Fiesta

Estoy en la cama mirando hacia el techo, esa llamada a mamá no fue buena idea, ver a Dallas me había desestabilizado totalmente, no he parado de llorar, agradezco que George está coordinando la fiesta de noche buena y no aquí haciendo preguntas, no quería ir a ninguna fiesta y celebrar con desconocidos, ni fingir que todo esto me importaba cuando en realidad me importa una mierda, tomó una ducha, en cualquier momento entraría la encargada de organizarme, así que saco ánimos de no sé dónde y hago lo que tengo que hacer,

Salgo del baño y siento un suave toque en la puerta, supongo que es la persona encargada de organizarme.

- Pase- le ordeno

Entra una chica muy joven con una maleta más grande que ella, al verme me sonríe.

- Buenas noches, señora- dice tímidamente

- Buenas noches- le contesto

- ¿Lista?- pregunta

- Claro, salía de la ducha así que supongo que podemos empezar ahora mismo.

La chica no hablaba mucho, estaba muy concentrada en lo que estaba haciendo, tenía mucha agilidad y parecía que amaba lo que hacía.

- ¿Conoce a mi marido?- le pregunto.

Ella se sobresalta al escuchar la pregunta y puedo notar que se pone nerviosa, así que llego a la conclusión que ella fue su amante en algún momento.

- Sí- responde cortante

- ¿Has arreglado a otras de sus mujeres?- le pregunto ansiosa.

Creo que a la chica le va a dar un infarto, su respiración se agita y tiemblan sus manos.

- Es usted la primera- contesta.

- ¿Te has acostado con el señor Tall?- insisto

Ella me mira con ojos de querer matarme, pero respira profundo y trata de calmarse.

- Hemos terminado, mírese en el espejo y dígame que le parece, si hay algo que debamos corregir hágame saber- evade la pregunta

Me levanto de la silla y observó mi reflejo, ella hace un trabajo maravilloso, el peinado y maquillaje resaltaba sin duda.

- Gracias- le digo

Ella asienta y se pone a organizar sus cosas para marcharse, yo la detengo colocando suavemente mi mano en la de ella.

- Espero que los encuentros sexuales que tuvo con mi marido hayan terminado, no sabe de lo que soy capaz de hacer si me entero de que aún los vive con él- le digo molesta.

Ella abre sus ojos sorprendida, pero no dice una palabra, termina de empacar y sale rápidamente de la habitación, sonrió por mi manera de marcar territorio, debía dejar el precedente que actuaba como una mujer celosa.

No tenía idea de moda, solo vi este vestido y me gustó así que fue el elegido para esta noche, doy los últimos vistazos en el espejo y estaba lista para salir.

- Estas hermosa esta noche- dice George.

Me sobresalto porque no sentí cuando entro a la habitación, siempre actúa con cautela, sonrió y camino hacia él, también estaba guapísimo, me acerco a darle un beso y huelo perfume barato de alguna vagabunda que se le ofreció.

- ¿Con quién estabas? - digo molesta mientras lo olfateo.

Este se ríe mientras me abraza fuerte.

- ¿Ya llegaron las vagabundas?, responde carajo- le digo furiosa.

Solo son invitadas, las saludé eso es todo.

- Así como la chica que enviaste a organizarme, fue tu amante no es así- le aseguro

Este solo se ríe y eso me saca más la rabia, sé que adora estos berrinches, se acerca a mí, toma delicadamente la mano y me lleva hasta la cama.

- No es bueno que amenace a mi estilista- dice

- No me importa - le respondo.

El ambiente de la habitación cambia, se podía apreciar el olor a lujuria.

- Quítate el vestido- me ordena

- No creo que sea buena idea, ya me organizaron - le digo.

- Lo quiere a las malas y agresivo entonces- me desafía

Esas palabras entran profundamente en mí, este hombre me iba a volver loca, esta vida me gustaba sin duda, el mejor sexo de la vida.

Solo levantó mis hombros en señal de que no me importa, para activar el insisto de George, se lanza a mi me besa ferozmente, siento como rasga mi vestido de manera desesperada y me contempla desnuda, pasa su mano por mis pechos haciendo que se pongan duros.

- ¿Por qué me desafía?- pregunta jadeante.

- Porque me gusta, señor Tall- le respondo de la misma manera.

George rasga su camisa y baja la cremallera, me voltea quedando mi vientre contra la cama, levanta mis caderas dejándolas en el aire y me embiste de manera salvaje, ahogo un grito en la almohada, esto era otro nivel de placer, agarra fuertemente mis cabellos, mientras me da unas cuantas nalgadas, me embiste como nunca, una y otra vez.

- ¿Esto querías mi pequeña?- dice desesperado.

- Sí señor - le digo inocente

Esto lo termina por enloquecer y lo hace más agresivo, siento como si todo por dentro fuera aplastado por una roca, no podía callar mis gemidos, eran una mezcla de dolor y placer, siento como George llega primero, para después seguirlo yo.

Nos entrelazamos agotados, ese día habíamos cogido infinidad de veces, nuestros cuerpos cedía ante el cansancio.

- No podemos dormir, cariño- me dice al oído.

- Tengo sueño, estoy agotada- le digo adormilada

- Lo sé cariño, solo un par de horas y ya, le diré a Leyla que suba y te organice de nuevo- me ordena

Se levanta de la cama y se dirige al baño, ese hombre era lo más sexy que había visto, verlo desnudo era un momento que disfrutaba, debe sentir que lo observó porque se gira y me ofrece una sonrisa traviesa.

- Vamos, acompáñame a tomar una ducha..

Sonrió y salgo tras él, testea algo y entramos al baño, realmente fue algo rápido, me enrolla en una toalla mientras besa mi nariz, salimos agarrados de las manos.

Había momentos tan íntimos que compartía con George que me hacían dudar de mi continuidad con la misión, no podía ignorar los sentimientos que tenía por él, jamás nadie me había hecho sentir así.

- Voy a cambiarme en el otro cuarto- me dice mientras me besa.

- ¿Por qué?- le cuestiono

- Layla vendrá a organizarte y quiero darle el espacio- dice

Sale de la habitación y yo me quedo esperando a la chica.

Rápidamente, entra y observa todo al rededor, la cama estaba hecha un desastre y mi vestido rasgado en el piso, puedo ver que se siente incómoda y yo la miro con cara de satisfacción.

- Lamento el desastre- le digo

Ella solo hace caso omiso y comienza a preparar todo para volver a organizarme, puedo ver su frustración, tomó asiento y la dejo que vuelva a hacer su trabajo.

Me pongo otro vestido y salgo a la reunión, puedo ver a George compartir con un grupo de hombres, todos tenían una copa en la mano, la casa estaba a reventar, no sabía en qué momento llegó tanta gente, George al verme me sonríe y me invita a que me haga a su lado, yo camino hacia él, los hombres que lo acompañan me miran extrañados.

- Les presento a mi hermosa mujer- dice George, me sorprendo tanto como ellos, jamás espere que él dijera esas palabras.

Solo sonrió tímidamente y le doy un beso en la mejilla.

En ese momento Río hace su entrada triunfal, viene acompañado de una hermosa morena, llaman inmediatamente la atención de todos allí, George al verlo se dirige hacia el emocionado.

- Mi querido hermano - dice George mientras se abrazan.

Observó la escena mientras Río me observa fijamente y me echa fuego a través de ella.

- Bienvenido querido hermano- dice George.

- Me alegra verlo - dice Río

Se dirige hacia mí y me fulmina nuevamente.

- Así que sobreviviste de nuevo Oslo- dice serio.

Yo lo evito y trato de evadir la pregunta.

- Que bueno verlo Río- digo tranquilamente

- No puedo decir lo mismo Oslo, pero debo reconocer que estás radiante- dice cortante.

George se acerca a mí y me toma por la cintura.

- La cena esta servida, vamos.

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