Capotulo 15

Tras aquel suceso en la escuela, todos estuvieron alterados. Alexey estaba gravemente herido, la herida en su pecho había sido bastante profunda por lo que perdió mucha sangre.

Contrario a él Roxana apenas tenía unas cuantas cicatrices, de entre las que más destacaba un zarpazo en el pecho.

Quien realmente se encontraba mal era Mary. Pues tenía heridas más graves alrededor de su cuerpo, los periodos de la Luna no ayudaban mucho, pues al ser días sin Luna, las heridas del cuerpo de Mary no estaban sanando.

En la enfermería, el médico se había encargado de tratar todas las heridas de Mary, ella aún seguía inconsciente por lo grave de sus heridas. Alexey y Gavrel en la habitación no dejaban de verla, les dolía a ambos verla así de mal.

Roxana, por el contrario, veía a sus compañeras de cuarto, en las camas frente a ella. También habían sido heridas de gravedad.

Una vez todos terminaron siendo tratados, el director entro a la enfermería acompañado de una maestra y el profesor de sociales.

— Lo que paso fue inaudito... Señorita Roxana, usted era perfectamente consiente de sus acciones y aun así, atacó a sus tres compañeras de cuarto, a Alexey por segunda ocasión y casi mata a la señorita Mary. — Dijo el director frente a Roxana.

— Tu actitud no solo daño a otros, sino que también ha causado que todos estemos en una situación de crisis. — Dijo él profesor quien se acercó hasta ella para poner su mano sobre su hombro e inclinarse hasta ella. — Por qué motivo hacer esto?. ¿Querías ser exiliada?— Le pregunto.

Roxana comenzó a llorar y termino por quedarse callada por unos instantes, en un de repente exploto nuevamente.

— Lo sé ya lo sé!!... PERO LA ODIO!!... ¡ELLA ME LO ROBO!! QUERÍA MATARLA!!— Grito echa una furia.

— eso no es pretexto!. ¿Qué dirán sus padres al saber que hizo tal cosa?. Nos ha colocado a todos en el centro de la cuerda floja.— Dijo él director furioso de igual manera. — Ya tomé cartas en el asunto...— Dijo el director cruzándose de brazos.

— ¿Qué?…— Roxana.

— Usted señorita Roxana, será removida a los dormitorios de exclusión preventiva. Iras todos los días con un psiquiatra, tomarás de manera correcta las medicinas que se te indican. Esta es su última oportunidad... la próxima vez… Será expulsada y enviada a un reclusorio.— Dijo él director.

— Señor director… La señora Hangetsu llego — Dijo la maestra acercándose al director.

Al escuchar eso todos se quedaron en silencio y después de unos minutos entró a la habitación esa misma mujer que vino el primer día. Vestida en rojo teniendo un cabello anaranjado y un rostro hermoso conjunto a un cuerpo bien definido. Entró mostrando una sonrisa en su rostro.

— Buenas tardes...— Dijo la mujer al entrar.

— Señora Hangetsu, bienvenida... Lamentamos haberla recibido en estas tristes circunstancias — Dijo mientras hacía una reverencia.

— Escuche que mi pequeña tuvo una pelea así que debía venir a ver... ¿Quién ganó?— Preguntó a lo que todos se quedaron callados y sorprendidos.

— ¿En serio?... — Dijo Alexey al escucharla, estaba furioso. — su hija casi... muere y pregunta... algo así?— Dijo este mientras se ponía de pie y caminaba hasta ella a duras penas.

Ella mostró una sonrisa y después camino hacia la camilla en donde se encontraba Mary.

— Los Zorros no podemos morir tan fácilmente... verán que mañana Mary se encontrará ilesa gracias a su magia.— Dijo la mujer mientras miraba a Mary para después sacar un reloj mismo que indicaba la posición y forma de la luna. — por desgracia hoy... La luna no estará en una posición aceptable.. Habrá Luna Llena y el poder de los Zorros no funciona en estos días — Dijo ella para después caminar hasta los demás. — Ella estará bien. Pero ustedes no mucho... ¿Quién te hizo eso chico?— Preguntó acercándose a Alexey para así poner su mano sobre el abdomen de él mismo que estaba cubierto por vendas. De inmediato el cuerpo de Alexey brillo, y con gran fuerza comenzó a llenarse de fuego. Todos se alarmaron, pero casi al instante el fuego se apagó y los moretones, heridas y rasguños de Alexey desaparecieron.

— ¿C-cómo?…— Dijo Alexey mirándose sin sentir dolor.

— De nada… Parece necesitan ayuda con estos heridos… Yo me encargo.— ...

...

Al día siguiente de aquel suceso, Mary despertó durante la tarde. Al abrir los ojos vio la luz del atardecer y justo en la ventana frente a ella a su madre.

— Madre...— Dijo Mary sentándose sobre la cama. Al verla su madre le sonrió y después camino hasta estar sentada en la cama de Mary.

— Perdón si no te cure, no tenía mucho poder y tú te puedes curar solita — Dijo ella.

— estás enojada porque no gane la batalla verdad?— Preguntó Mary.

— Enojada no, quizá un poquito decepcionada.— Dijo esta a lo que Mary agacho la cabeza recibiendo después una caricia de su madre. — Aunque… Me preocupé bastante — Dijo la mujer abrazando a Mary. — Creí que perdería a mi única hija —

— Madre... Te quiero — Dijo Mary abrazándola suavemente.

Tras hablar un poco sobre la pelea, porque si, su madre solo pregunto los detalles de la pelea una y otra vez. Sin embargo, una vez se detuvo, Mary aprovecho para hablar sobre algo.

— Madre debo decirte algo... necesito que aclares mis dudas — Dijo Mary a lo que su madre solo le miro.

— ¿Qué sucede?— Preguntó ella.

— Mm... desde hace unos meses antes de llegar a la academia... A veces veía a alguien… Era... Un zorro, alto, cabello blanco, y sus orejas y cola a la vista. Pero no tiene rostro... Muchas veces lo veo cerca de mí, otras lejos… Pero desde que llegué aquí... comenzó a darme... extrañas pistas... El otro día mataron a un hombre lobo y unos campistas en el bosque... Los intestinos del chico quedaron sobre el río y este se teñía de rojo... Un día antes... en el espejo durante la noche él escribió… "El río se teñirá de rojo". — Le dijo Mary.

— ¿Un espíritu?— Dijo esta escuchando a su hija.

— Sí... Y... hace unos días... me trajo un sobre... tenía un dibujo. Déjame mostrártelo — Dijo Mary poniéndose de pie algo adolorida.

— Aún no manejas tus poderes de curación?— Preguntó ella a lo que Mary negó con la cabeza.

— Bien... Muéstrame eso y después te diré lo que sepa... si un espíritu de los nuestros te está dando pistas de algo, es porque algo muy malo va a pasar — Le dijo ella.

Mary asintió una vez escucho sus palabras y después se dispuso a salir de la enfermería con ayuda de su madre.

...

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