Mi precio.

Narra Christian.

Después de ese mal rato con esos hombres y de qué mi mente se quedara en blanco por mucho tiempo, fui a darme un baño, pronto debía irme a trabajar, son las 7 empiezo a las 9.

Cuando salía del baño tocaron el timbre seguramente era Jace, o Charles, me puse unos pantalones y una toalla pequeña en mi cuello para evitar mojarme con el goteo de mi cabello.

Vaya sorpresa porque la persona que estaba frente a mí puerta era el idiota de esta madrugada le cerré la puerta en la cara, o eso intenté, ya que no me dejó, el muy sinvergüenza pasó a mi sala sin ser invitado, veía hacia todos lados analizando mi apartamento además no me gustaba su expresión.

-escúchame bien demente, no me importa como supiste mi dirección, pero lárgate ahora.

Dean: ¿te conozco?. —Es en serio?, este maldito viene a mi casa y sale con eso?.

—suficiente, lárgate ya!.

Dean: oh ya recuerdo, eres el enfermero mirón, eso hace todo más fácil, vine para decirte que serás mi esposo en dos semanas.

Sé volvió loco, es idiota o el golpe de anoche lo dejó más estúpido de lo que ya parece? Cabe decir que no solo lo pensé, se lo dije, no le gustó mi respuesta, eso no es novedad, no parece gustarle nada, ahora mi pregunta es, ¿que es lo que pretende haciendo una broma como esa?, lo único que logra es que me caiga peor.

Dean: no te confundas, no tengo intensiones de casarme contigo; sin embargo, mi familia tiene una deuda con tu madre, y en gratitud te convertirás en mi esposo

—¿quieren agradecerme dándome un esposo como tú?, yo diría que quieren castigarme, me niego!.

Dean: no estás en posición de negarte, verás prefiero que hagamos las cosas por las buenas, dime tu precio.

—vete al infierno!.

Abrí la puerta para que se fuera, pero seguía sin moverse, ¿que diablos quería?, es solo porque su familia tiene una deuda con mamá, porque no entienden que no quiero nada de ellos, no los necesito.

Dean: todos tienen un precio, y se nota que tú necesitas mucho el dinero, solo di la cantidad, ¿un apartamento de lujo?, ¿un auto último modelo?, ¿un yate?, ¿una mansión?, ¿acciones de alguna compañía importante? ¿Que quieres?.

Me acerqué para empujarlo de mi sala.

-yo no me vendo, dices que quieren agradecer a mi madre, pero no has hecho más que insultarme, púdrete con todo y tu dinero maldito imbécil.

Estaba muy molesto, pero a él parecía no importarle nada de lo que yo decía, solo una maldita respuesta que no estaba dispuesto a dar, entonces recordé algo y creo tener la idea perfecta para sacar a este infeliz de mi casa y vengarme de él.

-está bien te diré mi precio.

Levantó su mirada con altivez, estaba seguro de que había logrado seducirme con todas sus ofertas, fue tan satisfactorio borrar esa expresión con mis palabras.

-vamos a hacerlo.

Estaba completamente descolocado, no esperaba que yo dijera algo así.

Dean: a que te refieres con hacerlo?.

Él estaba asqueado, seguramente, no puedo distinguirlo cuando me mira como si me quisiera desaparecer.

-a sexo obviamente, verás tengo ciertas necesidades que incluso son más importantes para mí que el dinero, así que no me casaré con un hombre que no pueda dejarme satisfecho, si me convences en la cama tendrás a un dispuesto esposo.

Dean: ¿me estás jodiendo?, no pienso acostarme contigo.

Me di la vuelta sonriendo, estaba seguro de que logré espantarlo, yo había ganado y se sentía tan bien humillar a este estúpido.

—cierra cuando salgas, y asegúrate de no volver nunca.

Ahora más que nunca tengo que mudarme, estaba listo para ir a mi habitación y terminar de arreglarme, pero fui jalado por ese tipo hasta su cuerpo.

Dean: solo tengo que satisfacerte ¿o no?

¿Que estaba pasando?, este tipo está demente, ¿quería hacerlo conmigo?, odia a las personas como yo, le dan asco, eso dijo, ¿por qué rayos está tocándome?, mierda tengo que hacer algo.

Lo empujé.

—no te atrevas a tocarme, solo lo dije para que te largaras, no eres mi tipo, lárgate de mi casa.

Creo que herí su orgullo, me empujó de cara contra la pared, estaba realmente furioso, subió mis manos sobre mi cabeza, me aterré cuando su mano fue a mis pantalones con la intención de quitarlos.

—B-basta!

Intenté hacer contacto con él, pero no me dejó, y tampoco me quería escuchar.

No soy virgen es verdad, pero esto no era placentero, era aterrador, tenía miedo de ser violado por este demente del cual no me podía librar.

Mi ropa fue quitada hasta cierto punto y él estaba haciendo lo mismo con sus pantalones, solo iba a ponerla dentro y ya?, de ninguna manera.

Era imposible soltarme, comencé a rogar para que no me hiciera nada, no quería algo así, me soltó y yo me desplomé en el suelo asustado, él seguía ahí de pie mirándome, no me atreví a levantar la vista.

Dean: lo mejor será que la próxima vez digas que si y ya, será más fácil para ti, mi paciencia es limitada.

Es el demonio, no voy a casarme con alguien así, me mudaré lo antes posible.

Ahora me preparo para ir a trabajar, no tengo ánimos, pero si algo odio es faltar a los compromisos, así que salí de mi casa para ir allí, mi segundo trabajo es como Barman en el bar del hermano de Charles, bueno prácticamente yo hago los descansos, de su Barman, otras veces los hace Charles.

Conocí a Charles estudiando enfermería, él solo hizo 1 semestre y se retiró dijo que no era lo suyo, desde entonces se dedicó a pulir sus técnicas como barman, de hecho es muy bueno, aunque sus estudios se centraron en administración, he aprendido mucho gracias a él.

A veces voy en el día, entonces ayudo con la limpieza, es otro ingreso, el dinero no me viene mal, ya que cuando estoy en temporada de clases las cosas se complican debido a que no puedo trabajar tanto.

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