Capítulo 15

Julson

Ella sabía deliciosa era la primera mujer a quien deseaba poseer tanto, con quien estaba completamente cómodo con la luz encendida su cuerpo era sublime cada centímetro de su ser era perfecto besé todos los lunares que estaban en su cuerpo y deseaba más que nada volverlos a besar múltiples veces, cuando me hundí en ella sentí una pequeña descarga de electricidad recorrer mi cuerpo desea hacerlo lento pero; ella evidentemente no lo deseaba así empujo su cuerpo haciéndome rodar y quedando ella sobre mí su cuerpo desnudo sobre el mío se movía rápido y con ritmo constante sus pechos rebotaban al mismo ritmo los gemidos que escapaban de su boca eran adictivos. Solo mirarla me llenaba de placer sus caderas se movían tan bien jamás había sentido tanto placer en mí, ella sonrió levemente para después estrellar sus labios en los míos sin dejar de moverse, el sudor se hizo presente y los gemidos más constantes era evidente que ya llegábamos ambos a nuestro máximo punto de placer en un par de movimientos más la sentí temblar de placer y gemir aun más profundo mi vientre estaba ahora más húmedo su rostro estaba lleno de placer eso hizo que llegara al cielo su expresión todo su ser me fascinaba.

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No me percate en que preciso instante fue en el que me dormí desnudo con ella en mis brazos, el conciliar el sueño con alguien a mi lado que no fuera mi hermana era algo sumamente extraño y desconocido pero, con ella me sentí completamente tranquilo y en paz; me desperté sin ella en mis brazos y me alarme la busque con mi mirada por toda la habitación y al no verla me asuste aun más en un único movimiento me levante de mi cama y salí de la habitación en su búsqueda mi corazón latía rápido no quería pasar el resto de la noche sin ella en mis brazos, mi jodido corazón dejo de estrellarse con fuerza contra mi tórax cuando la vi sentada pintando en medio de la sala era extremadamente cautivador su cuerpo estaba desnudo y su cabello caía en pequeños mechones sobre todo su cuerpo este lucia desordenado pero aun así muy elegante y sensual.

-No son horas para estar trabajando hermosa mujer

-Debo terminar lo antes posible para el "periodista" que me está extorsionándolo revelar mi identidad -el sarcasmo en su voz era bastante evidente- un periodista que me ha dado la cogida de mi vida y no me ha dicho siquiera su nombre

-Cuanto lo lamento, pero, tú jamás lo preguntaste no parecía importarte -la observe aún desnuda y aunque me sentía sumamente atraído por ella lo que más llamaba mi atención eran sus hermosos ojos grises- me puedes llamar Jul o como desees

-Muy bien Jul, no estoy satisfecha pero eso no será mi tormento

-Muy bien, yo tampoco estoy muy satisfecho con que me hayas dejado únicamente en la cama -la tome en mis brazos sin importarme la expresión de asombro en sur otro que fue rápidamente remplazada por una dulce sonrisa en ese maldito momento comprendí que estaba sumamente jodido esta mujer podría llegar a enamorarme a tal punto que daría mi vida por ella- así que vamos a dormir o ¿deseas algo más?