Capitulo 15: " La Fiesta se té " Parte II

Kayla Marthence, segunda hija del Marqués James Marthence, una familia influyente que buscaba estar entre las líderes del Imperio Romessa.

Era difícil superar a la familia ducal De Las Rosas, pero había dos opciones para al menos acercarse a ellos, la primera un matrimonio con alguno de los hijos del Duque, y la segunda dominar el mundo social logrando conexiones que lo llevarán a conseguir sus propósitos.

La familia Marthence competía con muchas otras para lograr un compromiso entre su hija y alguno de los hijos del Duque, y aunque era menos probable debido a su no lazo sanguíneo con él Duque Sebastián, ahora también existia la posibilidad de que su hijo se casara con la hija adoptiva del Duque.

Está familia estába formada por él Marqués James Marthence, su esposa la Marquesa Edith Marthence, su primer hijo Brand Marthence y finalmente su hija Kyla Marthence.

Al parecer la opción del matrimonio con cualquier miembro de la familia Ducal fué denegada, eso fué cuando él Duque Sebastián aún vivía, pero las posibilidades de conseguir un matrimonio eran casi nulas de todos modos, por eso la segunda opción parecía ser la más adecuada para esa familia, Kyla sabía muy bien lo que su familia necesitaba para escalar en la sociedad de Romessa, ya que fue muy bien instruida en ello, lo que ella debía hacer era tomar el control de los círculos sociales que eran él futuro de Romessa, y para ello debía de volver gris a la persona que por el simple hecho de tener un apellido se suponía sería el centro de la sociedad, Calanthe.

Calanthe era una víctima necesaria en la ambición de otros, y claramente esa fiesta de té era el inicio de las acciones para despojarla de cualquier influencia que pudiera llegar a tener.

Pero Kayla no esperaba que uno de los príncipes la acompañara y menos que estuviera tan a la defensiva con cualquier cosa que se le digera.

-[ los rumores... eran todos mentiras? porqué está actuando de está forma? Con él presente mi trabajo se dificultará]

- Ver como él principe Kieran se preocupa por usted Señorita Calanthe, creo que no hay duda que tienen una exelente relación de hermanos.

- Claro que es así, y estoy muy agradecida por ello.

-[ no hay ningún indicio en sus expresiones que diga lo contrario... entonces ahora que debo hacer]

Mientras Kayla pensaba que era más adecuado hacer en ese momento, desconocieron sus intenciones, Calanthe se interesó por el comentario de una de las invitadas.

- Ya saben sobre el Duque Degon Caliban?

- Qué? Todavía hay un Duque de ese apellido? No estaba esa familia en la ruina?

- Pero acaso él Duque del qué hablas no había desaparecido cuando era un niño?

- No se sobre eso, pero escuché a mi padre decir que él joven Duque Degon Caliban ha logrado impresionar con sus habilidades al mismo Emperador y que este le otorgó la gracia de dirigir la expedición al bosque de roble obscuro...

- qué? estás segura de lo que oíste?

- Señorita- Señorita Calanthe.

Calnthe se había distraído escuchando aquella conversación, ya que la persona a la que nombraban, era un caso peculiar, antes de que se diera cuenta Kayla estaba casi sobre ella ofreciéndole un trozo de tarta.

- Señorita pude notar que no a comido nada, que le parece probar esta tarta de canela, es un manjar!

En un instante Kayla se encontró tropezando y tirando sobre Calnthe la porción de tarta de canela.

La cara de Calanthe era de horror, no por el desastre que había causado la tarta en su ropa, sino más bien por el ingrediente principal de esa tarta, al que era alérgica y ahora estaba esparcido sobre ella.

Kayla esboso una sonrisa de satisfacción y victoria pensando que había logrado hacer sentir avergonzada a Calanthe, pero más que eso Kayla trajo un horrible recuerdo a su mente.

- Que es lo que ha hecho Señorita!

- Una disculpa principe yo solo quería ofrecerle algo a la Señorita...

- Deberías tener más cuidado has ensuciado todo el vestido de Calnthe!

- No está el principe siendo un poco grosero... la Señorita Kayla solo quería ser amigable con la Señorita Calanthe...

- Es verdad, un error lo puede comentar cualquiera.

Todos hacía comentarios justificando a Kayla o compadeciendose por Calanthe, quien hasta el momento no había dicho nada.

Mientras el alboroto entre las jóvenes y el enojo de Kieran estaba en su cuspide, Calnthe tomo despacio por el brazo a Kieran quién se encontraba pardo a su lado, sorprendió por la acción Kieran miro hacia ella, con una temblorosa voz, casi como si se una súplica se tratara Calanthe le dijo.

- Podemos... irnos, Kieran quiero irme.

Kieran pudo ver algunas lágrimas en sus ojos, rápidamente recciono, algo no estaba bien.

- Si nos disculpan, cómo veran mí hermana no está en condiciones de seguir con la fiesta, le agradecemos la invitación Señorita Olivia, y... Señorita Kayla, tal vez, nos volamos a ver más pronto de lo que piensa.

Está última frase dejó desconcertada no solo a Kayla, sino a todas las jóvenes que escucharon aquello.

Kieran se saco su chaqueta y con ella cubrió a Calanthe, no dejando ver la gran mancha que había dejado el postre en su vestido. Kieran la tomo de la mano y pudo sentir como estás temblaban.

- Aguanta un poco más ya nos vamos...

Kieran nunca había visto una expresión como esa en el rostro de Calanthe, el miedo a algo que él desconocía se veía reflejado en sus temblorosas pupilas.

Apenas subieron al carruaje, Calanthe palideció totalmente y se desmayo.

- Qué demonios ocurre! Apurece Debemos llegar lo más pronto! Se a desmayado, Calanthe se ha desmayado.

Kieran bajo a toda prisa con Calanthe en brazos y la llevo a la mansión prinpal, ahí él médico principal de la familia la atendió.

Después de revisarla pudo llegar al diagnóstico de que era una reacción alérgica y que el causante de la alergia era la canela de la tarta, los síntomas encajaba con ese elemento como desencadenante.

- Me está diciendo que ella es alérgica a la canela y hasta ahora lo sabemos!

- Disculpe maestro Kieran, pero eso es algo que se sabe desde que la Señorita vino a vivir al Ducado, la madera de la Señorita les dijo a los cocineros que no preparan nada con este ingrediente para la Señorita.

- Y tú porque no lo mencionaste!

Nina se encogió ante el grito enfurecido de su maestro, debía pensar bien cómo iba a responder a eso.

- Disculpe maestro, pero ustedes no tenían relación, nisiquiera convivían así que no creí que fuera necesario...

- Cuánto tiempo estará ella así doctor?

- Bueno, ella no parece haber consumido una gran cantidad de canela, de hecho lo más probable es que la cobertura de polvo de canela que tenía la tarta, cuando se desparramó, esté polvo pudo haber entrado por su nariz... No hay un tiempo determinado, cuando su cuerpo logré bajar la fiebre no tardará mucho más en despertar, solo queda esperar.

Kieran estaba preocupado, no sabía sobre su alergia, y de pronto una fiesta de té en la tarde se convirtió en un completo desastre que puso en peligro su vida.

En un profundo sueño se entraba sumida Calanthe, en el, los recuerdos de su segunda vida revivieron.

- Es muy linda la tarde, Calanthe tomamos el té en mi jardín?

- Sí Kayla es quién me invita no puedo negarme.

- Qué bien! Vayamos entonces.

- El té de ojas verdes ha sido tú preferido últimamente, verdad?

- Si , lo recuerdas.

- Por supuesto, que te parece acompañarlo con está tarta de almendras rellenas, es muy dulce, ideal para acompañar este té.

- Gracias por tú recomendación Kayla.

- Qué lo disfrutes.

Poco después de beber unos sorbos de té y compartir unas palabras con Kayla, Calanthe comenzó a sentirse mal, un ardor terrible, cómo si su interior se estuviera quemando se extendió por todo su cuerpo, el dolor insoportable se volvía más agudo, hasta que la hizo tocer sangre.

Frente a ella su mejor y única amiga, Kayla, la veía sin imutarse.

- Ka-ka-yla me duele, me siento mal... Ayuda..

- Sí claro que lo veo, amiga, de hecho morirás.

Calanthe en medio del dolor agonizante no entendía las palabras de su amiga ni su actitud.

- Incluso en tus últimos momentos sigues siendo tan estúpida que no puedes comprender lo que está ocurriendo? Te lo explicaré para que no sigas siendo una ignorante y para que sepas que yo siempre tengo lo que quiero..

El té verde, tenía un gran toque diría de canela, ajajaj que suerte la mía quién diría que le tendrías una terrible alergia a algo tan común. Bueno vayamos al punto, Sir Denis, es él hombre con él que deseó casarme, pero sabés me entre por su propia boca qué está enamorado de ti, y qué pediría tú mano. Claro que no permitiría eso jamás, él hombre que amo, ama a otra, y esa otra eras tú, pero como te dije yo siempre tengo lo que quiero sin importar el costo, siempre has sido una molestia, ya era tiempo de que desparecieras, por sierto, será encantadora la historia de la pobre amiga desconsolada por la muerte de su mejor amiga que encuentra consuelo en los brazos de un amable e importante hombre, será increíble no creés. Sabés hay algo más, no imagino cuánto te odia tú hermano Celdik, porque sino no, cómo explicas que me haya dicho cuál era tú debilidad... Pobre de ti, hasta en el último instante de tú vida serás odiada.

Impotente en suelo con una hemorragia interna que ya era incontrolable, Calanthe veía pasar por frente a ella los últimos instantes de su segunda vida, y la que acabo con ella, fué la persona en la que más confiaba, su querida amiga Kayla Marthence.

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