Capítulo 20

Tamara ya un poco mejor baja las escaleras a lado va Leo quien le platica de la situación que se presentó cuando uno de los peones le dice

- señor el comisario está aquí quiere hablar con usted

- hazlo pasar al despacho

él peo se va dejando a ellos dos solos

- ve no te preocupes por mi

- vamos aparte no bacharelaremos nada del otro mundo

Los dos se dirigen al despacho donde se encuentra el comisariado un hombre joven de piel Blanca y sus ojos color esmeralda

- buenos días, señor comisariado

- buenos días, señor del valle y ...

- ella es mi esposa la señora del valle

- mucho gusto

Dice Tamara de forma de saludo, los dos caballeros hablan sobre lo sucedido dando a entender que el contador solo hacía el trabajo sucio y que alguien solo le daba órdenes

- cree a que se deba a los bandidos que hay en región

- señor aquí los bandidos son extranjeros se roban los ganados e incluso hasta las chivas son personas rebeldes

- entiendo eso, pero el contador no es uno de eso, rebeldes, ya que él trabajaba antes como unos de los soldados y él dejaba que de su escuadrón me robara a mi señor comisario al parecer usted debe investigar por qué no lo está haciendo

El comisario mira con en enojo a Leo siendo así disimularlo

- señor del valle ese comentario en una falta para mí

- yo no dije tal cosa, solo dije que le falta investigar un poco más

Leo habla de forma retadora al comisario que solo si ese joven se pone a investigar está acabado

- tomaré su palabra sin más que decir me retiro

- ya sabe donde está la puerta

aquel comisario sale del despacho dejando a Leo y a Tamara

- crees que esté involucrado

- no lo creo sé que él está involucrado viste su cara que puso él tuvo que ver en la muerte de ese hombre y sobre los rebeldes no creo que ellos me halla robado porque se darían cuenta, pero ellos saben como sácalos y sin dejar rastros

- Leo sinceramente no me gustan esto

- lo sé, pero tengo que dejar todo en orden arreglar todo aquí para que tú y yo nos quedemos aquí a vivir

- si es hermoso aquí se puede estar en libertad

- vez te conozco como la Palma de mi mano

- no seas presumido

- necesito que me ayudes a ordenar unos papeles yo iré a ver a los alrededores de las tierras

- no vallas solo

- está bien para que no estés preocupada lo haré

- vuelve pronto

- eso lo haré

Leo se despide de Tamara dejándola en el despacho mientras él va en busca de su caballo que ya está listo va con dos peones más

- andando

Leo sale cabalgando juntos a los peones mientras Tamara está trabajando en ordenar muchos documentos llegó la hora de la comida y Leo no llegaba Tamara se preocupa para después pensar que a lo mejor encontró irregularidades así que se va a terminar el papeleo, el cielo se comienza a nublar haciendo oscurecer el cielo cayendo el agua, los relámpagos y los rayos Tamara se fija por la ventana preocupada por Leo no sabe si ir a buscarlo siente esa necesidad

- preparen un caballo

- señora es peligroso está lloviendo muy fuerte no creo que sea conveniente

- pero mi esposo no llega temo que le pase algo

- señora por el momento no podemos hacer algo están los rayos y las centellas es peligroso andar con los caballos es mejor que suba a su habitación

Tamara sin poder hacer nada sube a su habitación con las velas prendidas en todo el lugar a lo lejos ve un caballo que el jinete cabalga a toda velocidad, ella piensa que es Leo así que baja las escaleras a esperarla la persona, pero al ver que el jinete baja no es Leo

- usted es la señora del valle

- si usted quien es

- traigo a tu esposo herido esta inconsciente se le tiene que sacar el proyectil

- ¡leo!

Dice Tamara, le habla a los peones para que ayuden a subir a Leo a la habitación para tener una mejor atención, aquel hombre mira la cara afligida de Tamara el hombre sube con ella a la habitación donde está acostado Leo le rompe la camisa y le ordena a los peones que le traigan lo necesario para sacar el proyectil

- señor que hace

- le sacaré el proyectil si no de lo contrario la herida se infectará y eso le provocara su muerte

Tamara al escuchar eso siente un miedo

- en qué le ayudo

- necesito unas toallas y ya los peones traen lo demás

aquel hombre una vez teniendo las cosas a la mano con el cuchillo esterilizado comienza a sacarle el proyectil haciendo que Leo que está inconsciente sienta el dolor el hombre una vez sacándolo comienza a limpiar la herida

- presione señora mientras preparo lo que le pondré

Tamara presiona la herida con unas gasas mientras aquel hombre ya tiene preparado unas clases de hierbas junto el alcohol

- esto ayudará que la herida no se infecte y que se pueda cerrara la herida

se lo coloca en la herida que tiene en abdomen vendado de manera delicada

- ahora si solo tiene que prepara un té con una hierbas porque le dará temperatura y eso le ayudará junto a los paños

- gracias señor, pero que fue lo que pasó

- señora a su esposo no lo quieren aquí fueron unos soldados que lo atacaron por suerte nosotros andábamos por esos lugares ya que supimos que el dueño de estas tierras estaba aquí y queríamos hablar con él pero las circunstancia se dieron de otra manera debe de tener cuidado con el comisario no es alguien bueno

- entiendo, le agradezco que trajera a mi esposo

- no es nada señora me retiro creo que no debo de estar aquí

- señor puede quedarse en unas de las habitación que esta en la parte de abajo esta lloviendo muy feo y no es conveniente

- esta bien señora se lo agradezco

el hombre se va mientras Tamara cuida de Leo quien está inconsciente teniendo un poco de fiebre Tamara le coloca los paños de agua

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