Un encuentro inesperado.

...Lissi....

...Meses después, iniciábamos un nuevo semestre:...

...— Jey ¡levántate ya! ¡Se nos va a hacer tarde! —...

...Le decía mientras entraba a su habitación. Él seguía arropado de pies a cabeza, la noche anterior nos habíamos quedado hasta tarde terminando un trabajo de nuestra clase de Metodología de Investigación....

...— ¡Ay no! Tengo sueño, hace nada más como dos horas que cerré los ojos, ¡no seas mala! —...

...— ¡Jeison Martínez, tienes dos segundos para levantarte y entrar al baño a ducharte! —...

...— Si me das un beso, ¡lo hago! — Contestó entre risas....

...— ¿Ah, sí? ¡Con que esas tenemos! — Agregué mientras lo atacaba a cosquillas haciéndolo reír y luego nos quedamos viendo tiernamente y simplemente lo besé como me lo había pedido....

...Él estaba sin su camisa, así que entre beso y beso, no pude evitar acariciar su pecho y dejándome llevar me senté sobre él y Jey respondiendo a mi estímulo empezó a jugar con sus manos por sobre mi cuerpo buscando más. Sus caricias me gustaban mucho, así que se las permití, pero cuando intentó introducir sus manos dentro de mi pantalón, me asusté y las detuve rápidamente. Nunca había tenido relaciones íntimas con nadie, así que me ganaron los nervios......

...— Jey...—...

...— ¿Mm? —...

...— Se nos hará tarde — no me sentía lista todavía para ese paso, Jey solo respiró hondo intentando calmarse... Me preocupaba que se enojara conmigo por provocarlo y después arrepentirme. Pero muy al contrario de eso:...

...— Bien, lo que digas, ¡preciosa! — Me levantó y me puso a un lado en la cama como si fuese una niña pequeña, demostrándome una vez más que no tenía nada de que temer con él, porque jamás me obligaría a hacer nada que no quisiera......

...Más tarde:...

...Estábamos a punto de salir, cuando de pronto sonó el teléfono, Doña Mercedes contestó y era una de sus mejores amigas, la señora Ana; esta, había tenido un accidente y estaba en el hospital, no había sido nada grave, pero necesitaba a un pariente o a alguien cercano, y como su único hijo se encontraba fuera de la ciudad, le pidió a Doña Mercedes que fuera por ella....

...Doña Mercedes había contratado personal que la ayudara cuando Jey y yo no estábamos, pero necesitaba que alguien de confianza se quedara a cargo ¿cómo íbamos a hacer?...

...— Yo me quedo, aún falta una hora para la clase, nos íbamos temprano porque nos tocaba terminar algunos detalles del trabajo, pero cualquiera de los dos, puede hacerlo —...

...dije ante la situación y Jey continúo:...

...— Okay. Pero mamá intenta no tardarte, porque el profesor Barrios es muy exigente...—...

...— Sí, solo la recojo y la llevo a su casa, no me tardo — y así, ambos se marcharon y yo me quedé organizando a los chicos para abrir el almacén....

...Y los minutos empezaron a pasar. Me era difícil dejar de mirar mi reloj, pues me preocupaba llegar tarde porque como lo había dicho Jey, el profesor Barrios era muy exigente, especialmente con la puntualidad....

...Esperé y esperé, hasta que por fin volvió Doña Mercedes, ya solo faltaban 15 minutos. Tomé mis cosas y despidiéndome rápidamente, me marché de inmediato....

...Prácticamente, corrí hasta la universidad, con tan mala suerte que de la nada empezó a llover; literalmente, la lluvia solo estaba esperando que saliera....

...Al llegar a la entrada de la universidad, el piso se encontraba húmedo y para colmo, mis zapatos no me ayudaron mucho, porque inevitablemente resbalé por entrar corriendo:...

...— ¡Auch! — Exclamé en medio de la humedad del suelo....

...Muy cerca de allí, un chico que se refugiaba de las pequeñas gotas que aún caían, corrió inmediatamente a auxiliarme....

...—¿Estás bien? — Me preguntó mientras me ayudaba a levantar....

...— Sí, ¡gracias! — Contesté apenada porque mucha gente me estaba viendo....

...— ¡Estás empapada! ¿Por qué corres como loca en medio de la lluvia? — Preguntó de pronto el desconocido y por fin posé mi mirada en él....

...— Voy tarde a una clase — respondí quedándome algo admirada por lo guapo que era, su cabello liso y castaño caía un poco sobre su frente y tenía unos ojos verdes hermosos, además de que vestía una camisa blanca impecable que le daba un toque formal, creo que nunca lo había visto en el campus....

...— Pareces pordiosera...— No, pues, ¿quién se creía? ¡Hasta ahí llegó el encanto!...

...— Acabo de correr tres calles bajo la lluvia y además, me resbalé, ¿cómo pretendes que este?— Simplemente, se burló mostrando unos dientes tan perfectos que me hicieron enfadar, ¡cómo podía ser tan guapo! Con razón tenía un aura tan prepotente... Como era más alto, se inclinó para hablarme muy cerca del rostro:...

...— No te enojes, igual te ves hermosa... Empapada — Eso último lo dijo en un tono que... ¡Era un pervertido!...

...— ¡Imbécil! — Lo miré enfadada y se volvió a burlar sin quitar esa mirada peligrosa de mí....

...Sostuve mi bolso con fuerzas y empecé a caminar para alejarme de él, mientras seguía escuchando su risa descarada. ¡No podía tener un día más terrible!...

...— Señorita Cárdenas, ¿le parecen horas de llegar? — Hablé muy rápido......

...— Disculpe, profesor, tuve un... Incidente...—...

...— ¡Siéntese! Pero más le vale que no vuelva a pasar, mi clase tiene un horario de entrada preciso, quien no lo sepa respetar será mejor que no entre a interrumpirla, ¿fui claro? Ah, y la próxima vez, ¡séquese antes de entrar! — Me tragué mi enojo y caminé hasta mi puesto en total silencio. Jey se sentaba junto a mí....

...— ¿Estás bien? — Preguntó al ver cómo ardían mis ojos de la rabia, asentí mientras sacaba de mi bolso mi bata y me la ponía por sobre mi uniforme empapado, afortunadamente era tela de antifluidos, así que, secaría rápido....

...— Muy bien, espero que no haya más interrupciones. Ahora, continuando con la clase... — El profesor empezó a hablar, pero por más que intenté, no me pude concentrar......

...El imbécil - pervertido, seguía en mi mente, atormentándome con su "sonrisa encantadora"....

...¿A qué facultad pertenecerá? ¡Ay no! ¡A mí qué diablos me importaba! Debía olvidarlo por mi propio bien. Ese tipo era un prepotente, engreído y seguramente, un conquistador de quinta......