Capitulo 10

- Abraham Varela de 36 años de edad, padre soltero de Mateo Varela e hijo de Anna Ortega, su vida está dedicada solo a su hijo, empresa y madre, llego el día de lanzar su nuevo perfume de caballero, SAS el recuerdo más importante que tenía, no le importaba las ganancias, solo ver y recordar a marta en cada parte que viera su publicidad, estaban en la rueda de prensa y su mente en estar con Teo.- 

📹🎤 Que nos dice del nombre señor Varela? No suena tan convincente para querer comprarlo.

📹🎤 Es cierto que su hijo cumple año de edad y años de muerta su esposa.

~El nombre del perfume, lo escogí yo mismo, SAS "solo amor sincero." Quien no lo compre, es porque no siente la sinceridad que demuestra el perfume al querer estar en tu cuerpo.

📹🎤 Que responde a la otra pregunta?

~Esa pregunta la hacen cada año que lanzo un producto y mi respuesta será la misma, mi esposa no murió el día que nació mi hijo, gracias por las preguntas.

- Abraham se retiró del lugar aflojando la corbata.- 

~Brad, el lanzamiento es todo un éxito.

~Ya te dije que no me digas así.

- La chica disimulo su disgusto.- 

~Disculpa Abraham, la cena para la celebración está lista.

~No asistiré a la cena, nunca lo hago.

- La dejo sin responder y se subió al auto, deseaba ver a su hijo rápido y darle su regalo, cada año en el cumpleaños de Mateo lanzaba un producto, pero este era especial.- 

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~Abue, cuando llega papá? 

¿~Ya casi mi amor, estás ansioso por tu regalo? 

-El Chico de 7 años recién cumplidos y enseguida entró Abraham con una sonrisa, sonrisa que solo le daba a su hijo y madre.- 

~Papa llegaste.

- El chico abrazo a su padre.- 

~Ven campeón, Feliz cumpleaños, sé que ya no te gustan estos días.

- Le entrego la caja de regalo.-

~Gracias papá.

- No quería herir los sentimientos de su padre.-

~Teo... Ese regalo te lo dejo tu madre.

- Abraham seco sus lágrimas, el chico no dijo nada, tomo la caja y se fue a su habitación, Abraham quería seguirlo, sabía cuánto le dolía el tema de su madre.- 

~Dejalo mi amor, estoy segura de que Marta le dejo el mejor regalo, con las mejores palabras.-

- La señora Anna sabía lo madura y gran mujer que era marta, Teo abrió la caja y en ella estaba un perfume, con el nombre de TEOTEO y una carta.- 

💌 Mi Teoteo, no te conozco en persona, pero siento en mi corazón, que serás el niño más inteligente y sincero del mundo, guapo como tú padre, este regalo lo prepare porque creo que no somos indispensable para nadie mi niño, no sabemos qué puede pasar mañana, sé que entenderás mis palabras si no estoy contigo en tus siete años, siete es un número perfecto y en tus siete años empezarás cosas nuevas estoy segura y eso espero, no te conformes con hacer una sola cosa, vive y aprende cosas nuevas todos los días, Abraham varela? ¿Tu padre, Era mi jefe, sabías? Un hombre joven y guapo, nos enamoramos de un día para otro y nos amamos como si el mañana se acabará, sé feliz mi amor y ayuda a tu padre a buscar la felicidad si no estoy con él, Te amo y te amaré y no me enojaré si tienes una madre bonita como yo, disfruta tu niñez mi amor, te amo, te amo.

Tu madre Marta 😍

-El chico encontró otra carta, la abrió con una sonrisa.- 

💌Tu tía Olga y tu tío Darwin están enamorados, me gustaría que en unos 7 años, ya tengan un niño que te haga compañía o una niña que tú cuides, pero el amor es complicado y si no es sincero hace daño príncipe, son tantas cosas que quiero decirte, solo sé feliz, la felicidad la puedes encontrar hasta cuándo comes un helado, esa es la Razón por la cual los niños se sienten feliz cuando lo comen, Mi Teo Teo te amo, espero que el pastel que comas sea muy grande.

- Mateo doblo las cartas y salió corriendo de su habitación a la sala, abrazo a su padre y abuela, ellos no entendían nada, la puerta se abrió y por ella entró su tía Olga y Darwin al ver a su sobrino sonriendo.- 

~Tiaaa, tío.

~Hola mi Teo, Feliz cumpleaños mi vidaaaa.

- Olga lo abraza fuerte, unas cuantas lágrimas salieron, recordó lo feliz que estaba su amiga cada vez que sentía una patada de Teo en su vientre.- 

~Sobrino, Wao estás muy grande.

- Mateo nació muy prematuro, pero ahora era un niño muy grande, todos estaban muy sorprendidos por su sonrisa.-

~Quiero un pastel grande papá.

- El silencio que provocaron esas palabras, fueron interrumpidas por el timbre, la servidumbre abrió y la sonrisa de Teo se borró, era la asistente de Abraham.-

¿~ Pasó algo en la empresa señorita Marino? 

- La chica se tragó su orgullo y sonrió forzadamente.- 

~No, señor, solo quise traer un regalo a Teo...

~Mateo, me llamo Mateo.

- El chico respondió serio, todos se quedaron en silencio, no pasaban a la chica, ya sabían que buscaba en Abraham, quien no la despedía porque solo ella aguantaba su mal humor.- 

~El regalo de Teo se lo doy mañana, dejé las cosas en la mesa y vaya a celebrar con los chicos de la empresa, nos vemos mañana temprano.- 

- Abraham hablo sin expresión, ella. Con una sonrisa forzada asintió, estaba cansada de hacer cosas para que la invitara a las celebraciones en familia y siempre la trataba así, cuando ya estaba en el auto saco su verdadera cara.- 

~Niño estúpido, ya verás que cuando tenga a tu papá en mis manos te sacaré de la casa y te mandaré lejos con tu vieja abuela.

- Montserrat sacaba toda su ira en el volante de su auto, en la mesa seguían celebrando el cumpleaños de Mateo.- 

¿~Cuál será mi regalo papá?

- Abraham se acercó.- 

~Saldremos mañana después de hacer unas cosas en la oficina e iremos a comprar o hacer lo que tú quieras.

- Abraham casi no le daba tiempo de salir en el día, aunque trataba de sacar tiempo, no olvidaba la promesa que le hizo a marta.- 

~Quiero ir a ver a mamá y comer helado.

- Todos los presentes quedaron en pausa, uno dejo de comer, otro quedo a medio camino de sentarse y Anna secaba una pequeña lágrima que rodó por su mejilla, sabía que Marta tenía las palabras correctas para que su bebé decidiera tener una vida feliz, como un niño de 7 años, todos sonrieron feliz, tragándose ese nudo que tenían en la garganta.-

~Yo me anoto.

- Anna, hablo feliz.- 

~Ustedes no pueden.

- Abraham interrumpió a Olga y Darwin, tenían que quedarse en la empresa.- 

~Que descaro.

- Así llegó el día siguiente y como Abraham lo prometió fueron al cementerio a visitar a Marta, Abraham no dejaba de ir cada fin de semana, pero ese día era especial, hablaron de todas las cosas que Marta quería hacer con él, lo necia que era, como cambio a Abraham y Mateo aprendió a sacar todo lo que un niño de siete años sentía y lo oprimía por todas las cosas que le decían.- 

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