Capitulo 19

La mañana llego y Abraham estaba como un niño ansioso porque llegará la tarde para salir al parque, sus dos amigos reían de él.-

~Te gusta la greñuda? - Lucas pregunto con los ojos entre cerrados, pero a la vez emocionado por su amigo.-

¿~Y lo preguntas?

Darwin veía su teléfono mientras hablaba, estaba viendo las fotos que le tomo a Olga.-

~Ya dejen el fastidio, mejor promete que no te pasarás con Ofelia, es buena chica y te conozco, no quiero que juegues con ella.

- Lucas tenía cara de ofendido.-

¿~Porque no regañas a Darwin? Por su inmadurez casi pierde a la madre de su hija.

- Lucas quería evitar ese tema, no podía prometer nada, si no estaba seguro de controlarse.-

~Ella se fue sin decir nada.

~Porque tú le pusiste los cuernos muchas veces.

~Ya dejen de pelear, te das prisa Lucas, necesito a la señorita Gutiérrez aquí y tú ve a cuidar a Olga.

- Abraham corrió a ambos amigos, tenía que dejar todo listo para ir a su cita o bueno no era una cita, tenía que salir con su hijo y esa mujer que lo tenía pensando mucho.-

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~Gracias por aceptar la invitación, mi señora.

- Samuel tenía una sonrisa encantadora, una que deslumbraba a cualquier mujer que pasara.-

¿~Muchas gracias a usted, dígame qué edad tiene usted? Se ve joven.

~La edad no importa, pero si eso la tranquiliza tengo 52, 2 hijos de 26 y 30 están en el extranjero y soltero sin compromiso.

- Anna sonrió, solo le hizo una pregunta, pero él cómo que ya sabía que quería saber ella.-

~Tengo 56, Abraham de 35 y viuda hace unos cuantos años.-

- Samuel no quitaba su sonrisa, esa mujer se ganó su corazón desde que la vio y no le importaba que sea mayor por 4 años, sería su compañera de vida, de amor lo que quedaba de años.-

¿~Abierta a tener otro compromiso? ¿O tengo que pasar por el interrogatorio de sus dos hombres?

- Más directo no podía actuar Samuel, pues no era un joven sin experiencia, ya sabía lo que a su edad se quería y no, y él solo quería a Anna a su lado, para revivir la llama del amor, de la aventura y del placer.-

¿~No vas muy rápido? No sabes si quiero o no una relación y si me gustas.

¿~No te gustó.?

- Samuel tenía su mirada fija en ella, Anna sonrió, eso era una respuesta positiva para él.-

¿~Hablemos de tu empresa, porque quieres una sucursal aquí?

~Tengo varios inversionistas interesados aquí, pero no tenía un motivo para aceptar.

¿~Entiendo, si Olga se viene definitivamente, te vienes?

- Termino de hablar y tomo un sorbo de vino.-

~Olga no es mi motivo.

- Samuel hablo tomando un sorbo de vino, Anna no quiso seguir preguntando, estaba segura de que era ella ese motivo, su corazón estaba muy acelerado, no sentía esa sensación hace muchos años, en silencio terminaron su almuerzo y Samuel la llevo a casa, donde Abraham estaba listo para salir con Teo en busca de orella.-

~Buenas tardes, joven y jovencito, gracias por permitirme la compañía de esta bella mujer.

¿~Le gusta mi abuela.?

¿~Mateo.!?

- Abraham y Anna gritaron al mismo tiempo, Samuel sonrió, por lo menos tenía a un miembro de la familia a su lado.-

~Nosotros ya nos vamos mamá, espero ya tenga el edificio que quiere señor Samuel.

- Abraham se fue con Mateo, después que olvidó el hombre que quería con su madre, recordó que vería a esa mujer y su corazón se aceleró, como si de una cita de adolescente se tratara, empezó a respirar con calma para calmarse.-

¿~Estas nervioso, papá?

¿~Ah!? ¿No Teo, porque?

~Estás respirando como nos manda a respirar Ella, la profesora de música, inhala y exhala.

- Mateo imitaba a su profesora, mientras que Abraham no sabía que decir, hasta su hijo de 7 años se dio cuenta lo nervioso está.-

~Ja, ja, ja, no cariño solo que...

¿~Te pone nervioso Ore?

¡~Que!! No, no claro que no... Mira ya llegamos y justo viene ahí, ( Wao hermo... Qué cosas dices Abraham.)

~Teoo.

- Como una niña, Orella abrazo a Teo, trataba de no ver a Abraham.-

¿~No vas a saludar a papá? Esta nervi...

¿~Como está señorita Manriquez?

- Abraham interrumpió a su hijo rápido, sería muy vergonzoso eso.-

~Bien, señor Varela, vamos, el tiempo es corto.

- Orella regreso el saludo y volteo la cara, solo verlo le recordaba el beso y la ponía nerviosa.-

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~Estás muy contento, hermano.

~Me gusta esa mujer olgui, es hermosa.

- Olga veía como Samuel regreso con una sonrisa de oreja a oreja.-

~No la tendrás fácil con Abraham y Mateo.

~El niño ya me acepta, pero el hombre no, su mirada me dice "No toques a mi madre".

-Samuel reía de cómo él lo decía.-

~Ja, ja, ja, yo voy a salir.

¿~Para donde vas?

~Hacer unas compras con Darwin, no me dejará tranquila si no acepto.

- Samuel volteo los ojos, no le perdonaba lo que hizo sufrir a su hermana.-

~Recuérdale no hacer nada que haga que yo lo quiera matar.

- Olga se fue riendo, mientras Olga salía, Abraham y Mateo trataban de ganarle a Orella en los juegos de mesa, esperaban la noche para ver una película.-

~Ríndanse ya, no me ganarán.

~Ya sé dónde ganaremos papá.

- Con una mirada de complicidad, Abraham la tomo como saco de papas y la tiraron en una gran piscina de pelotas, salió por los regaños de los guardias, eso no bastó para Mateo, quería saltar con ellos, y eso hacían.-

~Ya no puedo más.

- Orella estaba ya cansada, Mateo salto cerca de ella y justo se tropezó con Abraham, quien la agarró y cayó arriba de él, sus miradas estaban conectadas, sus cuerpos pegados.-

¿~Están bien?

- Mateo pregunto con una risita.-

~S.sí.

- Ore se levantó rápido, disimulando los nervios que tenía.-

~Ya jugamos mucho Teo, vamos por algo de comer.

- Abraham estaba igual de apenado, en silencio salieron los tres, por un helado triple hasta que llegara la hora de la película, mateo hablaba y hablaba, mientras que Abraham y Orella no sabían cómo estar sin verse a la cara.-

¿~Puedo decirle algo, señor?

~Soy Abraham.

¿~Le puedo decir Bram?

¿- Abraham se quedó en silencio, ¿cómo le decía que no le gustaba que le dijeran así? Que solo marta lo hacía?-

~No le gusta que le sigan así, así le decía mi mamá.

- Ambos vieron a Mateo que comía tranquilo.-

¿~Aaah bueno, entonces Varela?

- Abraham asintió, pero seguía pensando en lo que dijo mateo.-

¿~Que quería decirme?

¿~Su madre es muy hermosa y joven, no cree que merece ser feliz? Salir y bailar un bolero o un tango, cenar en un restaurante mientras habla de lo bueno y malo?.

- Abraham escuchaba y pensaban en lo atrevida que era para hablarle de algo privado.-

¿~Que le hace pensar que ella quiere eso?

~No todos somos sinceros 'La sinceridad no es decir todo lo que piensas, sino sentir todo lo que dices', ella piensa que es feliz si ustedes lo son, pero en realidad no es lo que siente.

- Abraham no quitaba la mirada de Ore, trataba de memorizar cada parte de su cara, sus ojos, su nariz, sus labios, su cabello.-

¿~Papa!? ¿Verdad que Ore es linda?

- Ambos se ahogaron con su helado.-

~Ja, ja, ja que dices Teo? Yo solo soy linda para ti, vamos a dar una vuelta.

- Era mejor cambiar la conversación, pero Teo volteaba los ojos, ambos le cambiaban el tema siempre.-

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~Me gusta más el morado.

~A mí me gusta el rosa.

- Darwin y Olga discutían los colores de la cuna y ropitas para windy, su hija.-

¿~Darwin, cariño, qué sorpresa? Buscas regalo para algún cumpleaños?.

-La mujer llegó y se cercó a Darwin dándole un beso casi en los labios, Olga estaba que se moría de los celos y la rabia.-

~No, en realidad es para...

¿~No importa cariño, salimos este fin? Te espero donde siempre.

- Le dio un beso donde mismo y se fue.-

~Ya terminamos.

- Olga estaba molesta, ella llorando estos meses y el de fiesta en fiesta.-

~Pero no decidimos nada.

- Darwin pensó que seguirían sin problema.-

~Ya yo decidí qué comprarle a mi hija.

- Olga salió caminando rápido de esa tienda.-

~No empecemos Olga.

~No me digas nada, yo pasé estos meses llorando y tu feliz con una y otra.

~No te alteres, vamos a casa y hablemos.

~No me digas... Aaahh.

¿~Que pasa? Qué te duele?

~Dejame en paz idiota, aaahh.

- Observó sus piernas y no podía creer eso, ya windy venía y todo por culpa de los celos.-

~Que es eso...

~Ya viene, aaahh me duele.

- Darwin la tomo en brazos y salió casi corriendo, Olga le decía todo tipo de palabras obscenas, lo mucho que lo odiaba, estaban en la clínica todos, absolutamente todos, la película quedo para otro día.-

~ya no discutan más.

- Samuel discutía con Darwin, lo culpaba de que su hermana estuvieran sufriendo.-

~No puedo estar tranquilo si este se ha dedicado a hacer sufrir a mi hermana.

- Darwin no dijo nada, pero eso le cayó muy mal, pues tenía razón.-

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