Capitulo 17. Mariano Di Vaio.

Soy un hombre tranquilo, no me gusta andar por la vida queriendo demostrar algo que no tengo, o que no soy, así como me ven cuando me conocen eso es lo que soy, vengo de una familia, de abogados prestigiosos, mis padres son adinerados, pero es de ellos yo aún no he hecho nada con mi vida para tener dinero, cuando más joven en un arranque de rebeldía a sabiendas que tenía que estudiar derecho decidí estudiar ingeniería mecánica, es lo que me gusta, pero al entrar en una etapa de madurez termine por estudiar derecho.

Conocí a Jackeline desde el primer día que ella entro a estudiar, me pareció una mujer hermosa, interesante, en mi familia no existen prejuicios, no por el Color, ni por la clase social, para nosotros lo importante es lo que hay dentro del corazón, la humildad y la humanidad.

Jackeline tiene eso y mucho más será sin duda una excelente abogada, bueno al ir conociendo sobre ella y saber que estudiaría derecho me gustó mucho más, mi padre es abogado mi madre también, seríamos una gran pareja.

Ahora porque no la aborde desde un principio, bueno es que pensé que ella no se fijaría en mi, no me creo menos que nadie, pero no sé era algo que sentía, ahora que analizó las cosas, si lo hubiera hecho ella estaría conmigo siendo tratada por un verdadero hombre, romántico y atento.

Bueno ya no caben las lamentaciones, jamás me imaginé que ella estuviera en una relación tan distorsionada como esa, nunca la vi en modo sentimental con nadie.

Un día me acerque a su amiga y se que ella me acercaría a Jackeline, fui directo le confesé mis sentimientos por su amiga, ella se emociono mucho.

El día que la conocí fue mejor de lo que esperaba confirmando todo lo que ya había visto en ella, es una mujer hermosa no solo por fuera también por dentro con un gran corazón que está lleno de tristeza.

Cuándo se fue de esa casa donde era humillada y tratada como aún bicho, mis esperanzas crecieron ya que ella estaría lejos de él, así podría yo meterme en su corazón, a lo mejor lo logré Algún día pensé, hasta que la Vi besarse con el idiota ese, en la mansión cuando las fui a recoger, sentí un cumulo de sensaciones en mi pecho, mis esperanzas se esfumaron, mi corazón se rompió, yo sabía que estaba expuesto a esto, cuando ella me confesó sus sentimientos, también se que si Cameron la trata bien, y no esconde sus sentimientos hacia ella, pues Jackeline lo va aceptar porque está enamorada o ilusionada no lo sé.

En todo el trayecto al apartamento, no dije nada ella tampoco, me esquivo la mirada en todo el camino, la entiendo claro que sí, porque cuando era más joven algo así me sucedió.

Las ayude a subir sus maletas.

—Hasta luego señora Greta fue un placer conocerla, ya se de dónde Jackeline saco tanta belleza.

—Ay muchacho, me va hacer sonrojar—dice con una sonrisa muy bonita.

—Mariano muchas gracias por todo, disculpa por haberte molestado.

—Tranquila sabes que cuentas con un amigo—Ahora estoy en zona Friends—Me voy.

—Quedate a comer cocinare algo delicioso—Me dice la señora Greta.

—No se preocupe debo irme, mañana tengo que ir al juzgado para una presentación y debo prepararme, si no con mucho gusto.

Me despido antes que logren convencerme de quedarme a comer eso sería muy incómodo en este momento.

Me dirijo a mi casa.

—¿Hijo como te fue?— Saluda mi padre, no ibas a invitar a Jackeline a comer con nosotros.

—Esta vez no se pudo papá, a su mamá la echaron de la casa donde trabajaba y bueno—Me encojo de hombros.

Hijo ven aca se que ya eres un hombre, tienes 27 años pero no presiones las cosas, lo que va a ser para uno tarde o temprano llega, así que ahora te sientes mal, pero a lo mejor mañana la vida te lo recompensa el doble—Me da un abrazo—Ten presente que con trampas y mentiras no se logra nada, siempre el honor y la verdad por delante esta bien.

—Gracias papá eres el mejor—lo abrazo también.

Mi papá es el mejor, cuando le dije que me ayudara con un empleo para Jackeline inmediatamente hizo una vacante para ella, pues no despidió a nadie pero invento un puesto, el ya sabe de ella, desde hace mucho tiempo que le he contado, siempre me animo a invitarla a salir, pero yo tan estúpido ahora me lo reprochó y me lo voy a reprochar toda la vida.

Voy a mi habitación para estudiar la presentación, por ser hijo de quien soy se mucho, soy uno de los mejores en mi clase, me gusta ganarme las cosas por mi esfuerzo no por el apellido que me precede.

Mis padres siempre me enseñaron que las cosas se ganan limpiamente, sin jugar sucio porque eso tarde o temprano nos pasa factura, además que en nuestro ámbito debemos conocer a las personas, sabes estudiar su lenguaje corporal, las personas cuando mienten no lo hacen a la perfección, cuando ocultan algo tampoco, así este bien maquinada siempre algo en tu cuerpo te va a delatar, no hay crimen perfecto, ni mentira que no se descubra.

Abro mi laptop y tengo un correo, es de Carlotta una amiga de la cual me pasó algo parecido a lo Jackeline, ya no siento nada por ella, cuando la amaba ella jugo con mis sentimientos, los pisoteo como le dió la gana, ahora que ya no siento nada hacia ella, me busca me persigue, ya no se cómo decirle que no me interesa, terminó por borrar el correo sin abrirlo no me interesa lo que me quiera decir.

Al día siguiente, no fui al bufete, creo que me alejare de la vida de Jackeline, en mi presentación me fue estupendo, mi madre una de las mejores abogadas penales estaba ahí presente en la evaluación.

—Muy bien muchacho, estás echo de roble igual que tú madre—Me felicita el juez que se encargo de la evaluación.

—Hijo mío siempre supe que esto era la tuyo, no importa, lo demás quedo en el pasado, ahora sabemos que tú serás un gran abogado que mantendrá el bufete en la cima—Me besa, mi madre es una mujer de carácter fuerte, directa cuando algo no le gusta, cariñosa, cuando alguien le agrada, tiene los ojos de mi color, cabello castaño oscuro, muy elegante pero no engreída, es todo un amor de persona, que por supuesto amo a Jackeline desde el primer día.

Todo el día me la paso en la casa, cuando voy a la universidad trato de no encontrarme con ella, no es que sea un cobarde, no se cómo controlar mis sentimientos, quiero estar cerca de ella pero no como amigos, quiero consentirla, amarla como ella se merece, tratarla como a una reina , pero entiendo que llegue tarde a su vida, pero si ella me llega a dar una oportunidad no la dejaré pasar por nada.

En la noche cuando terminan las clases la veo marcharse con él, seguro arreglaron las cosas, me entristece por mí, pero me siento feliz por ella, se merece lo mejor y si es el quien la haga feliz pues no me voy a interponer.

El día siguiente, estoy en mi casa, no saldré a ningún lado, tocan la puerta de mi habitación.

—Joven Mariano hay una chica en la sala que lo busca—Que extraño ¿quien será?, jackeline no es, ella debe estar en el bufete.

me coloco un suéter ya que estaba solo en un pantalón de chandal.

bajo las escaleras cuando entra en mi campo de visión una rubia muy bonita, delgada, parece una modelo hasta la forma de pararse la delata.

—Buen día, ¿Conquien tengo el gusto de hablar?—Ella me mira de arriba abajo.

—¿Es usted Mariano Di Vaio?

—soy yo ¿usted es?

—Elle Spears—Ya, la novia de Cameron.

—Usted dirá que quiere hablar conmigo—Endurezco mis facciones.

—Es que me he enterado que usted y está mujer...jackeline son novios.

—¿Que pretende?—No le voy a afirmar nada, tampoco se lo voy a negar.

—Usted vera—Está nerviosa—Yo era novia de Cameron.

—¿Era? —Me asombro o sea que la termino por jackeline.

—Si era porque me dejó por la maldita negra esa y...

—Disculpe señorita pero en mi casa usted no va a hablar así de ninguna persona, mucho menos de ella, porque el color de su piel no la hace menos que usted, o si no mire nada más su novio la dejo por ella—Asi jackeline no sea para mí no voy a permitir que ninguna persona la maltrate de ninguna manera.

—Entonces usted también es uno de los que cayó como un idiota en las garras de esa mujer.

—Seguimos con las ofensas, me imagino que usted no está aquí, para saber si estoy enamorado de ella—Me cruzo de brazos.

—Eso no me importa, quería decirte que si nos unimos podemos separarlos, para así tú estás con ella, y yo con mi Cameron—De verdad que jamás me imaginé que algún día me sucedía algo así.

—Perdio su tiempo conmigo, podré querer mucho a esa mujer, pero jamás le haré algo que la lastime—Digo decidido.

—No se que tiene esa mosquita muerta, seguro sera una perra que los vuelve locos.

—Es mejor que se vaya señorita no me gustaría levantar cargos por infamia contra una persona—Buffa—Ademas señorita—Le digo cuando se da la vuelta para salir—Dicen por hay que las mujeres, son unas damas ante la sociedad pero unas perras en la cama.—Me mira con la boca abierta—Deberia practicarlo más en lugar de querer hacerle daño a la persona que supuestamente quiere, que tenga feliz día.

Soy yo quien la dejo en medio de la sala con la boca abierta, no entiendo su expresión parece que aún fuera una casta virgencita.

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