Capítulo 17

De verdad que me sorprendió, obviamente tiene su grado de culpa pero así no me lo esperaba, entonces ella si tiene el dinero de la hermana de Marcos.

-¿Por qué no has devuelto ese dinero? – la curiosidad me carcomía

-¿Cómo lo voy a devolver? Imagina que llegue a tu casa, hola soy la ex de tu esposo o novio y estoy aquí para devolverte el dinero que robó, yo no sabía que el estaba escondiendo tu dinero en mi cuenta, yo solo lo supe después de una pelea que tuve con él, les hago un cheque y listo, ya lo intenté y ahora tengo una orden de alejamiento por loca, así como un recuerdo de una golpiza que esa mujer me dio, el problema es que Carlos quiere que le devuelva todo el dinero hasta lo que me quitó a mi y no estoy dispuesta a dárselo prefiero que se lo quede el banco o hasta el fisco  - su rabia era evidente

-Tienes razón y si pudieras ayudar a alguien a vengarse de Carlos ¿lo harías? – su asombro era evidente

-En que estas pensando, por favor nada ilegal, ya tengo demasiado con las malas decisiones que he tomado en mi vida, no quiero meterme en más problemas ya tengo demasiados – podía ver su miedo, creo que aún hay algo que ocultas

-Mejor no, creo que es mejor que vayas limpiando tu nombre poco a poco – dije mientras veía que le daba otro trago al vaso

Siempre pensé que me iba a armar un drama, que iba a llorar hasta deshidratarse y que me iba a pedir que no la despidiera, estaba preparado para que intentara seducirme, pero nunca pensé que me iba a contar esas cosas y ahora no sé qué hacer con toda esa información.

Le creo o quiero creerle, aunque no creo que su inventiva sea tan buena en ese estado de ebriedad en que esta, sus palabras suenan alargadas y puedo ver sus ojos cristalizados por el alcohol.

Se va a levantar para irse y pude ver como perdía el equilibrio para casi caerse, tuve que agarrarla para que no se cayera e intentó deshacerse de mi agarre pero no la solté.

-Deja que te ayude a llegar a tu habitación - le dije mientras la sostenía entre mis brazos

-No te preocupes por mí, yo puedo llegar sola - respondió mientras parecía caerse

-No puedes dejar un rato esa actuación de chica ruda y dejar que alguien te ayude solo un momento, a lo mejor si le hubieras contado a alguien lo que te pasaba no hubieras sufrido sola y te habrían ayudado a defenderte de ese imbécil - se me quedó viendo asumiendo que tenía razón

Se quedó tranquila y dejó que la ayudara a llegar a la habitación, la llevé hasta la cama para que se acostara.

-No estoy acostumbrada a que alguien me cuide, mi madre siempre fue un poco egoísta y en ocasiones se ausentaba por temporada, por lo que yo solía ser quien estaba pendiente de ellos, gracias por escucharme - se acostó en la cama y se arropó

No sé por qué, pero me quedé viéndola un rato mientras dormía, yo conocí a esa mujer, su madre y sabía como era, así que ya mañana pensaría bien lo que iba a hacer, debía hablar con Marcos para saber que era lo que él estaba planeando y contarle lo que Isabel me había dicho.

Antes de irme a mi habitación le dejé un beso en sus labios, sabía que estaba dormida y eso me dio la valentía para hacerlo.

Narra Isabel

A la mañana siguiente me sentía un poco mal, pero de igual manera me levante me di una buena ducha y me coloque algo cómodo, luego recordé lo que había sucedido la noche anterior, le conté a ese hombre lo que había sucedido con Carlos.

¿Ahora que sucedería? No recordaba si me había dicho algo más, así que no sabía si me había despedido o seguía con mi empleo.

Empecé a buscar mi computadora y recordé que el padre de mi jefe la había destruido, pero tengo el disco duro así que debía buscar una computadora donde colocarlo para sacar la información que tenía allí.

Ahora no sabía que iba a hacer, tenía una planificación y me faltan cinco meses para que termine mi contrato, no podía haberlo echado a perder de esa manera.

De pronto escucho que tocan la puerta y es Antón diciéndome que me espera en la sala porque necesita hablar conmigo.

El momento ha llegado perdí el mejor trabajo que he tenido en los últimos meses y aún no he podido reunir el dinero que necesito para hacer el retiro de la cuenta internacional.

Así que después de respirar profundo varias veces decido salir a enfrentar a mi jefe, si tengo que volver espero que por lo menos me pague el pasaje, no tengo ni siquiera para un vuelo económico de regreso.

Al llegar a la sala veo que está bastante serio, me dice que lo siga y cuando me doy cuenta me lleva a desayunar, no entiendo nada pero de igual manera le sigo la corriente.

Nos sentamos a desayunar y lo veo serio, no me dirige la palabra por lo que ese comportamiento me está volviendo loca, así que decido enfrentarlo.

-Si me va a despedir hágalo de una vez - le digo mirándolo de frente

-¿Por qué debería despedirte? - su pregunta me dejo helada

-Ayer le conté cosas que usted no debería saber - estaba asombrada por su comportamiento

-Ayer me contó que fue una tonta que se dejó envolver por un hombre polígamo y que tiene en su poder una fortuna que no le pertenece, mentira parte de esa fortuna si es suya ¿o me equivoco? - solo pude afirmar con la cabeza

-además, me pareció que estaba muy arrepentida por la gran estupidez que hizo, lo que no me queda claro es porque no ha usado ese dinero para ayudar a mejorar las finanzas de la empresa familiar - decía mientras comía

-Debo hacer el retiro personalmente, se suponía que lo íbamos a retirar cuando estuviéramos de luna de miel - ya mi valentía no era mucha

-La voy a ayudar a devolver ese dinero a sus legítimos dueños y a deshacerse de Carlos, pero quiero algo a favor - su rostro no me gustaba nada

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