Capitulo 4 : El extraño

Cuando Jude estaba por salir del salón rumbo a su hogar, Mark se detuvo en frente de ella tapándole la salida—Hola Jude ¿Hoy estas libre?

—Hola Mark, la verdad no, tengo que ir a algunos lados, estoy ocupada.

—Te acompaño si quieres, y si no es mucha molestia.

— ¿Quieres ser mi mula de carga?

—Lo que tú quieras, hasta tu perro si quieres, te ladro si me lo pides.

Jude sonrió—Que tonto.

— ¿A dónde vas?

—A la biblioteca a dejar unos libros que tome y voy a sacar otros, a una tienda por unos zapatos nuevos y a buscar mi celular el cual lo deje en arreglo por una falla de Display.

—Te sigo como tu perro fiel, donde vayas yo ire, donde saltes yo saltare, puedo ser tu caballo, sube arriba y monta al gran Mark.

Jude se rió de las estupideces que decía Mark—Tu y tus locuras...pero será un rato hasta que papa pase por mí, no te ilusiones.

—Está bien ¿Vamos por un helado también?

—Me encantaría, si hay tiempo vamos,eh.

***

Luego de pasar a buscar las cosas, decidieron entrar en una heladería como Mark lo había sugerido.

— ¿Cuál es tu sabor preferido Jude? —Pregunto Mark

—Mmm—Apoyo su dedo índice en su mentón—Tengo muchos gustos preferidos pero creo que me quedo con el de fresa ¿Cuál es el tuyo?

—Amo el chocolate.

—Era predecible.

—Eeeeh—Soltó una risa —Que mala eres.

Caminaron hacia unos bancos en una parque público.

— ¿Tu padre está por llegar?

—Tendría que estar aquí, se ha demorado—Se encogí de hombros—Seguro hay trafico.

—Quizás conoció a una chica.

La sonrisa de Jude se le fue—Ni lo digas, no quiero saber nada con madrastras.

—Oh vamos, ¿quieres tener a tu padre casto hasta que muera? Se le va a caer el pito al inodoro un día de tanto que no se usa.

Jude emitió una carcajada — ¡Claro que no!

— ¿No? —Levanto una ceja—A mí me parece todo lo contrario.

—Que tonto.

—Esta Jude, que celosa me ha salido.

— Nunca supe nada de tus padres? y eso que cursamos hace años juntos ¿Con quien vives Mark?

—Vivo con mi madre y mi hermano mayor, ambos se dedican a la docencia.

—Debe ser muy estricta tu madre, debe querer las mejores calificaciones.

—Para nada...aunque a veces tengo miedo de decepcionarla, de no llegar a ser lo que ella realmente espera de mí.

—No digas eso, eres uno de los mejores alumnos del salón.

—Jude

— ¿Si? —Le dio una probada al helado—Delicioso—Sonrió con satisfacción.

—Me gustas.

— ¿Uhm? —Saboreo el helado—Dime algo que no sepa, aunque valoro que me lo hayas dicho directamente.

—Me encantaría poder ser algo más, intentarlo, quizás no sea el más apuesto, ni el de mejor físico, pero puedo ofrecerte una estabilidad ¿Sabes cuál es?

—No ¿Cuál es?

—La seguridad de que viviría exclusivamente para ti, me la paso bien contigo, y sobre todo me alegras las mañanas cada vez que te veo entrar en el salón , aunque seas una jodida despistada y traigas la remera al revés de vez en cuando, vengas despeinada porque te quedes dormida, o discutas con el profesor porque lo tienes hasta la coronilla con tus llegadas cuarenta minutos tarde.

—Auch estas golpeando bajo.

—Dame la posibilidad de quererte Jude, puedo ser mejor que cualquier atleta del colegio, que cualquier chico malo como les gustan a las chicas.

— ¿Quién te dijo que me gustan los chicos malos?

— ¿Ah, no?

—Me gustan bufones y que me hagan reír.

—Que tonta—Meneo la cabeza hacia los costados—Aunque puedo hacerlo si me lo propongo, verte sonreír a diario es un placer para mi.

—Ay no te pongas meloso...

—Jude

— ¿Si?

—No me respondiste.

Ella soltó un largo suspiro—Mira, somos amigos, la llevamos bien así ¿Por qué arruinarlo?

—Entiendo—Asintió varias veces.

—Eres lindo, me gusta tu forma de ser, me haces reír mucho pero no puedo forzarme a quererte como tú quieres, eres mi amigo, me gusta que sea así, me siento cómoda con ello y no quiero cambiarlo.

—No me rendiré

—No pierdas el tiempo , hay muchísimas chicas más lindas que yo en todo el colegio.

— ¿Piensas que para mí es sencillo? Mis sentimientos no son como calcetines usados, no puedo despertarme mañana queriendo a otra chica.

—No, no lo sé, pero es tu problema, tu confundiste las cosas, ¿Somos amigos Mark? tómalo o déjalo, hablo seriamente.

El suspiro resignado—Lo tomo, por ahora...

—Jude.

— ¿Qué?

— ¿Me das un beso?

—Claro que no.

Mark rió—Solo bromeaba, ¿ahora puedo decir que todo lo que dije antes fue en broma para ver tu reacción frente a mi declaración?

—No te lo crees ni tu.

El teléfono de Mark sonó.

— ¿Uhm? Está bien mama, paso a buscar a mi hermano ahora—Corto la llamada.

— ¿Qué sucedió?

—El auto de mi hermano se averió en las afueras, tengo que pasar a buscarlo y remolcar el automóvil hacia un taller.

—Uh, que problema.

El asintió—Me tengo que ir lamentablemente ¿Quieres que te lleve a tu casa de una disparada?

—No, papa viene por mí, no te preocupes, ve por tu hermano.

— ¿Segura?

—Sí, conduce con cuidado.

—Te preocupas por mí, eso es un avance.

—Como por cualquiera.

Mark le dio un beso en la mejilla y se retiró, Jude se quedo en la dura banca esperando la llegada de su padre.

Tomo su celular y le mando un mensaje.

¿Vienes por mi papa?

***

El extraño sujeto, paso por la calle lentamente miro a través de la vidriera de una Heladería, camino varios locales hasta que se apoyo más adelante contra la pared, tome su celular y espero.

— ¿Tienes novio? —Chasqueo la lengua—Eso será por poco tiempo.

Cuando los vio salir, les tomo una foto sin que se dieran cuenta.

—Te investigare a ti también, no me agrada que me merodeen las presas.

Los vio charlar amigablemente, demasiado...

Su perfil decía Soltera en Facebook...

Tu papa no va a venir, no por el momento...

Le pinche dos neumáticos—Rio para sus adentros.

Camino hacia el parque público y se sentó en un banco alejado de ellos, donde podía observarlos con detenimiento, estudiar su comportamiento.

Tomo más fotos.

Saco un libro de su bolso y prosiguió con la lectura, en un momento su acompañante se levantó y se despidió de ella.

Cerro el libro de golpe y se puso de pie, camino lentamente hasta sentarse al frente de ella, abrió su libro en la página correspondiente y siguió con la lectura, tomo un sorbo de gaseosa y solo dejo llevarse por el mar de las letras...

Nadie sabe que te amo, solo mi alma y es muda... por ahora...Jude.

Levante mi vista hacia ella.

Nota del Autor : Si te gusta la historia, no te olvides de dejar tu voto.

Un abrazo de gol para todos.

D.P

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