Argumento

¿Y si me suicido?

Desde niño he intentado ser alguien perfecto, perfecto para ella, solamente quería que por una sola vez me felicitara.

Practiqué deportes, leí muchos libros y quise aprender a dibujar como mi hermano. Pero aun así, nunca pude alcanzarlo.

Y mientras los días pasan me siento más cansado, llegué a punto en donde comencé a ver personas que son invisibles para otros, y también escuchar voces que no puedo callar.

No quería hacerles caso, pero ya no podía ir en contra de ellos.

—De alguna manera esperaba algo como esto. —La miro con irritación.

—Acabas de cagar mi debut como asesino. —Ella ríe a carcajadas.

Esa fue mi primera víctima, que vergüenza mencionarla. Aún sigo guardando sus dientes. Son parte de mi colección.

Cualquier que es como yo, solamente queda dos lugares al que enviarte, a mí me tocó ir al psicólogo. Creo que salí ganando en esa. Conocí a la persona que más amo. Es algo tímido, por eso lo secuestre y lo escondí en mi sótano. De vez en cuando soy algo celoso.

Planeo matar a mi familia, creo que todos tienen una fantasía parecida. Siento que está es mi naturaleza y como dice Cien, no debo sentirme culpable por ser así, esto es un logro y va a ser el mayor de todos.

Odio el dolor aunque siempre ando cortando mis muñecas. Siento que el universo me mantiene vivo como castigo, o soy tan inútil que ni para matarme sirvo. Han sido tantos intentos y no entiendo como carajos sigo vivo.

Siento que esa mujer estaría feliz si no estuviera, aún no entiendo por qué me trajo a la vida, recuerdo como me miró con desagrado y me llamó loco, solamente porque le apreté el cuello, ni siquiera había sido mi culpa.

Alexander dijo que tenía una extraña enfermedad, pero eso que me importa, por qué me lo cuenta ¿quiere que sienta pena o algo? Qué mal, no puedo sentir pena por alguien como él. No sabe cuánto lo odio.

Cero, ese personaje que me daba miedo terminó siendo alguien tan cercano, él es mi amigo y también mi cómplice o yo soy su cómplice, al final los dos o mejor dicho los tres estamos en eso.

Cristal, no sé qué opinar de ella. Hubo un tiempo en donde confiaba en ella, pero eso quédó en el pasado y jamás volverá a ser lo mísmo, no cuando ella siente miedo de mí. Mejor que se quede con su novio, él la «protegerá»

—Te he dicho que no podemos. —Uy, qué mal recuerdo.

Piensan que la edad importa, a mi no me importa, si quiero a alguien sea el doble de mi edad, de que lo hago mío, lo hago. A veces escuchar las opiniones está de más.

¿Y si no me ama? Cómo no amar a alguien como yo, un brillante pelo rojo y unos ojos rojos como la sangre —Teñido y pupilentes—.

Soy lo suficientemente guapo, lo creo. Pero si aún así no me ama. Lo obligaré a amarme.

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