Capitulo 17- La maldición del archiduque.

Ya era de noche, estaba sentada en una mesedora viendo la luz de la Luna reflejada en una fuente, pero mi mente solo estaba pensando en algo "venganza" las palabras de Noah se habían clavado en mi corazón como un cuchillo..

"-¿no quieres vengarte de tu padre?"

Por supuesto que quiero vengarme, pero ¿cómo? todavía no tengo la fuerza necesitaría, siento que seré un títere cuando lo vea. Incluso solo pensar en él hace que todo mi cuerpo se paralice de miedo. ¡Qué puedo hacer! Si se llegan a enterar, que Noah es el papá de Fabián... Noah y yo nos veremos perjudicados. Si Noah se entera que Fabián es su hijo y tiene su sangre corriendo por sus venas, es más que claro que se sentirá traicionado. Ante está situación, ya es demasiado tarde para decirle la verdad, primero necesito tener más poder, tengo que tener más poder.

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Sabía que Noah estaba jugando con mi cabello, podía sentir sus suaves manos, pero la verdad era que tenía mucho sueño, no quería levantarme aún...

Noah: ¿En serio vas a seguir durmiendo? Levántate Alessia, ya llegó el diseñador.

No quería, necesitaba dormir un poco más, deje salir un pequeño sonido de molestia, pero no abrí los ojos. Entonces sentí que Noah puso sus suaves manos en mi mejilla, sonreí y empecé a mover mi mejilla, estaba disfrutando su toque.

Noah: Alessia, levántate.

Alessia: Se siente bien.

Seguí frotando mi mejilla contra su mano, entonces su voz sonó diferente.

Noah: A-alessia...

Al abrir los ojos, pude ver qué estaba todo rojo, él se alejo un poco y hablo.

Noah: ¿Ya estás despierta? Estás durmiendo hasta tarde ¿no te acostaste temprano anoche?

Alessia: No... Por favor no dejes entrar la luz del sol, no sé siente bien... Oye por cierto ¿cuando van a preparar mi habitación?

Noah: ¿Habitación?

Alessia: Si, dijiste que estaría un tiempo aquí en esta habitación, pero que me iba a ir a otra.

Él me miraba sin comprender mis palabras, luego de lo que parecía ser "meditación" entendió a lo que me refería.

Noah: ¿No te gusta dormir conmigo?

Alessia: Oh... No es eso... Creo que hago mucho ruido de noche.

Noah: ¿Mucho ruido de noche? ¿te refieres a qué tienes hábitos al dormir?

Alessia: Algo así...

Baje la mirada, no quería hablar al respecto, no me sentía cómoda, a nadie le gusta hablar sobre sus debilidades.

Noah: ¿Te refieres a tus pesadillas? Si es por eso, tranquilízate, así te quedarás dormida rápido. ¿puedo darte algunas palmaditas para que así puedas dormir bien?

Escuchar eso, hizo que mi corazón se acelerará ¿unas palmaditas? sonó tan tentador, que me di cuenta enseguida que debo tener mucho cuidado con este hombre.

Alessia: Parece que después de todo si necesito una habitación separada.

Por mi estabilidad mental.. Si, definitivamente la necesito.

Noah: Te estás preocupando de más. Aún así, tal parece que las pesadillas constantes que tenías han disminuido. Después de todo, sueño consolarte estando a tu lado ¿quizás por eso estás mejorando más? No tienes porque avergonzarte o sentirte mal. Porque cualquier persona necesita la ayuda de las demás personas.

Entonces lo recordé, en varias ocasiones mientras estaba teniendo una pesadilla, sentia que alguien acariciaba mi mejilla, luego me abrazaba y cuando sentia una calidez me relajaba. Era algo que recordaba cuando abría los ojos, pero no sabía porque siempre lo olvidaba, hasta este momento. Lo mire a los ojos "Así que era él..." baje la mirada.

Alessia: Pero yo te causo molestias.

Cuando levanté la mirada, note tenía una ceja arqueada, no había entendido mis palabras, así que le expliqué.

Alessia: Desde la primera vez que nos conocimos parecias odiarme ¿quizás te causaba repulsión? No quiero causarte más molestias por eso yo...

Noah: ¡Claro que no! No eres para nada molesta.

Mi corazón se aceleró, no solo por sus palabras, sino por su expresión, él me miraba tan dulce, que sentía que me iba a derretir, entonces volteo su cara la cual se había sonrojado y habló.

Noah: ¡Puedes molestarme cuando tú quieras!

Sus orejas se habían puesto rojas nuevamente y sonreí, este lado suyo lo hacía ver realmente tierno.

Noah: ¡Alístate nos vemos abajo!

Él salió de la habitación. Después de alistarme y colocarme uno de los pocos vestidos que poseía, baje las escaleras, Noah me estaba esperando recostado de una pared ¿me había esperado todo este tiempo?

Alessia: ¿por qué estás aquí?

Noah: Para ir juntos.

Alessia: ¿vas a encargarte tú también ropa?

Noah: He dejado que las sombras trabajen mucho tiempo, así que aprovecharé para encargar algunos trajes.

Él me tendió la mano y yo le di la mía, pero no entendía de que estaba hablando.

Alessia: ¿Sombras?

Noah: Ah. Son un poco diferentes de los caballeros. Ah, por cierto, perdóname. Mañana tengo trabajo pendiente por lo que no podré estar contigo.

Alessia: Está bien.

"¿ Solo dirás (Está bien)...?" pensó Noah un poco decepcionado, pero no sé rindió

Noah: ¿No preguntarás qué haré?

Alessia: ¿Puedo hacerte esa pregunta?

Noah: Por supuesto. Después de todo eres mi esposa. Puedes preguntar lo que quieras.

Alessia: Entonces preguntaré ¿Qué estarás haciendo?

Noah: Fui maldecido desde mi nacimiento. Cuando llega la noche, pierdo la vista.

Lo quedé mirando tratando de asimilar sus palabras "Cierto... Esa vez se veía raro... Entonces..."

Noah: No pareces muy sorprendida.

Alessia: Cada persona llega a pasar por algún mal tipo de circunstancias -lo mire a los ojos y sonreí- si no quieres contarmelo no tienes que hacerlo.

"En serio no preguntas nada" pensaba Noah mientras caminaba, no entendía porque su consideración, no lo hacía sentir para nada feliz.

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