Capítulo 1: Huida Desafortunada

Punto de vista desconocido

Un grupo de  cinco personas  corrian a una velocidad impresionante  a través de las calles de la ciudad ,

portaban capas oscuras y unas mascaras estilo japonesas   de  demonios blancos con cuernos.

—¿Cuánto falta para llegar a la casa de Leonor? —Inquirio el líder del

grupo.

—Estamos cerca, el señor pidió encarecidamente los contenedores  de Kassia y Baltazar, no podemos regresar sin

ellos o nos rebanara el cuello.

—¿Qué hacemos con la anciana?

—La mataremos, pero antes la obligaremos a que nos entregue el cofre y

el collar—Ordeno el líder.

Evadieron autos , saltaron sobre ellos y siguieron camino, subieron

sobre los techos de las casas y  saltaron

de en una en una,  de calle a calle,

cortando camino.

—¿Ya consiguió un cuerpo para Kassia el señor Heizer?

—Esta en eso.

Atravesaron  callejones a una

velocidad super humana.

Observaron a unos metros a un grupo de pandilleros moler a palos a un

sujeto para robarle.

De sus manos se materializaron espadas y antes de que se dieran cuenta

los ladrones paso el grupo por al lado de ellos   decapitándolos a todos tiñendo las paredes

de un oscuro color rojo.

—¡Mas rápido! —Grito el líder de la escuadra—¡Tenemos que llegar a la

mansión al amanecer!

—¡Si señor! —Respondieron todos al unisono.

Cuando llego el grupo de caceria  a la casa ingresaron todos rompiendo la puerta de entrada de una patada

, se dividieron todos  en su interior

revisando cada habitación, cada rincón, cada minimo espacio que pudiera servir

de escondite

Todos se reunieron a los minutos en la sala—La anciana no esta en casa

¿Qué hacemos?

El líder camino y entro en la cocina, reviso el lugar con detenimiento,

en la mesada habia una bolsa con pan, lo tomo—Esta caliente, no hace mucho que

vino.

Camino hacia el garaje y observo que el vehiculo no estaba

—¡A las afueras! ¡Esta escapando! —Exclamo el líder.

Salieron corriedo de la casa  en

busca  de la anciana, revisaron los datos

de la patente en los celulares y corrieron rumbo hacia la carretera.

—¿Crees que se fue a lo de su hija?

—Es probable, aunque aun no damos con su localización.

—Tomemos otra ruta —Ordeno el líder.

Y asi lo hicieron, corrieron  velozmente , observaron la patentete de una cantidad inmensa de

automóviles a medida que salían de la ciudad evadiendo coches y personas.

Hasta que en plena carretera   el Lider distinguio la patente y acelero el

paso corriendo a la par del automóvil.

Le dio un manotazo al vidrio haciéndolo estallar, el auto comenzó a

girar bruscamente pero no perdió el control.

—¡Deten el coche!— Vocifero—¡O la muerte estará contigo!

—¡¿Qué quieren?! —Exclamo la ansiana—¡Dejenme en paz por favor!

—¡Entraga el cofre y el collar y podras irte!

—¡No lo tengo! ¡Lo arroje al mar en un viaje! ¡Lo juro!

—¡Entreganos los tesoros vieja decrepita! —Exclamo el líder.

—¡Te juro que no los tengo! —Grito—¡Y si los tuviera no se los

entregaría nunca!

—¡Tsk! —¡Tu lo quisiste asi anciana ! —Vocifero.

El líder observo venir  un camión

de carga en el carril de al lado y cuando menos se lo espero la anciana  el líder le dio un   empujon con su cuerpo al automóvil,

haciéndole perder el control, el auto se cruzo hacia el otro lado y el camión lo

estampo de costado haciendo añicos el coche.

Nos paramos delante del coche y observamos a la anciana incrustada entre

los hierros retorcidos.

—¿Dónde esta el cofre de Kassia? —Le pregunto el líder

Ella sonrio pese a su deplorable situacion—Nunca te lo dire, ni mi

familia lo sabe, mucho menos ustedes tendrán el dato—Sonrio  y quedo inconciente.

—Vaya mierda, revisemos la casa entera, debe estar escondido en alguna

parte—Comento el Lider.

—Si señor.

—¡Oigan ustedes! ¡Ayudenme con ella! —Grito el camionero y otro

conductor mas que freno para ayudar.

Nos dimos vuelta y salimos corriendo desapareciendo al instante.

Emma

Observe la hora en

el celular—Demonios se me

hace tarde, mi abuela me va a matar si la dejo esperando en la puerta de la casa,

¿porque me tuve que quedar dormida en clases? —Bufe — Para colmo tuve que soportar el regaño de la

profesora después de hora.

Salí corriendo por

el pasillo del colegio rumbo a la salida, cuando me cruce a mi mejor amiga  esperándome afuera del colegio, me frene de

golpe al verla.

— ¡Hey Emma! —Grito Camila— Te estaba esperando ¿Vamos con los chicos a

casa de Sophie  a tomar algo? ¿Vienes?

—Oh, por favor discúlpame, pero no voy a poder ir, tengo que recibir a

mi abuela que viene de visita.

—Qué bueno, mándale saludos de mi parte a Leonor, no te preocupes otro día

será, nos vemos Emma.

—Gracias se los daré de tu parte, nos vemos Camila y discúlpame.

—No hay problema.

Vi el autobus  en la esquina donde

está la parada para abordar,  sali

corriendo como una loca.

— ¡Espere! —Le grite e hice señas con la mano para que se detenga.

Pero  el chofer se fue el muy

maldito.

— ¡Hijo de puta! —Le grite—Lo gozaste eh, verme correr como una imbécil—

¡Gordo olor a chivo! —Refunfuñe molesta.

Media hora esperando a que pase el siguiente, maldita profesora, como no

dormirme si son re aburridas sus clases de historia.

Amo esos profesores que hacen de todo por hacer las clases súper interactivas,

llamativas, que te inciten a prenderte  a

la clase, a preguntar y participar,  esta

profesora era todo lo contrario  nos

tiraba el libro en la mesa,  un

cuestionario con preguntas y nada mas.

“La profe perfecta”, encima tenía que aguantar su cara de amargada toda

la maldita clase, es soberbia y prepotente  no veía la hora de que se jubilara, tenía ganas de lanzarle el libro por

la cabeza y partirle la frente.

Esperando el autobus paso un grupo con las chicas más populares.

— ¿Esperando el autobús, rarita?

No le conteste

—Encima de fea, Muda.

Todo el grupo de arpías se reía.

—Mírala como se viste, ¿con esa ropa no conseguirás a nadie? ¿Quién te

viste tu mama? —Dijo otra del grupo.

—Seguro está trabajando de puta, lo hace gratis chicas ¿quien pagaría

por ella?  eres un asco Emma Blake.

Agache la cabeza mientras pasaban, las odiaba, se creen el centro del

mundo por que sus padres tienen dinero.

¿Qué tiene de malo mi ropa?

Vestía normal, unas zapatillas Nike negras, un jeans azul, y un buzo Nike

gris con capucha.

Ellas definitivamente no apreciaban mi tipo de belleza.

Paso el tiempo y volvió a pasar el autobús, el cual esta vez pude subir,

al llegar a mi casa, tarde por cierto, me percaté de que mi abuela aun no había

llegado.

—Qué extraño, ella siempre es puntual.

Ingrese a mi casa, no había nadie, deje la mochila arriba de una silla  fui a la cocina abri la heladera y me abri un

pote de yogourt, luego me tire en el sillón y prendí el televisor  estaba viendo las noticias, cuando de pronto

el teléfono de casa sonó, tome el teléfono y conteste.

—¿Hola?

—Hola le llamamos del Hospital Buena Esperanza  ¿hablamos con familiares de la señora Leonor

Santoro? Tratamos de comunicarnos desde hace horas con ustedes.

Me pare de golpe—Si es mi abuela ¡¿qué le paso?! —Inquiri asustada.

—Sufrio un accidente en la madrugada, ingreso al quirófano hace unas

horas, salio bien, pero esta delicada,  habíamos tratado de comunicarnos pero pensé que era equivocado, tomamos

el número de su celular.

— ¡Que! Ya mismo voy para allá.

—Disculpe por darle esta noticia.

—Gracias, voy para allá.

Colgué,  tome el dinero que mama

dejaba para la cena arriba del mueble y me fui a la calle,  tome el primer taxi que paso y fui directo al

hospital.

En el camino le llame a mama a su telefono pero no contestaba, así que

le mande un mensaje diciéndole  que

viniera lo mas rápido posible al hospital.

Al  llegar pregunte en recepción

por Leonor Santoro  y me dijeron que

estaba en el quirófano aun, me contaron del accidente que había tenido, no lo

podía creer

—Tome asiento en cuanto pueda el Doctor que está atendiéndola saldrá a

contarle como se encuentra.

—Está bien, gracias.

Estaba muy ansiosa me paraba, me sentaba, caminaba de un lado al otro,

miraba la ventana se había formado una tormenta al parecer era muy brava  , veía correr a las personas  resguardando sus autos para salvarlos de un

posible granizo, el viento se hacía cada vez más fuerte, podía ver como el

viento agitaba con furia los arboles, hasta que empezó a llover torrencialmente,

un gran chaparron comenzó a caer.

Los truenos se oian

como rugidos en la  sala de emergencias ,

un rayo que cayó cerca del hospital, fue tan fuerte que me hizo  temblar del susto.

Tengo miedo, siempre

tuve miedo a las tormentas desde que era niña.

Dicen que el sol

vuelve a brillar después de la tormenta, ¿suena hermoso, no? , pero no siempre

es tan así, no siempre uno vuelve a ser igual, pueden ocurrir cosas que hagan

que ese sol no vuelva a salir para otros  y ese podría ser el caso de mi querida abuela.

Tempestad,

oscuridad, dolor, mucho dolor.

Médicos corrian por

el lugar  de un lado a otro, sus pasos rápidos

retumbaban por todo el lugar, es tan triste estar aquí, se ve tanto dolor y a

la vez un lugar donde se produce la llegada de la nueva vida , que ironía.

Estaba sola, no había

nadie que me diera una palabra de aliento, la banca de espera era fría y dura  el viento fuerte que entra por la puerta de

entrada la cual se abria y se cerraba a cada rato me hacía congelar los huesos.

— ¿Dónde estás mama? ¿Por que no vienes? Ten cuidado con esa

tormenta  por favor

Estaba sentada con

mis manos en las rodilla mirando hacia el suelo, pensando ¿porque mi abuela

tuvo que tener ese accidente? ¿Por qué?

¿Acaso existe un

dios que cosecha las almas buenas que rondan sobre la tierra y deja en ella la

mala hierba? Por qué así lo siento, oh quizás seamos nosotros los equivocados y

todo este planeado así siendo nosotros los egoístas que queremos aferrar a esa

persona a nosotros sea como sea.

En un momento siento

que una pelotita choca despacio contra mi pie la tome con mis manos y levante

la vista, venia un niño corriendo, tenía un pañuelo en la cabeza  se veía feliz , pese a que la cara pálida de

su madre que estaba detrás decía otra cosa

Era un niño con

cáncer y se veía feliz.

¿Cómo es posible que

puedan poner esa cara de felicidad? ¿De dónde la sacan? Al ver a ese niño enfermo,

sufriendo esa enfermedad me pregunto ¿dónde estás dios? ¿Por qué ese niño tan

indefenso con toda una vida por vivir, el cual no le ha hecho daño a nadie pasa

por esto?, no lo comprendo y jamás lo comprenderé.

—Hey campeón, toma —Le devolví la pelotita

—Muchas gracias.

Y lo vi irse corriendo por el pasillo con su madre.

Me apoye contra la pared junte mis piernas esperando una respuesta de

los médicos pero tardaban  hasta que salió

del quirófano un hombre con  un ambos de

color azul, una cofia color azul y un tapa bocas blanco el cual se lo saco.

Parecía un hombre de unos cuarenta años.

—Hola ¿Tu eres familiar de la Señora Leonor Santoro? —Inquirio el

cirujano.

—Si, es mi abuela.

—Muy bien  mira a mí me gusta ser

lo más claro posible.

—Si doctor.

—La situación de tu abuela está muy comprometida ,tiene varias fracturas

en el cuerpo la más importante en el fémur  pero lo más preocupante es que tiene varios órganos comprometidos  y estamos tratando de detener la hemorragia

interna , estamos haciendo lo mejor que podemos.

Me tape la boca y entre lágrimas  le dije —Por favor , sálvela doctor.

—Daremos lo mejor de nosotros para que asi sea Señorita.

Asentí—Gracias.

Me senté en la banca y me quede en blanco , se me cruzaron por mi mente

todos los momentos que viví con ella  ante la posibilidad que ya no vuelva a vivir nada mas con ella , el profundo

dolor se apodero de mí y las lágrimas caian desenfrenadamente por mi rostro ,

mis respiración era anormal estaba desecha .

Llevaba dos días sin dormir preparándome para un examen de historia,

estaba muerta de cansancio no físico, si no ese cansancio mental, empecé a ver

todo difuso, mis ojos cansados, mis parpados se cerraban lentamente hasta que

me quede completamente dormida.

***

—Hija despierta—Me sarandearon— Emma, despierta—Oi la voz de mama.

—Mmm—Abri los ojos.

Mis ojos se empezaban a abrir lentamente, se veía un poco difuso hasta

que mi vista se compuso

—¡Mama! —Me exalte, di un salto en la banca—— ¡La abuela! —Exclame— Me dormí

soy una tonta.

—Tranquila hija aun están operando, el celular se me había quedado sin

carga y la tormenta hizo estragos en la calle, toda una hazaña fue llegar aquí.

— ¿Que dijo el médico? —Le pregunte a mama.

—Que están haciendo lo mejor posible.

Mama se puso a rezar.

¿De verdad mama vas a rezar? ¿Crees que ayude eso? En fin mejor no le

digo nada si ella está más tranquila con eso que lo haga.

La abuela Leonor había venido a visitarnos como siempre  lo hacía, pero  entrando a la ciudad, al parecer se dumio al

volante y chocó contra un camión.

—Ya vengo mama ,voy por algo de comer a la cafetería.

—Bueno hija.

Compre unos cafés y unas donas  cuando de pronto choque contra un  hombre enorme en el hospital traía una capa

oscura, vi botas

Levante la cabeza—Lo siento, estoy distraída ¿Te ensucie?

—Descuida, iba pensando en otras cosas

Me asuste cuando vi en el una mascara.

Levanto su mano vendada—Accidente en fiesta de disfraces—Rio el sujeto.

—Ya veo, tu disfraz es genial

—Lo se—Rio y camino por la par mia.

Que extraño sujeto.

Iba caminando por el pasillo  las

luces fuertes de los tubos fluorescentes que había en el techo  hacían que me diera mas sueño.

Al llegar al final del pasillo y doblar en dirección hacia donde estaba

mama pude ver que el medico estaba hablando con ella  y en un momento ella se sentó, se tapo el

rostro  y empezó a llorar.

Me quede petrificada, helada, esos momentos que te quedan gravados en la

cabeza no se olvidan más, los cafés y las donas cayeron al piso y yo solamente salí

corriendo en dirección a mi madre para saber que pasaba

—Mama ¿qué paso?  ¿La abuela?

¡¿Qué sucede?! —Exclame.

Ella meneo la cabeza hacia los costados—No resistió la operación.

— ¿Qué? —Abri mi boca en grande

—Ella Falleció—Comento con la voz quebrada,

—¡No!, No puede ser cierto, por favor mama dime que no es cierto esto.

La mirada de mama era tan triste y sus ojos estaban tan inundados por el

dolor que en un momento se quebró y me llevo junto a ella abrazándome tan

fuertemente que todo el dolor  de esta pérdida

la desahogamos apoyándonos entre nosotras.

—¿Por qué tuvo que morir asi? —Solloce

—No lo se Emma.

Nota del Autor: Bueno estuvo muy

interesante

¡Que Emoción!

Bueno espero que les guste y no se

olviden de votar y comentar aquí abajo

Un abrazo de gol para todos los que

siguen esta historia

Recuerda mi instagram es

Danny_Perezok

D.P

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***