Capítulo 7

Eran las nueve y media de la noche, y todos, estaba expectantes, esperando que el Duque hiciera su entrada, pero al parecer eso no sucedería pronto, después de dar unas cuantas vueltas, en el salón, me acerque a Lara, Livi y Margaret, que están ansiosas y mirando para todos los lados esperando que llegará el objeto de su observación, tomé un trago de ponche y disfrute escuchar algunas canciones, especialmente "Hello" de la cantante británica Adele, esa canción siempre me había sentir un poco triste, pero me gustaba mucho, fue puesta varias veces en el transcurso de la fiesta, algunas parejas bailan, pensé que sería lindo poder bailar esa canción con Alan, en ese momento mire mi teléfono, el tiempo avanzaba de prisa, ya casi eran más diez y todavía no están aquí, pensaba irme, cuando Lara me agarro de un brazo y me llevó a donde estaban Livi, Margaret y otras personas,

- ¿Te pensabas ir? Todavía es temprano.

- Tengo clases mañana con el señor Green y no quiero llegar tarde, le conteste a Lara.

- Espera un poco más, nos iremos juntas en un rato.

Asentí con la cabeza, y dejé que el tiempo pasara, pero ya eran las once y media, todos estabas animados, unos más que otros, hablaba entre sí, y se divertian, no fue hasta las once cuarenta y cinco, cuando sonaba "Hello" por décimas vez, que llegó por quien todos esperaban, las chicas salieron corriendo, y todos los corearon, yo me quedé quieta en el mismo lugar, solo miré mi teléfono, a ver si Alan, me había escrito o llamado, y ninguna de las dos cosas, estaba un poco decepcionada; miré hacia donde estaba el tumulto y del Duque solo pude ver que tenía el pelo negro, tampoco me acerque a mirar, busque un asiento, para esperar a las chicas, presentía que la noche iba a hacer larga,

- Hola

Me dirigió a mí un chico rubio, muy guapo, no lo había visto nunca antes,

- Te he estado observado, y veo que eres la única que no está aquí para ver a Percy, pensé que todas las mujeres del mundo, se querían derretir a sus pies.

- ¿Tú eres?

- Lo siento, soy Evans Smith. Estoy curioso por ti, ¿por qué no te gusta Percy?

- Señor Smith, no me puede agradar o desagradar alguien que no conozco.

- Tienes mucha razón, entonces no está deseando ser una Duquesa, como todas las demás chicas aquí.

- Cada persona tiene sus sueños, deseos y aspiraciones, no juzgo a los demás por eso.

- Sí que tienes respuestas interesantes para todos. ¿Quieres bailar?

Me ofreció su mano, pero no la tomé, este Evans no me agradaba, no sé, había algo en el que me hacía querer estar lejos de él, es como un sexto sentido, que me decía este chico no es bueno aléjate,

- No, gracias.

Me alejé del chico, todos rodeaban todavía al Duque y no habían señales de que Lara y las demás se fueran, así que decidí, salir del salón, ya en la puerta, pude respirar el aire fresco de la noche, me quedé parada un rato en la entrada con la esperanza de que alguna saliera, pero ya eran más de más doce y cuarenta; y nadie más salía,

- ¿Ya te vas?

Ese hombre otra vez,

- Si, Le respondí secamente.

- Te acompañó.

- No es necesario.

- Ya es tarde una chica bonita no debería andar sola.

- Vine sola, me puedo ir sola.

Comencé a caminar, no era normal, ese tipo me quería molestar, camine tan rápido, que me dolían los pies a causa de las zapatillas, así que me senté, cuando puede encontrar donde, falta poco para que pudiera llegar al dormitorio, pero los pies me estaba matando, así que me quite las zapatillas, me decidí a terminar de llegar descalza, había pasado un rato, cuando me levante para irme,

- Están muy linda en ese vestido azul.

Al voltear, vi por fin a Alan, es un traje, que a pesar de las luces del campus pude distinguir que era azul, se veía absolutamente guapo, al parecer estaba en la fiesta, pero ¿dónde?, por más que busque y mire, no lo vi.

- Tú también te ves bien.

- ¿Por qué te fuiste de la fiesta?

- Todos rodeaban al Duque como lobos hambrientos, está esperando a mis amigas, pero se olvidaron de mí, así que como tengo clases temprano preferir salir.

- ¿Tú no me estaba esperando?

- Sí. Pero como no llegabas pensé que no ibas a venir y salí.

- Estás descalza ¿que paso?

- Camine muy rápido y me lastime un poco los pies, no es nada serio.

- Te vas a enfermar, hace frío todavía, déjame llevarte.

- ¿Qué?

No perdió tiempo y me levanto, en sus brazos como si yo fuera una pluma, instintivamente me agarre de su cuello, nos miramos, por un instante, era la primera vez que me cargaba un hombre que no fuera mi papá, le señale que debía tomar, las zapatillas y el bolso, se agachó conmigo en brazos, tomó mis cosas, y comenzó a caminar hacia mi dormitorio,

- ¿Tienes frío?

Al parecer se percató de que comencé a templar un poco, debido a los nervios,

- No, es solo... nunca un hombre me había cargado además de mi padre.

- Entiendo.

Sonrió complacido con lo que yo había dicho,

- Entonces solo deja que yo y más nadie te cargue ¿está bien?

No tenía que contestar, a lo que había dicho, que era eso, una confección o algo, no renta experiencia previa en el romance así que no puedo interpretar sus palabras con claridad, ya casi habíamos llegado, solo varios pasos más y estaría en la puerta del dormitorio, los pasos SD agotaron y llegamos, intente bajarme de sus brazos de inmediato pero me retuvo,

- Tengo algo que decirte,

- Sí.

- Tengo que salir unos días, así que no te podré ver, es solo una semana, entonces quiero dejarte algo para que me extrañes,

- ¿Qué es?

En ese momento me bajo, poniendo mis pies, sobre sus zapatos, y me beso, ese era mi primer beso, sentí que mi corazón se aceleraba, fue un besos suave, tierno, nuestros labios fusionados hasta que no pude respirar.

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