Trágica Obsesión
Capítulo 1
Varios años después…
Era domingo, Megan estaba preparando el desayuno a sus dos hijos, Toni de seis años y Melanie de cuatro
—Ya están listas las panquecas así que preparen sus platos porque quedaron muy deliciosas.
Ambos niños estaban emocionados esperando comer su desayuno favorito panquecas con sirope de chocolate.
En ese momento entró a la cocina Jim el esposo de Megan e inmediatamente le dio un beso en los labios con dulzura mientras le decía:
—Buenos días cariño, me quedé dormido pero este aroma a panquecas me despertó. Hola niños ¿cómo amanecieron mis campeones?
—Hola papi mira hice una carita en mi panqueca—Dijo Toni.
—Yo también hice una carita papi y me quedó más bonita que la de Toni—dijo Melanie, terminando de vaciar el frasco de sirope de chocolate sobre la panqueca.
Megan y Jim, solo sonreían y disfrutaban al máximo ver a sus hijos tan felices y saludables.
—Son tan bellos y cada día me sorprenden con su inteligencia. Estoy muy orgullosa de ellos—Dijo Megan mientras abrazaba a su esposo Jim.
—Sí es verdad cariño, pero quiero que sepas que también estoy muy orgulloso de ti, porque has logrado mantener a esta familia muy unida y has sido la mejor madre del mundo. Y además quiero que sepas que te amo.
—Gracias mi amor, yo también te amo.
—Y bien niños ¿Qué quieren hacer hoy?
—Bañarnos en la piscina, yo quiero jugar a que soy un submarino—Dijo el pequeño Toni.
—Yo también papi, quiero ser una sirena—exclamó Melanie.
—Bueno perfecto no se diga más, entonces al terminar de desayunar nos vamos todos a la piscina y hoy les voy a preparar unas hamburguesas que se van a chupar los dedos.
Ambos niños exclamaron llenos de emoción:
—¡Siiiiii viva!
Megan se acercó a Jim y le dijo:
—Bueno me parece excelente la idea de un día de piscina, pero antes voy a ir a correr un poco, sabes que no puedo dejar de hacer mi rutina diaria de entrenamiento.
—Sí amor lo sé, así que ve tranquila que yo me quedo con los niños, pero por favor no te vayas a tardar , quiero que estés a tiempo para que podamos compartir con los niños.
—Gracias cielo, solo serán un par de horas, tengo pensado subir por la colina y hacer algo de ejercicio, te prometo que estaré a tiempo para que preparemos juntos esas hamburguesas, además sé que tu interés de que esté aquí a rápido, es porque sabes que yo cocino mucho mejor que tú—Dijo bromeando mientras le daba un beso en los labios.
Al cabo de media hora ya habían terminado de desayunar, Megan estaba lista con su ropa deportiva y los implementos necesarios para comenzar con su entrenamiento diario. Le dio un beso a cada uno de los niños mientras les decía:
—Niños ya mami regresa para que hagamos las hamburguesas, pero por favor pórtense bien con papá, nada de travesuras, ¿de acuerdo?
Ambos niños respondieron:
—¡Sí mami!
El pequeño Toni le dijo a su madre:
—¿Mami puedo ir contigo?
—No mi amor, ya te dije que regreso a tiempo para que pasemos un lindo domingo en la piscina y preparemos con papá esas ricas hamburguesas. Bueno nos vemos, quiero aprovechar que el sol no está tan fuerte.
Megan se despidió y salió corriendo de la casa rumbo a la colina en donde iba todos los fines de semana a entrenar, ella era fotógrafa profesional, pero además de eso le gustaba ejercitarse y mantener su cuerpo en forma. Era una de sus pasiones y eso la hacía verse realmente muy joven y además atractiva. Tenía un cuerpo realmente envidiable.
(***)
Comenzó a correr hasta que salió de la urbanización en donde se encontraba su casa y tomó el rumbo hacia la carretera, al llegar allí comenzó a correr por la orilla tratando de resguardarse de los vehículos que por allí transitaban, sin embargo venía de lo más relajada con sus audífonos puestos escuchando su música favorita que siempre colocaba cuando corría. De pronto sintió que un vehículo se acercaba detrás de ella a gran velocidad rozando su cuerpo de un lado, provocando que ésta se resbalara y cayera al mismo tiempo por un barranco dando vueltas sin parar hasta terminar golpeándose entre las piedras, quedando totalmente inconsciente
La persona que iba conduciendo el vehículo que golpeó a Megan, se dio a la fuga dejando a Megan casi moribunda en medio del barranco. Uno de los vehículos que venía detrás vio todo lo que había pasado, por lo que inmediatamente se detuvo llamando a toda prisa al número de emergencias.
Al cabo de unos minutos llegó la ambulancia y se llevaron a Megan directo a la clínica más cercana, realmente estaba muy herida, tenía hematomas por todo el cuerpo y además se encontraba totalmente inconsciente.
Jim estaba en la casa con los niños sin imaginarse lo que le había ocurrido a su esposa, en ese preciso momento estaba ordenando todos los ingredientes que iban a necesitar para preparar las hamburguesas, de pronto comenzó a sonar el teléfono de la casa y Jim fue a atender mientras le decía a los niños
—Melanie, Tony por favor bajen la voz que voy a atender el teléfono. ¡Alo! Si diga—contestó mientras se tapaba el otro oído para poder escuchar bien la llamada ya que los niños no paraban de hacer ruido.
Inmediatamente Jim puso una cara de asombro mientras decía.
—Pero ¿Dónde?, ¿Cómo pasó todo eso? No puede ser, ya salgo para allá.
Jim estaba pálido y muy angustiado, no podía creer la tragedia que acababa de ocurrirle a su esposa, se quedó totalmente paralizado sin saber qué hacer, especialmente porque no quería que los niños se dieran cuenta de lo que estaba pasando hasta que no tuviera la seguridad de saber en qué condiciones se encontraba Megan.
Jim estaba descontrolado, no quería alarmar a los niños, así que se acercó a ellos mientras le decía: —Niños prepárense que tenemos que salir a casa de la abuela.
Tony fue el primero en quejarse porque eso no era lo que habían planificado.
—¡Ay no! Yo no quiero ir donde la abuela, tenemos que esperar a mamá, ella viene a prepararnos las hamburguesas.
Jim tragaba grueso tratando de disimular ante los niños, mientras les decía de la forma más sutil posible: —Niños por favor les pido que suban al auto porque necesito ir urgente a la oficina así que vamos andando.
Los niños subieron al auto a regañadientes puesto que no sabían lo que estaba pasando en realidad, luego Jim los dejó en casa de su madre y se fue directo a la clínica para saber qué le había pasado realmente a Megan.
Entró al área de emergencias y caminó hacia la sala donde se suponía debía estar su esposa Megan, estaba sudando de los nervios, inmediatamente le preguntó a la recepcionista:
—Señorita por favor llamaron a mi casa informando que mi esposa había tenido un accidente y la trajeron a esta clínica, ella se llama Megan Smith.
—Permítame revisar en el sistema….. Sí efectivamente aquí está registrada, la tienen en la sala de emergencias y ya la están atendiendo, pero debe esperar por acá hasta que el médico encargado del caso salga y le dé información.
—Muchas gracias señorita.
Jim caminaba de un lado a otro estaba hecho un manojo de nervios, estaba totalmente nervioso porque él sabía lo mucho que Megan cuidaba su cuerpo, solo pedía a Dios que no quedaran secuelas graves del accidente.
Al cabo de una hora de espera lleno de mucho nerviosismo y angustia, por fin, Jim vio salir al médico que se había encargado de atender a Megan, se acercó a donde se encontraba él y le dijo:
—¿Usted es el esposo de la paciente Megan Smith?
—Sí doctor, dígame ¿Cómo se encuentra mi esposa?
—Ya está fuera de peligro, sin embargo sufrió varias fracturas debido a la aparatosa caída que tuvo, tiene tres costillas rotas, se fracturó el brazo y la rodilla derecha, no hubo necesidad de operarla, pero está enyesada en la zona del abdomen, también tuvimos que enyesarle el brazo y la pierna derecha. Tiene que permanecer hospitalizada al menos por una semana dependiendo de cómo evolucione, pero después que sea dada de alta, tiene que guardar reposo por varias semanas más hasta que pueda valerse por sí misma, va a necesitar de fisioterapia después que se le quiten los yesos, esto definitivamente fue un milagro que se salvara.
—¿Y puedo verla doctor?
—Sí, pero por favor no vaya a agitarla, aunque todavía está bajo el efecto de los calmantes que tuvimos que administrarle porque los dolores son demasiado fuertes y además tuvimos que suturar una herida que se hizo en la frente cuando impactó contra una piedra. Definitivamente es un milagro que aún esté con vida.
Jim fue a toda prisa a ver a su esposa, cuando llegó a la habitación la encontró dormida, sin embargo la tomó de su mano mientras le decía:
—Hola chiquita mi amor, estoy aquí, qué susto tan grande me diste. ¿Me escuchas?
Megan con mucha dificultad abrió los ojos y al ver el rostro de su esposo, sonrió y luego se volvió a dormir, estaba bajo los efectos de los sedantes.
Jim pasó toda la noche con Megan, estaba atento a todo lo que ella necesitara, los niños se habían quedado con la madre de Jim cosa que de alguna manera lo tenía un poco más tranquilo, Megan no tenía más familia sino él y sus hijos, así que él tenía que permanecer a su lado todo el tiempo que ella necesitara, sin embargo estaba muy preocupado por no saber cómo iba a hacer con el trabajo de la oficina y el cuidado diario de los niños, ya que su madre era una mujer bastante mayor y no podía dejarle toda la responsabilidad.
(***)
Al día siguiente, Megan volvió a abrir los ojos y trató de moverse pero el dolor tan fuerte de las fracturas, hizo que se quejara y permaneciera inmóvil.
—Cariño aquí estoy, ¿Cómo te sientes?—Le preguntó Jim angustiado.
Megan habló con mucha dificultad, se quejaba bastante, los dolores eran realmente espantosos, ella le dijo al verlo:
—¡Ay me duele todo el cuerpo! No soporto los dolores en las costillas, por favor busca al doctor o a la enfermera para que me coloquen un calmante.
Jim corrió de prisa y salió hacia el pasillo de la sala de emergencias buscando al doctor, en ese momento entró una enfermera y le dijo: —¿Qué pasa señor por qué está tan alterado? ¿En qué puedo ayudarlo?.
—Es que mi esposa no aguanta los dolores, iba a buscar al médico para saber si puede colocarle un calmante.
—No se preocupe señor, justamente iba a la sala de emergencias a colocarle el calmante a la señora, porque según la historia médica ya le toca una nueva dosis, así que tranquilo que en este momento se lo voy a aplicar.
—Muchas gracias señorita, de verdad no sabe cuánto se lo agradezco.
—No tiene nada que agradecer, es mi trabajo y lo hago con todo el gusto.
La enfermera le inyectó el calmante en la vía que tenía puesta en la vena mientras le decía: —Calma señora Smith, con este calmante se le va a aliviar bastante el dolor, por favor trate de relajarse un poco mientras le hace efecto.
Al terminar de suministrarle el calmante, ella se dirigió a Jim y le dijo:
—No se preocupe, ella va a estar bien, esto la va a hacer dormir por unas cuantas horas, me llamo Katherine Miller, mucho gusto, voy a estar de guardia todo el día, así que cualquier cosa que necesite me puede llamar presionando el timbre.
—Muchas gracias Katherine, mi nombre es Jim Smith, y tenlo por seguro que te voy a llamar por cualquier cosa, la verdad es que estoy muy nervioso de ver a mi esposa en esas condiciones y me preocupa porque tengo que ir a ver a los niños y no me atrevo a dejarla sola.
—Ah no se preocupe, aquí el personal médico es muy eficiente, además si quiere puede aprovechar de ir a ver a sus hijos, porque como le dije, ella va a dormir por varias horas, así aprovecha a descansar un poco y a tomar aunque sea un café, recuerde que tiene que estar fuerte para poder atenderla a ella.
—Sé que tienes razón, pero la verdad es que no quisiera apartarme de ella para cuando despierte.
—No se preocupe señor Smith, aquí está bien cuidada, pero como le dije ella dormirá un par de horas o más, así que tiene tiempo suficiente de ir a su casa y regresar.
—Tienes razón Katherine, entonces así lo haré, de todos modos cualquier cosa en la clínica tienen mi número de celular, me llaman si ella despierta o si pasa algo extraoficial.
—Si por supuesto, vaya sin pendiente.
Katherine sonrió y Jim se fue un poco más tranquilo para ir a darle una vuelta a los niños, además no comía bocado desde la noche anterior.
(***)
Dos horas después…
Megan se había despertado y Katherine estaba en la habitación. Ella se quejaba mientras trataba de abrir los ojos y miraba a su alrededor buscando a Jim.
—Jim, Jim, ¿Dónde está Jim mi marido?
—Hola ¿Cómo se siente Señora Megan?, me llamo Katherine Miller, soy la enfermera de turno, su esposo ya debe estar por llegar, él fue a ver a sus hijos, a cambiarse de ropa y a comer algo, así que no se preocupe que en cualquier momento estará aquí.
—Me duele mucho, casi no puedo respirar del dolor en las costillas.
—Sí entiendo, es normal, recuerde que tiene tres costillas fracturadas, así que debe guardar mucho reposo, mientras menos se mueva más rápido va a sanar.
En ese momento se abrió la puerta de la habitación y entró Jim.
—¡Hola cariño qué bueno que ya despertaste! ¿Cómo te sientes? Estaba muy preocupado por ti, vine lo más rápido que pude! Oh, ya veo que conociste a Katherine.
—Hola amor, estoy muy adolorida, pero Katherine me ha cuidado muy bien y el calmante me ayudó mucho a aliviar el dolor, aunque todavía lo siento, pero al menos es más tolerable. ¿Y los niños cómo están? ¿Con quién los dejaste?
—Tranquila que están con mi mamá, y ellos están bien, extrañándote mucho, les tuve que decir que te habías caído pero que no era nada grave y que te estabas recuperando, gracias a Dios que se quedaron tranquilos y están ansiosos esperando a que llegues a casa.
—Qué bueno mi amor, lamento todo esto, creo que si no hubiera ido a correr y me hubiera quedado en casa con ustedes, nada de esto estuviera pasando.
Katherine que todavía se encontraba en la habitación intervino en la conversación y dijo:
—Perdón que me entrometa, pero no diga eso señora Megan, usted no estaba al cabo de saber lo que podía pasar, así que no se sienta mal, al contrario debe dar gracias a Dios de que está viva y que muy pronto se va a recuperar de todo esto, se lo aseguro.
—Gracias Katherine eres muy gentil—Dijo Megan.
—Cariño por cierto, tenemos que buscar a alguien que te atienda cuando el médico te dé de alta, porque en ese estado no puedes hacer tus cosas y además, así no puedes cuidar a los niños y por otra parte, yo no puedo faltar al trabajo.
Megan se quedó pensativa y Katherine intervino nuevamente en la conversación mientras decía…..
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Updated 45 Episodes
Comments
Dayana Sanabria
/Silent/
2024-05-11
1
Elide Rubio
y ahora que va a pasar
2023-10-14
0
Inirida Contreras
me gusta
2023-02-17
1