TE EXTRAÑE TANTO CAP 3

Capitulo 2

" Té quiero mucho papá " La respuesta de Juanito era de mucha alegría, su corazón latía con fuerza y con emoción, ahora si era extremadamente feliz.

" Yo también té quiero mucho hijo mío, eres él mejor hijo " Alejandro le dió un beso.

Marina los veía emocionada, veía a su pequeña Luz y los miraba a ellos fundidos en un tierno abrazo, sé sentía plena con ésa hermosa familia qué Dios le había dado.

" Papá iré a comprar un helado, quieres uno " Juanito dijo con alegría, ahora podía comprar su helado, su padre ya estaba presente pará compartir.

" Por supuesto qué sí hijo, yo té acompaño " Alejandro contestó sonriendo.

Sé levantaron del césped y Alejandro tomó la manita de Juanito, no sin antes entregar a su pequeña Luz en brazos de su madre... él le dirigió una sonrisa a Marina, le guiño un ojo y disimuladamente le lanzó un beso.

Marina sé sonrojo, su respiración sé agitó, adoraba a ése hombre qué con cualquier detalle o acción la derretía y la ponía nerviosa aún cómo él primer día de conocerlo.

En su mano sostenía su ramo de rosas, lo acercó a su rostro y respiro hondo, era un aroma fresco y delicioso.

" Somos muy afortunadas de tener a un hombre tan bueno cómo tú papá qué nos proteja mí pequeña, él cuidará de ti y tú hermano siempre " Marina veía con una sonrisa a su hija, ésos ojos tan identicos a los de Alejandro.

De nuevo miró cómo Alejandro sé acercaba felíz a comprar los helados, estába dándole la espalda.

No pudo evitar mirarlo de una manera diferente, Alejandro ya no llevaba puesto su traje de trabajo, ahora iba vestido de una forma muy casual pero muy sexy para el gusto de Marina, jeans pegados a sus piernas bien formadas, con tenis casuales, playera azul en manga corta, sé pegaba a su figura, sé veía de infarto.

Marina recordó la primera vez qué lo miró por la espalda y pudo apreciar todo su sensual y bien formado cuerpo, recordó perfecto cómo su vista miró sus bien formados glúteos, le encantó verlos, sé le veía tan bien él jeans.

Ahora, verlo vestido así le recordó la sensación de la primera vez, nuevamente sus glúteos sé veían tan sexys qué Marina sólo suspiró profundamente, su cuerpo se acaloro al recordar verlo a través del cristal cuando sé bañaba por primera vez, fué la primera vez qué apreció ése suculento y atractivo hombre.

Estába perdidamente enamorada de Alejandro, no tenía queja de él, era un buen padre, amigó y un excelente esposo y amante.

Mientras Juanito y Alejandro elegían él sabor de su helado, Marina disfrutaba de la vista qué su hombre le ofrecía, sé daba su buen taco de ojo.

Unos minutos después ellos regresaron muy sonrientes.

Juanito saboreaba muy feliz él helado.

" Mamá esté helado está delicioso, es igual de rico qué él qué tú me compraste por primera vez, por eso siempre elijo él mismo sabor " Juanito dijo muy emocionado.

" Le compramos uno a mamá verdad hijo "

" Es verdad mamá, esté es él tuyo, a Luz no le compramos por qué está pequeña y todavía no puede comer helados, cuando sea más grande yo le compraré muchísimos helados " Juanito dijo mirando a su hermana.

" Gracias por él helado, de verdad qué está muy rico " Marina empezó a saborear con gusto su helado.

" Come tú helado y puedes jugar un poco hijo "

" Si papá, lo comeré muy rápido "

Alejandro sé sentó muy cerca de Marina, acomodaron a su hija en su portabebé y Alejandro pasó su brazo por su cintura, Marina sé acurrucó en sus brazos cómo una adolescente.

" Yá extrañaba él calor de tus brazos, sé me estába haciendo eterno él día sin tí, además nuestros hijos té extrañaban tanto cómo yo " Marina lo miró a sus ojos azules.

" Voy a jugar un poco con ésos niños " Antes qué pudiera contestar Juanito dijo con emoción.

" Vé a jugar hijo, no té alejes mucho " Alejandro dijo mirandolo sonriente.

" En qué estábamos mí bella y amada esposa " Dijo volviendo su mirada hacia Marina.

" Creo qué estábamos en ésto " Marina alzó su rostro y pegó sus labios a los de Alejandro, él correspondió, podían sentir mucho más qué la primera vez qué se besaron, su amor era mucho más grande, había crecido tanto qué sé desbordaba de cada uno de sus poros.

" También té extrañe mucho mí amor, no sabes cuánto necesitaba de tus besos, eres cómo él aire qué respiro, té necesito conmigo todo él tiempo " Alejandro despegó sus labios un poco y dijo muy despacio sin quitar su vista de los bellos ojos de su amada.

" En serio, me extrañaste tanto cómo yo a tí "

" Casi puedo apostar qué té extrañe mucho más " Alejandro sonreía.

Ellos dos parecían dos adolescentes qué por primera vez se enamoraban, sé trataban de una manera qué muy pocas parejas lo hacían, sé amaban y respetaban....

Confiaban uno en él otro de una manera ciega, nada podría separarlos.

Toda la pesadilla qué vivieron meses atrás había quedado en él pasado, no recordaban absolutamente nada de Tania del toro, nunca supieron qué pasó con ella después de saber qué había sido detenida, Mariano tampoco había dado señales, ambos desaparecieron del mapa.

" Té amó Alejandro, nunca me cansaré de decirte todo lo qué significas para mí, eres un hombre extraordinario y soy inmensamente feliz de tenerte en mí vida cómo mí esposo, me haces la mujer más felíz del mundo " Marina sentía qué su corazón sé desbordaba de alegría, desde qué conoció a Alejandro sólo vivía cosas hermosas, él iluminó su vida al instante.

" Vas a tener qué aguantarme mí amor, porque no pienso separarme de tí, té voy a amar por siempre hasta él fin de mis días, ven aquí " Alejandro dijo en tono de burla, pero sonriendo, luego la atrajó a sus brazos y la apretó muy fuerte contra su pecho.

" Papá, mamá yá me cansé de jugar, yá nos podemos ir, después regresamos pará seguir jugando " Juanito llegó emocionado, agitado y con sus carita roja.

" Claro qué sí hijo, me toca traerlos a mí, porque tú mamá tiene qué trabajar " Alejandro sé puso de pie y le dió las manos a Marina pará ayudarle.....

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