Capitulo 17: aguantar tres golpes

Aún sigues enojado por eso - Le dije.

- Yo no, pero el sí - Dijo Radraug mientras su armadura se agitaba violentamente.

- El primer golpe aguántalo sin protegerte ni usar tus habilidades - Dijo Zaerat.

- Solo espero que no duela - Le dije.

A diferencia de los demás jóvenes, esta vez Radraug estaba usando su armadura.

Esta vez hizo lo mismo que la otra vez formando una flecha eléctrica entre sus manos cuando una energía naranja salía de la armadura y se fusionaba con la flecha aumentando el tamaño de la flecha y las chispas de electricidad eran más frecuentes.

La flecha salió volando de sus manos e impactó contra mi cuerpo.

Cuando la flecha toco mi pecho lo atravesó y las chispas empezaron a explotar en mi cuerpo quemándome internamente.

- Bien aguantaste el primer golpe, ahora sigue el segundo - Dijo Radraug.

- Ten cuidado, a veces cambió el modo de golpear, si viene uno potente puedo enseñarte a protegerte, pero no hay muchas opciones de protegerse y si viene un golpe con vibración será más fácil protegerte que el golpe potenciado - Dijo Zaerat.

Radraug se preparó y lanzo un golpe normal, solo que un aura rosada se mezclaba con energía naranja.

- Es un golpe de vibración, usa tu piel de sombras - Me dijo Zaerat.

Antes de que el golpe impacte en mi cuerpo me cubrí con una piel de sombra oscura.

Cuando el golpe impactó la energía fluyó por donde impactó hasta mi espalda, la energía empezó a juntarse en un solo punto y salió explotando de mi espalda.

- Esto es la primera que veo algo así - Dijo Zarov.

- Para mí también es extraño ni los generales puros pueden hacer que ese golpe no cause daño - Dijo Arusab mientras miraba a Arthur sorprendido.

- ¿Cómo hiciste eso? - Me preguntó Radraug.

- Di lo que te digo - Me dijo Zaerat.

- Tu golpe es uno de vibración que aumenta su daño al chocar contra las capas de armadura, ropa, carne y huesos de un enemigo, en este caso de un joven - Le dije.

- Muy bien explicaste mi habilidad, pero yo te pregunté ¿Cómo lo hiciste? - Me volvió a decir Radraug.

- Eso es fácil, mi habilidad de sombras no tiene ninguna capa donde tu golpe aumente su daño, así que fluyo hasta dejar mi cuerpo y explotar en el aire - Respondí ante su pregunta.

- Bueno, ahora sigue el tercer golpe ¿Cuánto quieres que use el DIEZ O QUINCE? - Me preguntó Radraug.

- A eso me refería esquivar un golpe así es difícil, pero puedo enseñarte a protegerte del golpe y dile que no se contenga - Me dijo Zaerat.

- Tengo una idea mejor no te contengas, ve con todo en este golpe - Le dije.

- Iré con todo entonces POR TREINTA - Al decirme que iría con todo la energía naranja empezó a arremolinarse en su puño y un aura plateada formo un guante de metal en su mano.

- Esto es malo, es un multi–aura - Me dijo Zaerat.

- ¿Qué es un multi–aura? - Pregunté.

- Un multi–aura no tiene color y puede utilizar cualquier aura que haya visto, estos seres son capaces de usar lo que ven sin saber como usarlas realmente se puede decir que tienen talento natural al emplear un aura que nunca vieron, pero no es así de donde yo vengo existió una familia que se dejaban notas de como usar las habilidades que veían y se las pasaban a la nueva generación esta nueva generación se encargará de pasar la experiencia de sus antepasados más la suya a la próxima nueva generación, pero no sé si es lo mismo con ese tipo - Me explico Zaerat.

- ¿Cómo me protejo de su ataque? Le pregunté.

- Usa la lanza oscura - Me respondió.

- ¿Oye estás listo? - Me dijo Radraug.

- ¡Por supuesto! - Grité con fuerza.

Saliendo a una velocidad abismal lanzó su golpe hacía mi pecho, extendiendo mi brazo - ¡LANZA OSCURA! - Grité.

Toda la energía oscura empezó a arremolinarse condensándose en una lanza antes de que el golpe impacte, la cadena se enrolló en el puño frenando el ataque.

- Espléndido ¿Quieres ir por el cuarto golpe? - Me preguntó.

- No solo me quedo con el puesto de soldado - Le respondí.

- Que lastima le agradezco a todos los que pasaron y los que no espero que tengan suerte en la próxima selección Zarov pudieras decirme cuántos pasaron - Dijo Radraug.

- Pasaron TREINTA Y TRES cadetes, DIECISIETE soldados y CINCO soldados puros - Dijo Zarov.

- Bueno, agarren sus cosas que iremos a celebrar al campo de batalla conocido como ODACREM o mejor dicho él (ABISMO) con otros cadetes, soldados, soldados puros y generales de otros exámenes - Dijo Arusab mientras se me acercaba.

- No creí que pasarías, eres sorprendente muchacho, pero recuerda que Víctor hubiera contraatacado demostrando su fuerza - Me dijo mientras estrechaba mi mano.

Ahora que lo pienso mis cosas eran la máscara que terminó destruida, mi capucha que le di a la chica que aún no sé su nombre se lo tengo que preguntar y después tengo mi bolsa con los Sigus que me quedaron después de comprar mis cosas.

Empecé a buscar mi bolsa donde tenía el poco dinero que me quedaba y mientras lo hacía me encontré con algunos cadetes que me felicitaban por haber sacado a Arusab de la cúpula mientras que otros me decían que por mi culpa algunos terminaron eliminados antes de llegar a la tercera prueba.

Lo que me sorprendió aún más fueron esos dos soldados puros que se me acercaron diciendo que yo podía aguantar el cuarto golpe, pero Radraug no se estaba conteniendo, así que lo mejor que podía hacer era negar el puesto de soldado puro.

Y llego el gran momento conocer el nombre de la chica.

- ¿No eres normal, no? - Me preguntó.

- ¿Por? - Le pregunté.

- Al darme tu capucha te olvidaste de sacar tu dinero, pareces no ser muy rico y otra cosa más me la regalas - Me dijo mientras me daba la bolsa y señalaba la capucha que tenía puesta.

- No - Le dije.

- Entiendo ahí te la doy - Me dijo mientras se la sacaba.

- No te la puedo regalar, no te conozco y no sé tu nombre - Dije y me quedo mirando.

- Me llamo Ylim - Me dijo dándome la capucha.

- Hola Ylim me llamo Arthur y no te conozco, pero si conozco tu nombre esa es una razón suficiente para regalarte mi capucha - Le dije mientras le daba la capucha y extendía mi mano.

- Es un placer Arthur - Me dijo agarrando mi mano.

Pensó Ylim.

- Bueno, nos vemos - Me dijo yéndose.

- No tienes mucha suerte con las chicas ¿NO? - Me preguntó Radraug.

- ¿A qué te refieres? - Le pregunté.

- A nada solo no confío en ella ten cuidado - Me dijo.

- ¿Por qué no confías en ella? - Le pregunté.

- Aparte de ser una Sagrane ella llegó con Zarov, Zarov dijo que la encontró en ODACREM y que quería tomar la selección de cadetes, pero solo lo haría en Lanigiro - Me dijo mientras se iba.

<¿Por qué tomar la prueba solo en Lanigiro? Y ¿Qué es una Sagrane? ¿Qué ocultas Ylim?> Pensé.

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