El viaje iba encaminado hasta que en la madrugada un desperfecto detuvo el coche, comenzó a salir muchísimo humo desde el motor, salieron del carril y se estacionaron en una orilla.
Nicholas descendió con rapidez del coche y abrió el capo, un humo denso le impidió ver hacia el interior del motor, de todas formas ninguno de los dos tenían conocimientos técnicos sobre mecánica, estaban jodidos y en plena carretera en la madrugada, la peor situación que podia suceder.
—¡Puta mierda! —Exclamo Nicholas dándole una patada al coche—¡Porquería!
Helena descendió con el niño en brazos— ¿Qué sucede? ¿Puedes arreglarlo?
Nicholas la observo entornando la vista—En mi vida use una herramienta, Helena, a no ser instrumentos quirúrgicos, lo máximo que he hecho es cambiar una rueda del coche.
—¿Y qué haremos? —Inquirió Helena con preocupación observando hacia los alrededores la oscuridad absoluta.
—El motor se sobrecalentó, no se—Se rasco la cabeza—Tendremos que abandonar el coche, con las armas y la comida, solo carguemos el bolso del bebe y las pocas prendas que tenemos, tomemos una pistola cada uno y lo demás déjalo, buscaremos algún aventón hacia la próxima ciudad, ahí conseguiremos estadía y un coche nuevo.
—Me parece bien.
Nicholas cargo los bolsos mientras Helena cargaba el niño, comenzaron a caminar por la orilla de la carretera, esperando ver un coche que los llevara, sin embargo, el tiempo pasaba y nadie transitaba, pasaban solo camiones de carga, le hicieron dedo para que parara pero no se detenían o simplemente no los veian.
La temperatura descendía, Helena sentía frio.
—Descuida, todo estará bien.
—Lo sé, saldremos de esta situación juntos—Helena le regalo una sonrisa a su esposo.
De pronto un automóvil se frenó lentamente detrás de ellos, se giraron y observaron la ventanilla descender de uno de ellos, un hombre los observo— ¿Están bien? ¿Qué hacen caminando en la nada?
—Mi coche se descompuso más atrás ¿Podría acercarnos hasta la siguiente ciudad? Necesito un mecánico con urgencia, le pagare bien por el favor—Menciono Nicholas.
El sujeto observo al conductor y luego se giró hacia Nicholas—Suban.
—¿Puedo guardar mis cosas en el Baúl?
El sujeto asintió, se bajó y abrió el Baúl, observo un hombre de unos cuarenta, cabello corto oscuro, usaba una sudadera oscura y pantalones deportivos.
—Mala noche para quedarse varados ¿Qué hacían? ¿De vacaciones?
Subieron los bolsos y caminaron para ingresar dentro.
—Vamos a visitar un pariente enfermo—Respondió Nicholas.
—Ahh... que pena.
Cuando Nicholas abrió la puerta de los asientos traseros, observo un muchacho de unos veinte años, tenía puesta una campera con capucha, usaba gorra, vestía Jeans azules y zapatillas blancas, el joven lo observo y luego ladeo la vista hacia el camino, Nicholas y su mujer no desaprovecharon la oportunidad que se les había presentado y subieron al coche para seguir así su destino.
—Menos mal que los vimos, es peligroso andar solos y más en la noche—Menciono el conductor.
—Lo sé, pero no nos quedó otra opción.
—Nosotros volvíamos de viaje, el hermano de Freddy—Palmeo a su compañero de al lado—Toca en una banda, se dio un concierto de lujo, lleno el local en Illinois.
—Genial, felicidades.
—Debió estar muy bueno—Menciono Helena
—De pelos—Comento el conductor.
—¿Y a que se dedican? —Inquirió el conductor.
—Soy Cirujano.
—Vaya, debe ser interesante esa profesión.
—Tiene sus cosas buenas y malas como toda profesión.
—Lo imagino.
—¿Cuánto tiene el niño? —Inquirió Freddy—Se ve tan pequeño.
—Algunos días—Respondió Helena.
—Felicidades—Comento Freddy.
Recorrieron la ruta 65 varias horas cuando de pronto el conductor se detuvo.
—Disculpen pero me estoy orinando, se bajó del coche y camino hacia los arbustos a paso rapido.
Helena y Nicholas se miraron a los ojos,
Los minutos pasaban y el conductor no regresaba.
—¿Qué le sucede a Carl que no regresa? —Inquirió el joven sentado al lado de Nicholas.
—Voy a ver—Menciono Freddy.
Todos se bajaron del coche, observaron al sujeto atravesar los matorrales en busca de su amigo, sin embargo luego de unos minutos tampoco regresaba lo que puso el ambiente bastante tenso.
Helena se acercó a su esposo—Algo sucede... —Musito.
Nicholas asintió.
De pronto observaron a los dos sujetos caminar hacia ellos y cuando estuvieron a una distancia prudente sacaron una pistola cada uno y les apuntaron a abos, incluso el más joven detrás de ellos los tenía en la mira— ¡Quédense quietos! ¡Denme todo lo que traigan! —Exclamo Carl.
Nicholas soltó una carcajada—Era demasiado bueno para ser real, tus actitudes no coincidían con lo que tu rostro reflejaba, no estuviste ni cerca de engañarme.
—¡Denme el dinero! ¡Me llevare a la puta de tu mujer! —Exclamo levantando la voz.
—No tienes idea de con quienes te topaste—Menciono Nicholas tapándose un ojo.
Helena se giró y comenzó a caminar—Iré al coche.
El más joven le apunto con el arma — ¡Quieta zorra! ¡No te muevas! —Vocifero furioso.
Helena corrió hacia el con su bebe en brazos, de entre la manta del bebe saco un arma, el sujeto le apunto y disparo, Helena brillo un instante y desapareció de su vista, apareció al lado de el con la pistola en la mano izquierda apoyándola en la sien del sujeto, mientras que con la derecha sujetaba él bebe.
El joven se quedó horrorizado, paralizado, la observo de soslayo completamente perplejo.
—Basura.
Jalo el gatillo realizando un asesinato instantáneo, el cuerpo cayo hacia un costado, inmóvil en la fría tierra.
Nicholas apareció detrás de ellos sorprendiéndolos, le apoyo el revolver en la cabeza a Carl y le soltó un disparo.
La sangre salto hacia delante de Freddy, se quedó pasmado viendo caer el cuerpo de su compañero al suelo.
Se giró hacia Nicholas apuntándole con el arma sin embargo desapareció de su vista — ¿Qué mierda son estas personas?— Observo hacia los alrededores y cuando se giró hacia atrás se encontró con el revolver de Nicholas en su frente, observo su ojo rojo, brillo intensamente.
—¡Ah! ¡Por favor no me mates! —Exclamo aterrado.
Nicholas lo levanto del cuello, guardo su arma en su cintura, los pies del sujeto se elevaron del suelo, tomo con su mano libre el brazo que sujetaba el arma del rufián.
Con desespero trataba de liberarse del poderoso agarre de Nicholas.
—¿Qué planeaban? ¿Matarme? ¿Violar a mi esposa? ¿Robarnos lo poco que tenemos? —Inquirió con cierta mofa—Ahora yo les robare todo lo que tienen, incluso su patetica vida.
—No...suéltame...
—No puedes engañarme...—Nicholas lo observo con su ojo.
—Te... lo...suplico.
—No dejare que nadie lastime a mi familia—El cuello del sujeto trono en su mano y en ese instante el cuerpo se aflojo completamente, lanzo el cuerpo al suelo y camino a paso rápido hacia el coche.
Se subió al automóvil y observo a su esposa—Todo está bien—Puso en marcha el coche y avanzaron nuevamente en la carretera.
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