Episodio 4: Violeta

^^^Juliette Laurent.^^^

Ayer no tuve tiempo para ver mi rostro en el espejo del baño. Hoy sí lo tuve.

Me sorprende haber olvidado incluso algo tan importante como mi apariencia, pero me sorprendió más ver el violeta oscuro que vive en mi cabello ondulado. Ojos grises como Elliot, al parecer tengo esa coincidencia con mi hermano mayor.

Sinceramente, no quiero presumir o aumentar demasiado mi ego, pero diablos, soy realmente hermosa. Mi cabello es largo, mis pestañas también lo son y tengo una piel extremadamente suave y bien cuidada.

—Incluso mis dientes están en perfectas condiciones.—Abrí enormemente la boca para contemplarme de el espejo.

Me sorprendió ver a Christ cuando abrí los ojos. Mi esposo es alto, con un cuerpo delgado pero sus músculos sobresalían en su camisa blanca bien planchada.

Caroline dice que es un monstruo, pero jamás en la vida había conocido a uno tan apuesto y seductor. En ese momento me sentí pequeña y fuera de lugar, me dije que un hombre como él no podría ser mi esposo. Eso ha cambiado ahora porque soy jodidamente tan atractiva como lo es él.

—Con este rostro es imposible sentirse inferior o intimidada por su presencia.—Me dije a mi misma.

Yo soy su igual y debería grabarme en la cabeza que Christ no puede pisotearme. Monstruo o no, mi esposo debería sentirse afortunado de tener a esta hermosura como esposa.

—Bien.—Le sonreí a mi reflejo.—Ahora tengo un poco más seguridad de mi misma antes de conocer mi nuevo hogar.

Mi hermano y Caroline intentaron convencerme de quedarme una temporada con ellos, al menos el tiempo suficiente para recuperar parte de mis recuerdos, pero los rechacé.

No necesito aplazar lo inevitable y el doctor dijo que había una posibilidad de nunca recuperar mi memoria, así que mi mejor opción es acostumbrarme a mi nueva vida de casada lo antes posible.

—Claro, ¿qué puede ir mal?.—Intento ser optimista mientras regreso al cuarto y me siento en la camilla.—¿Y si mi esposo fue el causante de mi accidente?.—Me encuentro preguntando con la vista pegada al techo tan blanco como las paredes que rodean la habitación.

Niego con la cabeza e intento borrar esa idea de mi cabeza, no necesito comenzar a desconfiar de mi marido sin antes siquiera conocerlo. No sería justo para él cuando todavía no ha tenido la oportunidad de mostrarme su verdadero ser.

3 horas después y mi vestimenta había cambiado del camisón azul claro que el hospital me había entregado por una falda blanca holgada y una camiseta de manga larga con las letras "No suelo olvidar una cara, pero con usted haré una excepción" en el centro de mi pecho.

Letras blancas y claras, con hermosas curvas que llamaban la atención porque el resto de la camiseta era de un negro profundo.

Caroline tiene un humor bastante extraño como para haberme enviado justamente una camiseta con dicha frase. Aunque debo admitir que me encantó el conjunto que preparó para mí.

Elliot, por otro lado, apostó por lo más simple cuando me trajo la ropa interior que Caroline y mis padres (incluso mi esposo) olvidaron traerme ayer.

La recibí avergonzada, pero agradecida de tener un cambio de ropa y unos zapatos de plataforma baja. Ahora gracias a ellos podía marcharme del hospital sin ese horrendo camisón.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***