Capitulo 14

Cuando llegaron a la dirección, observaron el cartel que había en el local.

Helena levanto la cabeza—Mr. George Tattoo y Accesorios ¿Ehhh?

Nicholas observo sus notas—Uhm, parece que es aquí, uhm... esperaba otra cosa...

Ingresaron al local, se sentía el ruido de la aguja dentro de las instalaciones, el Heavy Metal estaba sonando en la radio, una empleada detrás del mostrador se acercó.

—¡Hola amigos! ¿En qué puedo ayudarlos? ¿Buscan algo en especial? Hoy tenemos un treinta por ciento de descuento en cualquier tatuaje a elección ¿Quieren ver los lindos modelitos que tenemos? ¡Están bellísimos! —Exclamo abriendo una carpeta ante ellos.

Nicholas se rasco la mejilla algo nervioso.

—Esta mujer puede venderle condones a un simio si quisiera—Musito a Helena.

Helena rio—No, gracias—Comento.

—Estoy buscando a Mr George, por algo en especial—Menciono Nicholas.

—Los turnos están completos por hoy señor.

—Solo quiero hablar algo con él.

—Está trabajando, pero cuando acabe con el cliente le aviso que lo buscan, no le gusta ser interrumpido mientras esta con un cliente.

—¿Puedo esperarlo?

—¡Claro! Tomen asiento—Señalo los sillones.

Luego de dos horas salió un cliente del interior del local, le pago a la empleada y se retiró, poco después ingreso de adentro en musculosa oscura y Jeans holgados una persona, tenía todo el cuerpo tatuado, incluso su rostro, llevaba el cabello largo recogido en una coleta, sus ojos eran verdes, se colocó unas gafas y bebió una tasa de té de frutilla que traía en su mano.

—Jefe, lo buscan.

El sujeto los observó y se dio cuenta de lo que éran al instante—Oye Chloe, cierra unos minutos el local, da vuelta el letrero, diles a los demás clientes cuando vengan que en unos minutos seguiré atendiendo.

—¡Si jefecito!

Chloe tenía una onda Gótica, vestía toda de cuero, botas, pantalones y campera oscura, tenía un collar con la cruz invertida, pulseras con tachas en sus muñecas, su cabello oscuro era lacio y caía hasta su región lumbar, tenía un delineado en sus ojos, lo que le hacía resaltar sus ojos marrones.

Nicholas observo con desconfianza a la empleada cuando le echo llave a la puerta.

—Síganme—Menciono con seriedad Mr. George.

Nicholas y Helena se miraron y lo siguieron de atrás, caminaron hasta el lugar donde había una camilla y sus instrumentos de trabajo, George se sentó en una silla y siguió bebiendo su te.

Ya no se sentía tanto el Heavy Metal de la entrada, al menos no tan fuerte.

—Okey... ¿Quiénes son? ¿Qué demonios quieren conmigo?

—Yo hable contigo hace un tiempo atrás, por documentación...

—Mucha gente habla conmigo por lo mismo...

—Escucha, necesito papeles falsos para poder desenvolverme con tranquilidad al menos yo, necesito trabajar, de cualquier cosa...

—¿Por qué? ¿Qué hiciste? ¿Mataste a alguien?

Nicholas desvió la mirada—Es una organización... me buscan, quieren usarme para ayudarles en sus locos experimentos.

—¿Kamus?

Nicholas asintio.

—No puedo asegurarte que te libraras de ellos, pero al menos quizás ella se salve.

—¿Por qué dices eso? —Inquirió Helena con desconcierto.

—Ellos buscan sujetos raros, y tú al parecer captaste su atención, además si te quieren usar para experimentar con personas quiere decir que tienes conocimientos y eso para ellos vale aún más.

—¿Qué sabes de Kamus?

—Solo los rumores que corren en las calles...—Bebió un sorbo de té—Parecen una pareja dispareja, uno es Luz y el otro Oscuridad, ese niño portara ambas cosas, eso es un peligro.

—Quizás por eso nos llevamos bien, ¿Por qué dices eso?

—Porqué o se tiene luz o se tiene oscuridad, nunca hay un equilibrio, y siempre una de ellas termina opacando a la otra, controlar las dos partes será todo un desafío para ese niño.

—¿Por qué lo dices?

—Porque mis padres eran como ustedes—Unas líneas comenzaron a recorrer su rostro, además su iris izquierdo se transformó en un rojo brillante, la mitad de su cabello se volvió de un oscuro intenso mientras que la otra mitad se volvió de un blanco brillante—Esto se consigue cuando dos dones que se repelen se controlan con exactitud, es extremadamente raro, ese niño, deben ocultarlo lo mejor que puedan, hay ciertos Arch que no pueden tener hijos por los dones que poseen, terminan interrumpiéndose en el trayecto, es fascinante que tu mujer lo haya conseguido, mis felicitaciones, pero estoy seguro que no habrá otro bebe, no con el claro—Señalo a Nicholas.

Helena y Nicholas se quedaron con la boca abierta, luego de eso el sujeto volvió a la normalidad—En fin, ¿necesitan papeles, cierto? —Apoyo su tasa sobre una mesita y soltó un bostezo—Meh, necesito vacaciones.

—No sabía eso...—Menciono Nicholas—¿Cuándo estarán nuestros papeles?

—Vuelve mañana, a esta hora, y trae efectivo.

—Mencionaste a Kamus ¿Qué sabes de ellos?

—Dicen que la cabecera de la organización es manejada por el Matrimonio Delacroix, Lilly y Zelig, dos seres absolutamente despiadados, sus dones son desconocidos, sin embargo sus nombres entre los Arch son de temer, son extremadamente ricos, y controlan muchos mercados en el mundo, eso es grave, pueden atacar a la población por donde más le duela si quisieran, y lo harán, tenlo por seguro que en un futuro someterán al mundo, en fin, no creo estar vivo para ver lo que sucederá, será lamentable, un caos total, sin embargo, un día nacerá un líder entre los nuestros y levantara la humanidad desde las cenizas, reunirá grandes aliados, eliminara las divisiones entre ambas razas, acabara con el odio, destruirá a quienes usen estos dones para generar terror y creara un nuevo mundo, ojala vivas para ver eso y formes parte de algo grande y si no es así, asegúrate de que ese niño no caiga en las manos equivocadas.

—¿Por qué hablas así? —Inquirió Helena.

—Me diagnosticaron cáncer de colon hace unos meses, así que mi lapso de vida no será muy largo, ¿qué ironía no? Podemos curar cualquier herida en nuestro cuerpo, pero no podemos librarnos de las enfermedades terminales que consumen a los humanos pese a que tenemos la habilidad de regenerarnos, a fin de cuentas, tan distintos no somos...creo que el complejo de superioridad que nos han transmitidos nuestros padres lo aplicamos mal, me agradan los humanos, son interesantes, jamás los vi como seres inferiores—Sonrió levemente observando un cuadro donde salía posando con Chloe sonrientemente.

—Lo siento, uhm...deberías tomar un descanso, vivir tranquilamente, ya sabes... viajar es bueno...

—Me gusta el trabajo, la paso bien aquí.

Helena lo observo y sonrió—Él quiere a la chica.

George sonrió y desvió la mirada—Tu mujer es astuta.

—Es increíble—Menciono Nicholas.

—¿Trajiste lo que te pedí cuando hablamos?

Nicholas asintió—Si aquí esta—Saco un sobre con dinero, fotografías de ambos y se lo entrego.

—Vuelvan mañana, como a esta hora, tendré sus papeles.

—Muchas gracias—Menciono Nicholas.

Se retiraron del local y anduvieron dando vueltas, preguntando por algún lugar donde alquilen habitaciones por día hasta que llegaron a un hotel de paso, Nicholas le pago por adelantado lo de tres días y se registró con un nombre falso.

Cuando pusieron un pie dentro del cuarto observaron una cucaracha caminar rápidamente por al lado del pie de Helena, ella la piso al instante.

—Maldita sea, esto es un cochinero—Espeto Nicholas.

—Peor es nada ¿no? —Se encogió de hombros— Aparte por el precio era de esperarse.

—Dios mío... iré por cosas para desinfectar el lugar, enseguida vuelvo—Nicholas se giró y paso por al lado de su mujer, tomo el picaporte y se detuvo—Si no vuelvo en una hora lárgate de aquí con él bebe.

—Bien.

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