Capitulo 9: - El cómplice-

(Llamada entrante)

-Si.

- Señor necesito ayuda\, estando solo\, no podre seguir haciendo esto.

-Eres una molestia, ¿Qué paso con tu ayudante?.

-Ella enfermo y murió.

-Ah, enserio, ¿por qué no me lo comunicaste?.

-Señor yo se lo di a conocer hace mas de un mes y me dijo que enviaría los medicamentos, pero nunca los envió.

-Hoo, se me habrá olvidado entonces, estaba ocupado en otros asuntos.

-Era mi esposa!! (Park grito exaltado).

-Como te atreves a levantarme la voz, sabes en que posición estas, eres alguien indefenso, soló hago una llamada y todo se acaba para ti.

-Discúlpeme, pero.. (la voz de Park estaba quebrada por el llanto).

-Tranquilízate, además recuerda que si nunca nos hubiéramos encontrado, no podrías recuperar a tu persona preciada, a veces hay que hacer sacrificios  Park, pero la recompensa es grande al final.

-Tiene razón, ella estaría feliz de recuperarla, entonces procederé a encontrar a alguien.

-Espero y no me causes mas inconvenientes, elige bien.

-Si, no se preocupe, pronto tendrá noticias.

A unos cuantos kilómetros se encontraba un restaurante muy poco visitado, pero con sus años de antigüedad, algo heredado a cada integrante de la familia para seguir el legado de años.

Marco seguía en la lista para cuidarlo, aunque el nuevo cliente cambiaria su monótona mañana, éste cliente no era muy común por esos alrededores, llevaba puesto un abrigo largo con gorro, se notaba que era joven el hombre, no podría imaginar la edad, era confuso, pero tal vez tenia unos treinta y tantos años.

Se sentó en una mesa, tomó el menú y eligió pancakes, el hombre tenia curitas y vendajes en sus brazos y manos, tenia un extraño olor, pero a Marco no le importo, casi nadie nuevo llegaba, era lógico que se aburriera el solo, así que al llevarle su orden se atrevió a sentarse junto a el, preguntándole:

-¿Y de donde viene señor?.

Park lo miro fijamente, río y bajo la mirada para cortar un pedazo de los pancakes.

-¿Disculpe le hice una pregunta?.

-Veo que eres muy curioso. (Park siguió comiendo).

-Realmente no tanto, pero cuando pasas tanto tiempo aquí, viendo las mismas caras, la persona llega a cambiar supongo.

-Vengo del bosque.

-¿Del bosque?.

-Si, vivó en una cabaña, alejado de la sociedad, ya sabes a veces uno necesita estar solo en su mundo, haciendo cosas en la naturaleza.

-Si, entiendo, a mi igual me gustaría pasar un tiempo así.

-Enserio, ¿te gustaría?.

Park lo mira de nuevo fijamente, hubo un silencio incomodo por unos breves minutos, lo cual hizo que Marco se asustara un poco, en ese momento llego un cliente por un pedido, lo cual salvo un poco de la situación a el chico.

Aunque cuando se fue, en la barra se encontraba el hombre, con su plato vacío y le volvió a hacer la misma pregunta:

-¿Te gustaría?.

-Amm, si claro.

-Te puedo regalar la cabaña si gustas.

-Enserio (grito Marco), digo no debería aceptarla, no lo conozco y además que no debería ser de su familia.

-No te preocupes por eso, ellos lo entenderán, entonces, ¿la quieres? (con entusiasmo Park se la ofrecía).

Marco estaba contra la espada y la pared, no conocía a esté hombre, pero a la vez quería aceptar,estaba harto de la vida que llevaba ahora, era demasiado tentador, así que termino diciéndole al hombre:-Si, la quiero.

-Bien.

Extendiendo la mano hacia Marco dijo:

-Soy Park, ahora ya no somos desconocidos.

Estrechando sus manos se presentaron.

Park llevo por varios días a Marco a la cabaña, convivieron tanto que se hicieron amigos fácilmente, aunque un día llego un invitado inesperado. Marco iba a llegar pronto y bueno, lo que vio no fue tan bonito.

Había un cuerpo tirado y Park tenia un arma en las manos, Marco se quedo inmóvil, Park se acercó lentamente a el, cuándo Marco se percato ya era tarde, lo tenia abrazado, ahora el tenia en sus manos el arma homicida, sus huellas ahora se encontraban sobre ella.

-Creo que estas en problemas Marco.

Incorporándose Marco camino hacia el cuerpo, lo admiro, sé aguacho y lo acaricio, después procedió a decir unas palabras mientras seguía aguachado, sin despegar la mirada del cuerpo dijo:

- Sabe señor Park\, no he tenido buenas experiencias en mi vida\, es muy aburrida\, ya sabe la misma rutina\, pero esto es..

-Lo se, es perturbador, pero ya eres cómplice, así que no puedes escapar ahora, sí no el te hará algo malo.

-¿La cabaña será mía, señor Park?.

-Qué!, estas escuchando lo que te estoy diciendo,  lo que pasara después de esto.

-No me importa quien te controla, pero, ¿será mía la cabaña? (exaltado se dirigió a Park).

-Si claro, mientras hagas bien tu parte.

-Bien, usted me acaba de realizar una gran sorpresa como en los cumpleaños, que divertido se pondrá, jajaja.

-Tu estas igual de desquiciado que ese sujeto, pero la diferencia que lo dejas ver en su máximo esplendor.

Park decidió llamar en ese momento al sujeto, poniendo en altavoz la llamada.

-Si, diga.

-Señor, ya lo tengo, sé llama..

-Marco señor, es un placer escucharlo.

-Marco que te impulso a hacerlo. (dijo el sujeto).

-Simplemente el hecho de desear algo.

-El señor Park comento que te gusta la cabaña, por mientras esta en mi poder, pero si haces un buen trabajo te la daré, como te lo prometió Park.

-Gracias señor, esperó conocerlo pronto.

Park quito el altavoz y le dijo:

-¿Que le parece señor?.

-Mantenlo vigilado, esperó y no cause problemas Park, recuerda que tu lo elegiste y cualquier movimiento en falso, te arrastrara a ti también.

-Si señor comprendo perfectamente.

-Bien, pronto me comunicare contigo, adiós.

Colgaron y Marco comento:

 -Tal vez, señor Park, pero ese sujeto sabe lo que uno desea, eso puede controlar hasta al mas peligroso.

-Espero conocerlo pronto en persona.

Desde ese momento Marco se revelo como realmente era, se convirtió en el cómplice numero dos, ya solo era cuestión de que llegaran las ordenes del tipo que controlaba todo.

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