CAPÍTULO 11

Fedra asintió y abrazó a Cerem, dándole un casto beso en los labios, mientras que Cerem metió la mano por su blusa y le quitó el brasier.

__ Déjame besarlas, están más grandes y eso me enloquece, además después mi pequeño no me las prestará _ dijo Cerem haciendo un sexy puchero,

Fedra sonrió al verlo portarse como un niño caprichoso, Cerem se sentó en la cama y la atrajo había él y le quitó la camisa, para disfrutarlas y Fedra comenzó a jadear, ella apretaba los labios para reprimirlos

__ así me gusta gatita, pero no te reprimas déjame escucharlos y saber que solo yo soy el responsable de ellos

__Ahhh, me en-caaan-ta

__ A mí también me gusta _ decía Cerem mientras metía el otro a su boca.

Cerem la besó en los labios y pegó su frente con la de ella

__ Te deseo tanto amor…

Fedra sintió un poco de vergüenza, pero Cerem no quiso darle importancia a su expresión él bajó hasta su pronunciado vientre y le hablo al bebé

__ Hijo, ¿tú me autorizas a estar con tu mamá?, tu de repente no entiendes aún, pero yo muero por hacerle el amor, si aceptas te prometo que te compraré el último lamborghini cuando cumplas los quince años. _ dijo Cerem pegando el oido del vientre como esperando una respuesta.

__ Cerem, ¿pero que tonterías dices?

El niño se movió y Cerem lo tomó como un sí,

Fedra pudo ver sus ojos dilatados y entendió que su marido realmente la necesitaba.

__ Esta bien, pero no será hoy

__ SI SI SIIII_ gritaba Cerem,

Fedra entró al baño y se ducho rápidamente antes de que su marido entrara a hacer travesuras y no la dejara salir

Mientras tanto, Cerem reprimió sus ganas de ducharse con ella, pero decidió ir a ver a su pequeña para consolarla, odiaba tanto a esa mujer que con gusto la despellejaría con sus propias manos, pero su hija jamás se lo perdonaría.

Llegó y encontró a su pequeña jugando con su tío Fred, al parecer estaban jugando a la peluquería y la niña le estaba trenzado en cabello, lo había maquillado y estaban en medio de una disputa por que Fred no quería dejarse tomar una foto, para que la pequeña mostrará orgullosa el resultado de su trabajo.

Cerem no intervino, solo oír las carcajadas de su hija, que saltaba tratando de evitar que su tío le quitará la cámara, era suficiente para saber que la tristeza de su hija se había esfumado, en realidad que entre Fred y la niña hay una conexión especial, ese hombre cruel y despiadado se convertía en un Winnie Pooh, para su hija, era mejor manera de describir a ese oso meloso que estaba riendo a carcajadas con la pequeña.

Fedra salió del baño y se vistió rápidamente para bajar a cenar, pero se sorprendió al ver a su marido espiando en la puerta de la habitación de la niña, se acercó sigilosamente y también se sorprendió al oír las carcajadas que venían del interior

__ How, esto no me lo esperaba _ dijo sorprendida al ver el rostro de Fred que se paró rápidamente, se tapó el rostro y corrió hacia el baño al notar la presencia de los dos curiosos. Lo que ocasionó que todos rieran al mismo tiempo.

__ Tía Freda te esperamos para comer _ le gritó Cerem mientras salían los tres riendo juntos y tomados de la mano hacia el comedor.

A los pocos minutos llegó Fred y cenaron entre risas y bromas, luego su padre le leyó una historia a su pequeña hasta que se quedó dormida.

Al dia siguiente, Cerem llegó a su oficina y estaba trabajando junto a Fred cuando se escuchó un alboroto afuera y no hacía falta salir para saber que era la víbora que estaba escupiendo veneno en contra de su secretaria, así que Cerem levantó el teléfono y le autorizó la entrada

__ No te vayas Fred, necesito que me detengas para no matar a la maldita, _ su fiel amigo asintió y siguió revisando sus papeles.

En eso se abre la puerta de golpe y entra Yesim hecha una fiera

__ ¿Cómo es que tienes una mujer embarazada?

__ No es tu problema,

__ Bueno, en realidad eso me conviene, te voy a demandar por adulterio y te voy a quitar la custodia de la niña

__ Jajaja, has lo que quieras, pero primero te meto un tiro en la frente, antes de entregarte a mi hija, será mejor que firmes el divorcio y desaparezca de mi vida

__ Ja, ni lo sueñes, ya te lo dije, tu apellido me sirve mucho para mí imagen, así que si esa mujer quiere estar en tu cama y en tu vida como tú amante, no me interesa, pero jamás te daré el divorcio.

__ Eso es lo que tu crees, pero algo si te advierto si vuelves a maltratar a mí hija, seré viudo y a donde te enviaré no creo que te sirva mucho mi apellido, porque ni en tu lápida lo colocare

Fred levantó la cabeza al oír eso, él estaba ajeno al encuentro de la niña con la víbora, así que apretó con fuerza su lapicero y sintió una gran ira crecer en su pecho.

__¿Cómo digas querido?, de todas maneras mi intención de acercarme a esa mocosa es nula, así que ya lo sabes deja de insistir con el divorcio.

Yesim, salió por la puerta rumbo al ascensor y cuando la puerta estaba por cerrarse una mano bloqueó el sensor y Fred entró,

Yesim comenzó a sudar, ella no le temía a Cerem, porque sabía que era un hombre noble incapaz de ensuciarse las manos, pero este engendro del mal era todo lo contrario.

Fred se paró a su lado y no emitió ningún sonido hasta que la puerta se cerró, entonces apretó el botón y trancó el ascensor

En ese mismo instante se abalanzó contra ella, la tomó por el cabello y la presionó contra la pared del ascensor

__ Te advertí que si volvías tocar o siquiera a mirar a mi niña, mis perros acabarán contigo,

__ Yo -yo no fui, e-ella se abalanzó sobre mi,

__ Mis perros tienen tres días sin comer así que si te hago un par de heridas y huelen tu sangre creo que durarán como una hora en devorarse con huesos y todo, miran lo bellos que están, yo creo que Brutus te recuerda muy bien, aunque Bolton , Dayron, Zayron y sobre toda la bella Centinela, también estarán felices de olerte y lamerte otra vez _ dijo Fred mostrándole si teléfono

Bolton , Dayron, Zayron, Brutus

Centinela

__ No, no Fred, déjame explicarte, yo jamás me arriesgaria a pasar por ese infierno otra vez, por favor escuchame _ suplicaba Yesim

Pero Fred solo se acercó a ella y la vio directo a los ojos y Yesim besó, ellos habían tenido su historia, claro antes de ella estar con Cerem, y ella pensó que podía seducirlo, ese hombre era un animal en todos los sentidos y ella no dudaría en ofrecerse para una sesión de sexo rudo y salvaje muy salvaje,

Fred le correspondió, pero cuando ella se confió y metió su lengua en la boca de Fred, él la mordió, la mordió sin compasión y Yesim, comenzó a golpearlo, sentía que se ahogaba con la sangre que bajaba por su garganta.

Fred la soltó al sentir que la sangre le bajaba por la comisura de sus labios

__ MALDITTTO _ gritó Yesim

__ Esto es solo una muestra de lo que te espera cuando mis bebés te tengan en sus fauces

Fred sacó su pañuelo y se limpió, puso el ascensor en marcha, Yesim apenas las puertas se abrieron salió corriendo despavorida.

Fred sonrió y fue a su auto quería que Fedra le diera los detalles de lo ocurrido, ayer con lo divertida que estuvo la cena, no se mencionó el tema.

Fred llegó y encontró a la pequeña en la piscina con Fedra, la niña sonreía y arrojaba agua a todos los que estaban cerca, ya había mojado al jardinero, al escolta y a su nana

Todos estaban sorprendidos de que esa pequeña malcriada y caprichosa, fuera amable con todos ellos.

Pero Fred no quería perderse la diversión, fue a su habitación y dejó su celular, su billetera y todo lo que pudiese dañarse con el agua y fingió venir llegando, sabía que su princesa consentida no lo iba a dejar fuera del juego

__ Buenas tardes _ dijo y observó como la pequeña dibujó una sonrisa malvada en su rostro.

__ TÍO FRED, _ gritó la niña emocionada y corrió hacia él

__ Princesa _ dijo él levantándola en brazos y mojándose toda la ropa.

Después de un momento, la pequeña traviesa tomó una cubeta de agua y se lo arrojó a su tío en la cabeza, dejándolo mojado totalmente.

__ Pequeña diablilla _ dijo el fingiendo molestia

__ Lo siento, pero no pude resistir la tentación, te ves tan calentito y seco, mientras todos nosotros mojados y con frío que no estabas combinando con el ambiente.

__ ¿Ah, si traviesa?, _ dijo el persiguiéndola por la piscina, Fedra cada día se sorprendía la habilidad que tenía esta pequeña para derretir el corazón de piedra de este hombre.

Fred la cargó y entró con ella a la piscina con su ropa y zapatos, la niña estaba nadando con él, hasta que él vio la hora y sabía que debía cambiarse antes dé que Cerem llegará o lo regañaría.

Fred salió, tomo un paño y se fue a cambiar, con el desorden se le olvidó el motivo por el que había regresado temprano, así que después buscaría a Fedra para preguntarle.

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