¿Que esconde la Academia?

El nuevo día había llegado, la Academia se encontraba sucumbiendo en una letal oscuridad, aparentemente, docentes iban y venían, lobeznos alborotados por las situaciones ocurridas en las últimas horas, Mayra se encontraba transitando por el pasillo que cruzaba por delante de la biblioteca con una postura rígida hasta que el Lienzo de Oro llamó su atención y efectivamente la Biblioteca era un buen lugar para aclarar sus dudas, se enderezó abrió la puerta la frialdad del sitio le parecía agradable, Mayra cerró los ojos y ante aquella acción parecía que la frialdad se incrusta en su piel.

— ¿Mayra? - La voz de Samira hizo que la joven abriera los ojos, Mayra le dedicó una mirada fulminante tomando la decisión de acercarse a Samira.

— ¿Qué demonios tú haces aquí? - La ira era palpable en la voz de Mayra - Quiero estar sola, además prefiero estar con una cucaracha antes de estar en el mismo sitio que tú— El odio y el desprecio en la mirada de Mayra era muy evidente.

— Lamentó decepcionarte Mayra, pero acudimos a la misma Academia, serás la Beta de la manada en dónde seré la Delta, tarde o temprano tus decisiones serán juzgadas por mí, la biblioteca es de todos los estudiantes - Samira se acercó a Mayra - No podrás evitar que yo esté aquí.

Al momento en que Samira termino de expresar aquellas palabras, Mayra se lanzó en busca de ella agarrando a Samira del cabello, obligándola a llevarse la cabeza hacia atrás.

— Cuidado con tus palabras si no quieres terminar muerta como ellos - La voz de Mayra no se parecía en absoluto a la voz que ella emplea, la voz de una mujer que parecía tener la garganta cortada se había escuchado y segundos después Mayra se había desplomado al suelo, el grito de Samira había sido escuchado por Eragon que se encontraba en las cercanías de la Biblioteca, rápidamente se introdujo al interior de la habitación.

— ¿Qué ha ocurrido? - Preguntó el Futuro Alfa sorprendido de encontrar a Mayra en el suelo y Samira observando a la misma de manera incrédula.

— Hemos tenido una discusión y al momento de terminar de amenazarme ella cayó al suelo - Samira fue sincera, Eragon maldijo por lo bajo, pero había tomado la decisión de cargar a su compañera en brazos sacándola de allí, pero antes de que Samira saliera la silueta de alguien observándolos hizo que un sudor frío recorra su espina Dorsal, al darse la vuelta para hacer el intento de volver a ver de quienes trataba la silueta había desaparecido.

— ¿Qué oculta esta Academia? - Se preguntó Samira y entonces tomó la decisión de no seguir los pasos de Eragon más bien Samira se acercó hasta el punto exacto en dónde había visto la silueta rara, algo frío entró en contacto con su piel, rápidamente abrió sus ojos la frialdad no le agradaba apretando los puños observo todo a su alrededor hasta que un libro llamó su atención, Samira realizó el intento de avanzar, pero algo la detuvo algo el frío acariciaba su brazo izquierdo.

— Búscame a la media noche, tengo mucho de que hablar contigo - Era la misma voz que había escuchado segundos antes de que Mayra quedará inconsistente.

— Usted y yo no tenemos absolutamente nada de que hablar, pero mejor empiece a decirme quién es usted y que es lo que quiere - Samira no había vuelto a realizar ningún movimiento, pero la frescura aún se sentía en sus brazos.

— ¿Quieres saber quién soy? - La voz erizo sus vellos esta vez - Te espero en la media noche, bajo la atenta mirada de la Luna y la fria noche cubriendo a ambas.

— No me gusta la noche fría, aborrezco la frialdad - Respondió Samira con brusquedad, pero no se dignó a darse la vuelta.

— Algún día volveré y voy a hacer que todos ustedes que me rechazan derramen lágrimas de sangre, voy a dejar que con una mano toquen el cielo, pero que con la otra sientan el peso del Infierno.

Samira había captado una copa en un agil movimiento, la agarró y la estampó por la pared logrando que el cristal se haga añicos.

— El Infierno y el Fuego es más satisfactorio que la Oscuridad - Samira se dio la vuelta y se encontraba totalmente sola, la presencia que había sentido se había evaporado, la joven tenía una mirada filosa, pero entonces la puerta fue abierta, la joven se apresuró a esconderse aunque no entendía por qué tenía aquel afán.

— Los asesinatos son muy raros, no entiendo que está ocurriendo - Samira reconocía la voz de una de las Lobas que era docente por sus años de Liderazgo en alguna de las Manadas.

— Dicen que el mal volverá, que está escrito en libros y es por eso que Academia de Licántropos volvió a abrir sus puertas para que la Familia Dumonts dejará sus enseñanzas acerca de cómo enfrentarse al mal, ellos conocen los Legados de Amor, muchos dicen que ellos lucharon en contra del mal, pero también algunos lobos que han muerto, pero que los han servido dijeron que ellos fueron los causantes de la muerte de muchos inocentes a causa de la Colisión de los Reinos, es decir que ellos también son el mal— Explicó otra mujer.

— Aquello son puros cuentos— Defendió la docente que fue la primera en hablar.

Pero es que la familia se ha encargado de que los vinculé con el mal del pasado, nada más como pasa tiempo, ellos no querían que la nueva generación conociera por todo aquel sufrimiento por lo que ellos pasaron, varios recuerdos fueron eliminados de la mente, y los lobos que conocían de la historia producto de las guerras y los daños causados fueron perdiendo la vida, por ende también los rumores acerca de la verdad de la familia también iba disipándose.

— No sé, yo tengo mis dudas, algo me dice que los Dueños de la Academia tienen que ver con las muertes, tienen que ver con el mal, además uno de los rumores habla de que si el Gran Libro que habla acerca de la Leyenda que cambió es abierto, los enemigos de ellos volverán.

— Por la Diosa, esperemos que aquel libro sí es que existe, nunca sea abierto, no queremos guerras— Explicó la otra Loba.

— Pero las páginas del Libro tienen vida propia, si llega a caer en manos equivocadas y si es abierta el mundo sobrenatural temblará, pero por algo también está prohibido que se hable de esos temas, ponte a pensar, ellos lo prohíben y eso tiene una razón oculta, la Familia Dumonts ha amenazado de muerte a quienes busqué las Leyendas del Pasado— Expresó la docente encogiéndose de hombros, ambas volvieron a salir dejando a Samira con mucha información que procesar.

La joven salió de su escondite, pero al levantarse no se había percatado de la lámpara que reposa por encima de su cabeza, golpeando su cabeza de manera brusca, pero aquello no fue lo que llamó la atención de la joven, más bien la los libros parecían moverse dando paso a un estante en miniatura - La Leyenda Cambio - La Colisión de los Reinos. Aquellas palabras estaban escritas en Oro, Samira sabía que había descubierto algo que no debía y su curiosidad creció.

— ¿Qué oculta la Academia y su Biblioteca? - Susurro - ¿Qué ocurriría si abro los libros que parecen ser prohibidos?.

— Sabes que el Mal solo deja verse a quien lo dominará— una voz femenina, pero agradable, penetro el oído de Samira.

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