Un nuevo día.

Ya hemos llegado a la casa, mi mamá Ana está en la cocina, preparando la cena. Digo la "cena". Porque después de las entrevistas mis hermanas y yo, fuimos un rato a pasear, la pasamos muy bien realmente, hace mucho que no lo hacíamos.

—¡Hola mamá! Dice Valeria, dándole un fuerte abrazo.

—¡Valeria! dime, a que se debe tanta alegría?Pregunta mamá, esta extrañada ya que no son muy comunes los abrazo de esta.

— Es mucha para ser exacta, y... Te tenemos una buena noticia! — Nos mira muy sonriente, nunca para la verda, le gusta ser asi de dramática.

—¡YA! dilo Dice mi mamá, quitándose el delantal, ya muy nerviosa.

— Ya mamá cálmate, es solo que... pudimos conseguir trabajo, y las tres, juntas..Responde Verónica, cruzada debrazos y con una sonrisa de boca cerrada.

—¿Las tres?. Y como? Desde cuándo?Mi madre nos mira muy sorprendida y ya me imagino el porque!—¡Valeria! ¡Rebecca!. Trabajando?Ya me lo imaginaba. Sabía que sería por eso.

—Si mamá, porque te sorprendes tanto, ya lo sé, nunca e trabajado, pero teniendo de cerca a mis hermanitas, me sentiré más segura, y ellas me ayudarán ¿Cierto?Dice Valeria con ironía, odio cuando hace eso de verdad, crees que siempre estaremos para sus estupideces.

Yo, al contrario soy más madura, e aprendido más de mi hermana Verónica. Ella y yo no somos de andar en la calle, nisiquiera nos gustan las fiestas, ni beber, ni nada de eso. No queremos saber nada de novio, hasta encontrar al indicado.

A diferencia de que yo soy virgen, y Verónica..Pues.. No.. fue un noviazgo fracasado a los 15 años, el se fue a vivir a otro país, abandonando a mi hermana, y desde hay, no quiere saber de hombres.

— Está bien mamá, tranquila, yo las voy a cuidar, no les va a pasar nada, las tres lovamos hacer bien y vamos a conseguir más dinero, para Haci poder salir de todo esto. Hasta quien sabe, si buscamos otra casa a dónde irnosDice Verónica, sentada con mamá y agarradas de mano.

— Si mamá, ya veras, no te preocupes, si estás así por mi tranquila, es bueno trabajar así me preparo, no se cómo me valla en el futuroDigo dirigiendome hacia ellas, con mi bella sonrisas que me caracteriza. No lo puedo negar me gusta ser bella, es un don que cualquier chica deseas tener.

Después de un rato más hablando con mama, para que esté tranquila. Verónica nos llamo a un lado, a Valeria y a mi, diciendo que no le podías contar a mama donde trabajaríamos, ya que se puede asustar mucho y ponerse grave. No es por el trabajo, si no por la avenida. Ya que esa avenida está llena de masiones gigantescas y lujosas, pero no son de cualquiera, si no de los hombres mas mafiosos de aquí de Mónaco. Y una de esas mansiones, es en la que trabajaremos.

Después de una deliciosa cena, echa por mamá, todas nos dirigimos a nuestras habitaciones a descansar, ya que mañanaserá una larga tarde.

Lo que me hacía mucha gracias, era que no dejaba de pensar en el. El hombre de ojos color cielo, su cabello negro muy bien mantenido, y su cuerpo bien definido; Era realmente hermoso, sentí que mi corazón latía, pero no puede ser, tengo que quitarme esa idea de la cabeza...

Son las 5 de la mañana, me levanté temprano, para aprovechar de arreglar mi habitación y hacer un poco de ejercicio, haber si me animo un poco más.. Ya son las 6 ¡RAYOS!. Que rápido paso la hora, me doy una ducha para relajar mi cuerpo, y si así fue, me siento muy activa. La hora de llegada a la mansión FERRANDI, es las 7, así que me apuro un poco más, mis hermanas ya están abajo desayunando, unos ricos huevos con tocino que preparo mi madre, amo a esa mujer con mi vida, es la mejor mama.

—¡Wuao! te caiste de la cama Becca?Como siempre, la pesadilla de mis mañana.

— No seas idiota Valeria, claro que no, solo quise hacerlo para hacer ejercicios un rato y arreglar mi habitación.

— Me alegro hermanita, eres una joven muy entusiasta, gracias a eso llegarás muy lejos, eres la mejor de las tres lo admito.Verónica como siempre, mi más grande admiradora, no somos de tenernos envidia, nunca a pasado por nuestra mente eso, somos unidas, y nos apoyamos una con la otra.

— Bueno... ya es hora de que se vallan mis niñas, ya se les va hacer tarde, acuérdense, primero la puntualidad.Mi madre nos dice, y se levanta junto con nosotras para echarnos la bendición y un pequeño beso en la frente, sé que ya estamos grandes, pero nada como la bendición de una madre...

Ya estamos a las afuera de la mansión, esperando la señal de que nos dejen pasar, junto a las otras que también les dieron el empleo.

—Buenos días damasReconozco esa vozComo ven por aquí a su mano derecha, hay 9 sobres, cada una agarrara uno, y esa será su actividad. Ahora por favor, una por una pasará y se irá a su sitio de trabajo .Tenía que ser el, y realmente se ve muy bien hoy, y no soy la única que lo Opina, ya que las demás chicas no dejan demirarlo. Tiene un traje azul, marcando le muy bien, lo exquisito que está, y si lo admito, ese hombre, me llama la atención y demasiado.

—¡ Vaya Vaya! no está nada mal eh?Dice Valeria, quién no puede ver a un hombre guapo, y su picardía que también deja loco a cualquiera.

— ¡Cállate!Digo molesta, ella no se puede fijar en el también, yo soy quien lo quiere conquistarNo te cansas de ser tan zorra?.

— Que ¡carajo! es lo que te pasa Rebecca?Dice está fulminandome me con la miradaSolo dime qué te gusta y ya, no es para que te pongas asíiTambién la fulminó con la mirada, estoy muy molesta la verda y nisiquiera se porque?.

— ¡Ya! basta las dos, no estamos para peleas aquí, este no es el momento, ni el lugar, así que a trabajar las dosDice Verónica, mientras se retira a una habitación donde tenemos que cambiarnos y ponernos los trajes, la verda son muy descontados estos, pero no podemos hacer nada, nisiquiera exigir.

Estoy en uno de los pisos de arriba, el segundo por cierto, la verda, no es tan difícil esto, me podría acostumbrar. Estoy limpiando unos hermosos cuadros, la verda me encanta esta casa, me gusta la decoración antigua, es algo maravilloso.. bueno, al menos para mí si.

— Hola linda joven¡Oh mi dios! no puede ser..No tranquila, no te asustes, me da mucha risa la verda, ver cómo te pones cada ves que escuchas mi vozEs el otra vez, pero porque a mí, tantas chicas y solo yo soy su atención.¿Que pasa, te comieron la lengua los ratones bella jóven?.

—E..eeen, ¡No! no, como crees señor, para nada, solo me asusto un poco no lo vi — Dios no puedo más, estoy mirándolo fijamente a los ojos, no lo puedo evitar, que me estará pasando con este hombre?.

—¡Okey! está bien, solo te agradecería que no me llamaras señor, suena myy viejo para mí... Me llamo maximilian, un placer bella jóven.

—Un placer joven maximilian, ahora con permiso, tengo que seguir trabajando, y no creo que a la señora elizabeth, le guste que yo ande hablando con usted.Dije muynerviosa, y este solo me dió una sonrisa pícara de boca cerrada.

— Oh, no hay ningún problema, solo quiero hacer amistad contigo, me pareces muy simpática y creo que nos podemos llevar bien. Tengo mucho dinero , pero eso no quiere decir que no sea sociable con mis empleadas.Dice este viéndome fijamente, con las manos dentro de los bolsillos de su pantalón.Y ahora quiero que seas tan amable de decirme tu nombre.

— Me llamo Rebecca, pero me puede llamar Becca, ooh..como quiera, joven.

— Okey, un placer Becca, y bienvenida, ahora sí, te dejo trabajar, bella jóven.Oh que bien, ahora no dejará de decirme "bella jóven”. Igual me gusta, yo también ciento que nos llevaremos muyy bien...

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