos, hacemos el amor y te llevas el tuyo _ Máximo lleva unos minutos tratando de convencerla, ya está tarde y no la va a dejar ir sin protección, no puede arriesgarse a que algo malo le suceda.

Lauren no tiene más opción que aceptar, se ha dado cuenta de que Máximo ya tiene preparado el itinerario del día siguiente y ella no tiene ninguna objeción al respecto.

En el transcurso del viaje escuchan la radio, una melodía comienza a sonar, Máximo mira a Lauren y le indica que escuche.

🎵 Quiero beber los besos de tu boca

Como si fueran gotas de rocío

Y ahí en el aire dibujar tu nombre

Junto con el mío

Y en un acorde dulce de guitarra

Pasear locuras en tus sentimientos

En el sutil abrazo de la noche

Sepas lo que siento

Que estoy enamorado

Y tu amor me hace grande

Que estoy enamorado

Y que bien y que bien me hace amarte

Dentro de ti quedarme en cautiverio

Para sumarme el aire que respiras

Y en cada espacio unir mis ilusiones

Junto con tu vida

Que si naufrago me quede en tu orilla

Que de recuerdos solo me alimente

Y que despierte del sueño profundo

Solo para verte a ti

Que estoy enamorado

Y tu amor me hace grande

Que estoy enamorado

Y que bien y que bien me hace amarte

Que estoy enamorado

Y tu amor me hace grande

Que estoy enamorado

Y que bien y que bien me hace amarte

Voy a encender el fuego, de tu piel callada

Mojare tus labios de agua apasionada

Para que tejamos sueños de la nada

Que estoy enamorado

Y tu amor me hace grande

Que estoy enamorado

Y que bien y que bien me hace amarte

Que estoy enamorado

Y tu amor me hace grande

Que estoy enamorado

Y que bien y que bien me hace amarte 🎵

Máximo canta y la mira cada tanto mientras conduce, al final de la canción para el carro un momento y se acerca para besarla, se despega de sus labios, pero no se aleja.

- Estoy enamorado, mi diosa _ susurra, haciendo que su aliento roce los labios de Lauren _ tan enamorado que no podría vivir sin ti, tan enamorado que te pienso cada segundo de mi tiempo, tan enamorado que haría cualquier cosa por hacerte feliz.

- Yo también, mi amor, estoy completamente enamorada de ti, me has hecho aceptar de nuevo el amor en mi vida _ ambos sonríen juntando sus frentes.

Después de un suave beso retoman su camino.

Al llegar a casa, Lauren abre la puerta, Nátali y Santiago se paran de inmediato del sofá y se acercan para preguntarle a su madre como le fue, pero su respuesta se da sola cuando Máximo se asoma a la puerta y los saluda.

Los chicos rápidamente se despiden con una sonrisa en su rostro y suben a sus cuartos de forma apresurada, lo que menos quieren es interrumpir la despedida de su madre con el profe.

Lauren pone sus ojos en blanco ante la acción de sus hijos, no sabe desde cuando se convirtieron en su Celestina, pero está feliz de que ellos se preocupen tanto por ella. No seguirá enfrascada en pensamientos negativos. Ahora solo quiere disfrutar su vida, ya estuvo en pausa por mucho tiempo y necesita recuperar la mujer que fue alguna vez.

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