La Historia de mi vida 2

Esta es mi historia, como mi vida cambio con una persona que llego sin previo aviso y me devolvió la alegría por la vida.

Mi nombre es Uriel capell Alcalá, soy nacionalizado en México, para ser preciso en Guadalajara, Jalisco.

Tengo una hermana mayor, ella es ama de casa y es muy buena hermana.

Soy el fundador de una pequeña empresa de exportación de lácteos a otros países, mi empresa está aún en crecimiento, pues la funde hace más amenos dos años, antes de eso me encargaba del concesionario de automóvil que era de mi abuelo.

Mi madre es mexicana y mi padre es de estados unidos, pero toda su vida ha vivido aquí, mi historia comienza en los años 90, era a apenas un niño de 3  años, quien había nacido en estados unidos, inmediatamente después de cumplir mis 3 años mis papás se mudaron México por orden de mi abuelo quien vivía aquí y era un recocido empresario.

Cuando llegue aquí y conforme fui creciendo adopte el idioma español como mío, claro que mi abuelo por nada del mundo iba a dejar que perdiera mi idioma original, él siempre se dirigió a mí en inglés.

Les contaré un poco de quien o como era mi abuelo, su nombre era James capell y se dedicaba a levantar empresas y después venderlas, si se pregunta si soy millonario por la herencia de mi abuelo la respuesta es no, él no nos dejó nada, bueno a mí me da igual que no me haya dejado nada, pero a mi papá sí que le cayó mal la noticia, mi abuelo dejo todo a organizaciones benéficas en estados unidos de América y una parte en México quien fue que lo hizo exitoso, el abuelo siempre le exigió a mi padre que se superara y que triunfara y pues a si ha sido desde el 1996 cuando mi papá triunfo con su compañía, él es muy adinerado, pero creo seguirá los mismos pasos de mi abuelo(yo de ninguna manera) cosa que no me molesta.

Después de llegar a México y establecernos en el estado de Jalisco, todo cambio, antes de ello mis padres solían ser muy unidos y confiar en uno y el otro, uno de los recuerdos que tengo más presente fue cuando mamá nos llevaba al parque que estaba cerca de la pequeña casa donde vivíamos, ella amaba cocinar y preparaba ricos aperitivos, después esperábamos a papá en el parque para jugar y comerlos, realmente la relación de mis padres era muy hermosa.

En todo ese tiempo no hice ningún amigo por más de dos razones, la primera era porque yo era un niño blanco y además gordito, los niños en vez de jugar conmigo se burlaban de mí, solo se acercaban cuando mamá solía convidar de sus manjares, otra razón es que nunca fui un niño muy social, cuando alguien quería acercarse a mi yo corría lejos para no tener nada que ver.

En una ocasión se acercó una niña quizás tres años menor que yo, además igual era gordita y muy simpática, quien me invitaba a jugar, pero yo no le hice mucho caso y me fui, ella pensó que estaba jugando y me siguió hasta donde estaba mi mamá y ella le ofreció un pastel, la niña se sentó a platicar con mamá , quien nos animaba a jugar juntos pero no acepte.

Después de eso la vi en más ocasiones era igual que yo solitaria, siempre me buscaba, pero nunca jugué con ella, después de un tiempo mi papá triunfo en la pequeña empresa que fundo, qué rápido se fue a las grandes ligas, después nos mudamos de la pequeña casa donde habíamos sido felices, recuerdo que la niña vivía enfrente y cuando vio que me marchaba corrió y dijo - adiós amigo- me gusto esa palabra y le sonreí mientras me alejaba en el auto ahí es donde empezó a cambiar todo, la relación con mis padres no era buena, papá llegaba a altas horas de la noche y mamá no soporto ese ritmo de vida y pidió separarse para mí fue un golpe muy duro

mamá se marchó de casa llevando con ella ami hermana y dejándome a mí, ustedes dirán que una madre así de dulce no puede cambiar tanto, pero mi madre lo hizo, ella solo me dio un beso en la frente y se fue, me partió el corazón, mi papá no podía cuidarme¿y con quién creen que me llevo?, sí, con mi abuelo, no dejaba de tratarme mal, por mi condición física, me obligo a llevar una dieta estricta y me puso un entrenador, estudiaba desde casa y él supervisaba cada clase, clases que eran en inglés.

La universidad la estudié en Londres por sugerencia de mi abuelo que me obligo a estudiar administración de empresa, ya que ansiaba que siguiera sus mismos pasos, cosa que yo en ninguna manera haría, mi abuelo era arrogante y déspota, he hizo que me comprometiera con la nieta de uno de sus amigos, el cual después cayó en banca rota y mi abuelo termino el compromiso eso me alegro aunque no tanto que la pasaran mal y menos que mi abuelo les diera la espalda, pero así era él.

Cuando cumplí 34 años él falleció, no llore ni sentí nada, la gente de nuestro medio murmuro, que yo era igual como él y que además estaba resentido por la herencia, cosa que era totalmente mentira.

Después de un año conocí a valentina, castillo, una hermosa mujer con la que me la pasaba increíble, nuestra relación como novios duro más o menos un año y medio, después lo pensé y creí que era hora de casarnos, duramos cuatro meses comprometidos y más tarde decidimos casarnos, pero ya no era igual como cuando éramos novios, ella cambió y su cambio era muy parecido al de mamá.

El día de nuestra boda llego y yo sabía que ella se estaba arreglándose en casa de una, sé sus amigas, cuando llegue no había nadie y es que supongo que así sería por el hecho que aún faltaban cuatro horas, cuando entre no había nadie, pero quería darle una sorpresa antes de nuestra boda y la sorpresa me la lleve cuando la encuentre en la casa con otro hombre, confieso que no sentí celos, sino que me sentí aliviado eso significaba que no me iba a casar.

Salí de allí sin decir nada, solo me dijo los siento, no es lo que piensas, solo sonreí...

Uriel capell Alcalá

Mientras voy a mi casa manejando el tesla que me compre con mi primera ganancia, mi celular no para de sonar, volviendo casi desesperante poder conducir, mientras conduzco un poco más no lo soporto más y tomo mi celular para apagarlo, pero no me percato de una mujer que atraviesa sin fijarse hago lo que pueda para evitar atropellarla por la buena dirección del auto logro evitarla quedando ella ahí parada en medio de la calle con las manos en los ojos.

—¿Estás bien?, pero no recibo una respuesta, ella se ha quedado en silencio mientras me mira- increíblemente sentí. ganas de abrazarla.

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