capítulo 5 La doble cara de Patricia

Esmeralda tocó la puerta, de la habitación y espero hasta que escucho que dijeran pase.

Buenas tardes, señor Kovacs, ahora me toca cuidarlo a usted.

No me digas señor, me haces sentir más viejo y solo tengo 65 años, pequeña, trae esa silla y siéntate Cerca de mí, anda.

Bueno, no sé de qué otra forma llamarlo, si la señorita Anca se entera me puede correr.

Mejor llámame como me decían de joven Ron.

Muy bien, nuestro secreto será le llamaré Ron.

Excelente y a ti te puedo decir Esme o pequeña.

Me encantaría que me llamara como usted guste, dígame ¿Le gusto el desayuno?.

Me encantó, hacía años que no comía tan sabroso, las cocineras que contrataba mi amada hija eran pésimas, pero tus enfrijoladas estuvieron supremas.

Me está avergonzando, me la voy a creer y luego ya no va a ver poder que me baje de mi pedestal eee, dime Ron que hace un rumano en México.

Es una larga historia pequeña, que con el tiempo si no me pongo más mal podré contarte.

Claro que no se pondrá mal, al contrario, estoy segura de que usted estará sano en menos de lo que canta un gallo, ya lo verá.

Dios te oiga pequeña, hace 6 meses aproximadamente en lugar de mejorar voy empeorando, mi niña ha estado al pendiente de mí desde hace tanto que ella misma ha olvidado vivir, y mi hijo con lo famoso que es, muy poco me cita y más viviendo tan lejos.

Entiendo Ron, precisamente usted se tiene que poner mejor para que su niña esté orgullosa de usted, ahora quiere que le lea algo.

No, no, cuéntame quien es Esmeralda y como llegó aquí a mi casa.

Huy no, pues ya empezamos mal, se va a aburrir a más no poder, créame mi vida, no tiene nada bueno que contar.

No me importa además así no viene esa enfermera hipócrita doble cara, abusa de mí porque estas malditas piernas no me quieren responder, pero créeme que cuando menos lo espera la voy a correr.

Tan mala es con usted.

No sabes cuánto, en este tiempo ha sabido jugar muy bien sus cartas, pero sé que con tu ayuda vamos a desenmascarar a esa intrusa que a la cama de mi hijo no dudo en meterse.

Es en serio, pensé que era su prometida, porque eso fue lo que me dijo ella.

Está loca, claro que no, apenas ayer se fue mi hijo, porque tiene un proyecto muy importante, pero en el segundo día, ya sabes la escuche cuando se metió al cuarto de mi hijo, y ya te imaginarás lo que pasó, mi único hijo varón y me apena decirlo, pero es un mujeriego de primera, se acuesta con todo lo que tengas faldas, no quiere sentar cabeza, al día siguiente me hice el dormido y no creerás que el muy sinvergüenza ya casi tiene sexo mismo, si no es porque se me ocurrió moverme, lo hacen aquí sin ningún pudor.

¡Santo Dios!, Pero qué cosas anda viviendo usted, no me quiero ni imaginar tal escena.

Bueno, bueno, no hablemos más del inconsciente, mujeriego, libertino de mi hijo y cuéntame de ti.

Bueno mmm tengo 20 años, hace poco terminé mi carrera técnica en Trabajo Social, vivo con mis padres y mis dos hermanos.

Pero cuéntame más.

Bueno mi hermano se casó dos veces y las dos veces se divorció, por eso vive ahora con nosotros, mi hermana que es más chica está estudiando y mi papá es jubilado y mi mamá ama de casa o bueno eso dice ella.

¿Por qué dices eso?.

Pues porque es lo menos que hace, solo se la pasa en la calle, ella vende oro laminado y según ella se va a vender y se va desde temprano para llegar tarde, esperando que yo en este caso haga de comer y tenga el quehacer hecho y todo lo que incluye ser una ama de casa.

Entonces puedo intuir que en tu casa no eres muy apreciada, ¿verdad?.

Pues… quiero pensar que sí, porque si no, para qué me tuvieron, si no me iban a querer, quiero pensar que solo es por la situación económica que se vive en estos momentos, aunque ya han pasado 5 años de la pandemia, usted mismo se habrá dado cuenta de que poco a poco todo se fue acomodándose, claro está que para unos es más difícil que para otros.

En eso te doy la razón, y lamento que estés pasando por esa situación pequeña.

No se preocupe, quiero a mi familia y eso ha hecho que aguante tanto tiempo, solo espero no rebasen mi límite— comento con una sonrisa algo triste—.

Esmeralda amaba a su familia, pero cuando veía como la trataban en su casa muchas veces pensó si realmente era hija de sus papás, ella pensaba que unos padres amarían a sus hijos de igual manera, pero en su buen corazón siempre guardaba la esperanza que solo fuera momentáneo.

Veamos lo que pasa con el apuesto mujeriego Dragos Kovacs, él se encontraba en una habitación del hotel más lujoso de la ciudad de México, The St. Regis México City Hotel, se encontraba en una de las tantas habitaciones con vista al castillo de Chapultepec, le encanta el diseño del hotel y así poder contemplar la maravillosa construcción del castillo.

Sigues ocupado animal, — dijo Dragos de forma burlona por una llamada telefónica—.

Sí, ya vas rumbo a tu país.

No estoy hospedado en el The St. Regis México City Hotel, habitación ***, te espero, no tardes.

Dragos, espero a su mejor amigo mexicano, Ernesto, que conoció en un puesto de tacos cuando se perdió por primera vez en aquel país que amaba tanto, le enseñó a hablar mejor el español, le dio tour por México y él amablemente le ofreció trabajo en una de las constructoras que trabajaba, se contaban todo, por momento sintió que su amigo Ernesto era mucho muy inferior a él, en todos los sentidos, pero el simple hecho que le tendiera la mano en un momento de tensión y preocupación para él, fue más que suficiente para ser más cercanos.

Hasta que llegas.

Que haces tú aquí todavía, acaso tu padre se puso mal, o mejor, te peleaste con tu hermana.

Ninguna de esas, he conocido a la mujer más hermosa que me he topado en México desde que estoy aquí.

Me estás hablando en serio Dragos, solo por una mujer sigues aquí.

Sí, ni yo mismo sé lo que me pasa, la invite a tomar un café hoy a las 8 nos quedamos de ver en el Vips de Buenavista.

Está un poco retirado, no crees, no pudiste buscar otro hotel más Cerca.

No esté, me encanta y lo sabes.

Bueno, bueno, explícame cómo la conociste.

Dragos le explico cómo la conoció, mientras él le decía con lujo de detalle todo, Ernesto abría y cerraba la boca como queriendo decirle algo, pero se aguantaba hasta que el término.

Lo que me dices, es algo como de novela romántica, estás seguro de lo que me dices, te conozco y también conozco a las mujeres con las que has salido, y nunca me hablaste de amor a primera vista ni esas cursilerías como las llamas tú.

Lo sé Neto, pero me gusto demasiado, el único inconveniente que le veo es que se ve demasiado joven, creo que ha de tener como 21 si no le calculó mal.

Pinche asalta cunas, pues vele midiendo el agua a los camotes, porque es una niña a comparación tuya que estás bastante corridito.

Tú y tus dichos, pero está bien, seré cuidadoso.

Así siguieron platicando, hasta que llegó la hora de irse y llegar antes que su mujer.

Por otro lado, esmeralda se despedía ya de sus nuevos amigos y del señor Kovacs, por último se despidió de la señorita Anca y se fue corriendo al metro para llegar antes a su cita, sabía que no podía tardarse tanto, tenía que llegar a su casa, o bueno eso pensó ella.

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