04.

-Kaia es una tonta, solo quiere llamar la atención de Yannick- dijo ella en el recreo. Estábamos sentadas sobre el césped de la academia, era un castillo grande que antiguamente fue utilizado como centro de fiestas y reuniones importantes dentro de la alta sociedad junto con los años se le perdió el uso y alguien lo compro para poner una escuela exclusiva para los niños de los grandes empresarios de Inglaterra. Yo hubiese preferido ir a una escuela pública, por lo que me contaba Ailen, allí los niños eran tan burros como el animal, y por eso a mí me venía a la perfección, no soportaba el nivel de exigencia de esta escuela. A los nueve años enseñando los versos de Shakespeare cuando podíamos leer la saga de Maze Runner de James dashner

Que a Kaia Harper le gustaba Yannick no era un secreto, el año pasado en su primer día de clases, Kaia fue la primera en hablarle y le sugirió a la profesora que Yannick se podía sentar con ella. No me molestó del todo esa decisión, yo tuve que estar sentada con Yannick antes del cambio de puesto, así que de manera anónima se lo agradecía

-Y lo está logrando de la forma en que lo llama en medio de un examen- dijo Hasna. Todas reímos, pero no nos dimos cuenta de que Kaia pasaba por nuestro lado y nos había escuchado. Corrió tan rápido que en menos de un segundo ya estaba fuera del alcance de nuestra vista

-Nos metimos en serios problemas- dije

- ¿por qué? Se lo tenía merecido- me dijo lila. Yo negué con la cabeza, ellas no comprendían. Kaia iría donde la maestra y le contaría lo que escucho, se haría la víctima y a nosotras nos castigarían.

-Me iré a disculpar antes de que esto empeore- les dije, poniéndome de pie

Ella se quedó con la boca abierta e intentaron persuadirme aún sin entender porque lo hacía. Fui por el mismo camino que Kaia y la busqué. No estaba en los baños, en los pasillos, en la banca en la que siempre se sentaba con sus amigas, ni en ningún lado.

- ¿A quién buscas, Keira descerebrada?- me preguntó Asher, uno de los amigos de Kaia. Era un chico alto para su edad, de cabello castaño y de rostro amable. El problema estaba en que al lado de Alison parecía su guardaespaldas

-A Kaia- le contesté, me guarde "la tonta de tu amiga" para evitar posibles daños, él también podía acusarme a la maestra

-Yo iría por el bosque de pinos, iba muy triste hacia allá de la mano de Yannick- apunto hacia el patio y desde aquí puede ver la copa de Los Pinos que se extendían hacia los límites del colegio

Me dirigí hacía ya, escuchando la risa de Asher mis espaldas. Algo se tramaban, pero no contaba con que yo era más astuta.

Las ramas me golpearon en la cara y mi falda se enredaba en los arbustos, tenía el cabello revuelto por el ajetreo de caminar sobre una superficie con piedras, hierbas y pinos que se alzaban sobre mi cabeza

Dónde estarían, llevaba dando vueltas más de cinco minutos.

Escuché a lo lejos la campana que ponía terminó al recreo, no los había encontrado así que me rendí. Solo había un inconveniente, no sabía dónde ir

Traté de recordar porque árboles había pasado, pero todos eran iguales. Ni siquiera podía distinguir las huellas que deje de las hojas secas que había en el suelo

Estaba tan asustada que me puse a llorar. me senté al lado de un árbol y aferré mis rodillas contra mi pecho, papá me había contado algunas historias de niños que se perdían y que no aparecían nunca más, era para infundirme miedo y no salir de casa yo sola, Ya que una vez me escapé para ir al cine a ver una película mis papás me decían que no era seguro que ni yo ni mis hermanas camináramos solas por el parque o que fuéramos a algún lado sin supervisión, según ellos nos podían secuestrar para pedir una recompensa. Nunca les creí esa historia, pero la de los niños perdidos si porque en Peter Pan los niños en verdad sea bien extraviado y nunca jamás estaba lleno de peligros debido a Garfio

Yo estaba perdida en medio de un bosque que no debería estar dentro de los límites de una escuela, sola, llorando y seguro con un castigo en cuanto saliera de esta. Si es que lograba salir

-Kaia, ¿eres tú?- me limpié las lágrimas en cuanto escuché mi nombre y me puse de pie en un parpadeo. Frente a mi estaba Yannick, con el cabello desordenado y con la chaqueta del uniforme destrozada. En una situación normal lo hubiese ignorado, pero el susto que me lleve al creer que me quedaría sola para siempre en medio del Bosque hizo que me lanzará a sus brazos y que no soltara hasta que nos tambaleamos y nos caímos

- ¿Qué haces aquí?- me preguntó pronto me limpié la nariz y me aparte de Él, era la primera vez que lo veía tan preocupado y que me dirigía más de dos palabras juntas

-Buscaba a Kaia

- ¿Para qué?

- mis amigas y yo le dijimos tonta, me quería disculpar para que no nos acusara, pero los planes no salieron como esperaba- él se levantó y me tendió una mano. Ya no tenía tantos pelos azabaches revueltos. Zara le había cortado el pelo hace una semana, Ya que en la escuela No permitían que los hombres llevaran el cabello muy largo. No quería admitirlo, pero la única cosa que me gustaba de Yannick eran sus pelos alborotados

- ¿Y tú que haces aquí?- fue mi turno de interrogarlo. Emprendimos marcha lentamente, Yo solo seguía Yannick, esperaba que no estuviera tan perdido como yo.

-Venía con Kaia. Pero era una broma-Nos detuvimos y lo mire - estaba con dos chicos más grandes y me golpearon para que le hiciera la tarea a Kaia. Creo que eran sus hermanos - sabía a quién se refería, los horrorosos Peter y Diego, los hermanos mayores de Kaia y matones oficiales del colegio punto eran corpulentos y tan estúpidos como su hermana.

- ¿Y qué les dijiste?- su historia era mucho más interesante que la mía, y a pesar del odio que le tenía, cierta parte de mí tenía pena.

-Que no, por eso estoy así- se señaló Así mismo y me fijé que tenía un moretón en la mandíbula.

- Así que los dos nos perdimos por culpa de ella. No me molestaría que dejaras de darle las respuestas en las clases de literatura, después de lo que te hizo.

-Mira quien lo dice - me dijo con tono de burla. Ya volví a hacer el niño antipático de siempre.

-en mi defensa... - no tenían nada con lo que excusarme. Guarde silencio, esperando a que Yannick olvidará lo que había dicho - ¿Sabes por dónde vamos?- cambie de tema

-Si solo sígueme- para mí eso era suficiente. Yannick no podía hacerme nada, de lo contrario despedirían a su madre, Así que en cierta manera estaba segura a su lado

Caminamos un rato más y note como la espesura de los arbustos se despejaba, alcanzaba a ver las torres del castillo y la campana en la ventana más alta.

Nuestra siguiente clase era matemática, cuando entramos a la sala, despeinados, sucios y con la ropa rasgada, la maestra casi se desmayó. Nos envió a la dirección y tuvimos que explicarle lo sucedido el director. Dijimos la verdad.

Desde ese día Kaia odio incluso más a Yannick que yo, lo estime un poco más por haberme salvado y la maestra cambio de puesto a esos dos. Yannick se sentó con Eider y Kaia con Cloud Rossi, un niño castaño que comía pegamento y que escupe al hablar. Sin embargo, Kaia ya no se quedó con los brazos cruzados

Al otro día, descubrió que Yannick era hijo de mi niñera y mi duda fue resuelta. Se burló del frente a toda la clase, no descansó ni un día, le hizo la vida imposible junto con sus hermanos. Hasta que una mañana Yannick no se subió en el mismo auto que nosotras para ir a la escuela sino que se fue de la mano de Cristel en la dirección contraria. Esa tarde, cuando le pregunté a Zara por qué Yannick no fue a la escuela, me dijo que él le había rogado para que lo cambiara a una escuela pública. Y ahí fue Cuando comenzó mi eterna enemistad contra Kaia Harper

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