Dia de trabalho - Shiro

Hola, me llamo Shiro. Tengo 29 años y una hija llamada Marie. Desde que la madre de Marie se fue, siento un vacío en mi corazón. La amaba mucho. Mi madre me abandonó cuando era pequeño y ya no puedo recordar su rostro, así que se podría decir que no he tenido suerte con ninguna mujer en mi vida. Me considero un buen jefe y he aumentado mucho los beneficios de la empresa familiar desde que asumí el cargo. Empecé la carrera de administración cuando Marie nació y me gradué el año pasado.

Coloqué su foto de nuevo ya que estoy presentando al personaje. Shiro...

El viaje fue bien en lo que se refiere al trabajo, no sé por qué, pero me enojé mucho con Allura por ese chico, el tal Michael. Hoy volvimos del viaje y estuve viendo un poco a Allura con Marie, ella la cuida muy bien. Después de que ella se fue, le di un besito a mi hija y me fui a dormir.

Me desperté y me arreglé para el trabajo. Le di un besito a Marie, que aún estaba durmiendo, y salí. Al llegar al trabajo, mi secretaria vino corriendo a contarme todas las cosas que tenía que hacer.

Melissa (secretaria) - Señor, tiene una reunión en dos horas y algunos papeles para firmar en su escritorio...

Ella sigue hablando mientras entramos al ascensor, pero antes de que se cierre, una mano sostiene la puerta, es mi padre.

Shiro - ¿Papá?

Fabrício (padre de Shiro) - ¿Ningún abrazo?

Le doy un abrazo.

Shiro - ¿Por qué viniste? ¿Viniste a pasar un tiempo en Nueva York?

Después de que asumí la empresa, mi padre se jubiló y se fue a vivir a Miami.

Fabrício - Vine a pasar un tiempo aquí y ver a mi nieta, ¿está en casa?

Shiro - Le pediré a su niñera que la traiga.

Fabrício - Me encantaría verla.

Le envío un mensaje a Allura pidiéndole que traiga a Marie, ella responde con un "Ok".

Después de una hora, llaman a la puerta de mi oficina, donde estábamos mi padre y yo.

Yo - Pueden entrar.

Allura - Con permiso.

Dice Allura entrando con Marie en brazos.

Shiro - Hola amor, mira quién vino a verte.

Digo tomándola en brazos y señalando al abuelo que está en un sofá en un rincón de mi sala. La dejo en el suelo y ella corre hacia el abuelo, que la sienta a su lado, siempre se han llevado muy bien.

Yo - Puedes irte, Allura, hoy me quedaré con Marie.

Allura - Está bien.

Ella dice y se va, siento ganas de decirle que se quede, pero no lo hago.

Después de terminar de trabajar, regreso a casa, acuesto a Marie y voy a hablar con mi padre en la sala.

Shiro - ¿Cuánto tiempo te quedarás?

Fabrício - ¿Ya quieres que me vaya? - Dice riendo.

Shiro - No es eso.

Fabrício - Lo sé, me quedaré una semana, supongo.

Shiro - Puedes quedarte en la habitación de invitados como siempre.

El se levanta para ir a la habitación, pero vuelve a hablar conmigo.

Fabrício - Otra cosa hijo.

Shiro - ¿Qué?