Día uno

George observa la gran ciudad, estaba cubierta con nubes grises, tenía una copa en la mano y la otra estaba dentro su bolsillo, su hermano Río llega con varios informes importantes.

-Aquí tienes los informes, Olga esta limpia, es una simple administradora, puede estar tranquilo.

- Olga me importa una mierda, no puede volver a permitir que cualquier mujer se me acerque, no confío en ellas.

-Deja la paranoia, ¿Quién se atrevería a jugar con George Tall?, mira todo esto hermano, somos los dueños del mundo.

- Solo ten cuidado, hoy quiero ir a la discoteca, reserva el VIP, necesito desestresarme.

Río sonríe entusiasmado y hace la llamada.

Nuestro infiltrado nos informa que esta noche Tall irá a unas de sus discotecas favoritas, es la oportunidad que podemos utilizar, recuerda, si no es posible George, puedes intentar con Río.

La llamada se corta y yo me dispongo a tomar un baño y buscar la ropa adecuada Para la ocasión, la puerta suena y corro a abrir, han dejado un paquete en la entrada, la división me ha comprado ropa nueva, incluida sexy lencería, no puedo evitar sonrojarme, sé que Dallas está tras esto, pero le agradezco por la ropa, le sonrió a la cámara oculta, olvidaba que no tengo ningún tipo de privacidad, en mi casa había cámaras en todo el lugar, excepto el baño, era monitoreada todo el tiempo.

Me visto con un vestido bastante atrevido, quiero llamar la atención de Tall, hacer mi trabajo rápido y estar de vuelta al lado de mi familia.

Pongo el vestido con delicadeza y me maquillo suavemente, ubico el micrófono en una de las tiras del vestido, gracias a la tecnología este pasa desapercibido, me aplico mi colonia.

- Stone, ¿Está lista?

- Lo estoy mi mayor, espero que pueda entrar rápidamente a la organización.

-Un paso a la vez, ¿Recuerda la palabra de emergencia?

-Si mi mayor, deséame suerte.

- No la necesita Stone, tenemos fe en usted, cambio y fuera.

Salgo de la casa y me dirijo hacia la discoteca que se me informa,

El lugar estaba atiborrado de gente, parecía imposible la entrada.

- Mayor Rodríguez, necesito ayuda para entrar pronto!!- le informo.

- Estás sola Stone, recuerda que debes empezar a desenvolverse sola, no queremos intervenir en esto, podrían informar esto a Tall, Suspiro molesta, ahora debía entrar a como dé lugar.

Pasan los minutos y empiezo a desesperarme, no sabía por qué la gente le gustaba este tipo de entretenimiento.

- Stone, sé esta tardando mucho, lleva veinte minutos ahí- me sorprende el mayor Rodríguez.

En ese preciso momento un grupo de jóvenes entran, así que me escabullo y logro por fin entrar, me sorprendo porque si afuera había gente, adentro había más, imposible no estrujarme, así que busco el baño para informar que había logrado entrar y echarme un poco de agua en la cara.

-Estoy adentro.

- Buen trabajo- me contesta.

Salgo del baño y me dirijo a la barra, busco el VIP del lugar, pido un cóctel al barman de turno.

- Un sexo en la playa, por favor!!

El barman asiente y comienza a prepararlo, necesitaba ese trago urgentemente, debía ser Kathy Oslo, debo dar rienda suelta a mi nueva personalidad..

- Aquí tienes preciosa- me dice el barman

- ¿Cuánto le debo?- le pregunto

- La casa invita, no puedo cobrarle a una hermosa mujer como tú.

- Gracias, le sonrió.

Continuo en la barra y no hay movimiento alguno, esto empieza a aburrirme.

- ¿Desea otro cóctel?- interrumpe mis pensamientos el barman.

- Claro, ¿Por qué no?, pero primero iré al baño, no tardó.

Me encamino de nuevo al baño, pero antes de girar, observó un hombre hablando por teléfono, media casi dos metros, no comprendía que decía, ya que hablaba en francés, no podía reconocer a nadie de su carpeta, pero este hombre parecía importante por su vestimenta, tal vez podía conocer a Tall o estar en el VIP, me escondo tras la pared y quiero pasar por una damisela en apuros, como llamar la atención de este hombre, recuerdo una de las novelas que veía con mamá, empiezo a llorar al grado que se pueda escuchar, tomó el teléfono y simuló la llamada causante de mi llanto.

- ¿Por qué me haces esto?, sabes el dolor que siento, te odio - Trato de ser lo más convincente posible.

Mi plan rápidamente dio frutos, siento que el hombre me observa escondido, así que guardo la calma y me siento en un sillón, esperando que él se acerque.

-¿Estás bien?- me pregunta el hombre

- Eureka, mi plan funcionó, me hago la sorprendida.

- ¿Parezco que estoy bien?- respondo sería.

- Sin querer escuché su llanto, no quiero molestarla.

- Discúlpeme, no estoy bien, mi novio me terminó, Imbécil.

- Estoy con unos amigos en el VIP, ¿Quieres acompañarme y contarme todo?

- ¿De verdad?- no quiero molestar.

El hombre se acerca lentamente y me brinda su mano..

- Soy Oliver.

-Kathy, me llamo Kathy.

Poco a poco me saca de allí y me enseña el camino al VIP, empiezo a sentir un vacío en mi vientre, mi corazón empezaba a acelerarse, entró y el VIP, era un salón gigante y la vista era impactante, mujeres desnudas paseaban sin pudor y hasta algunos animales exóticos estaban allí.

- Ignore a las mujeres desnudas, es parte del espectáculo.

- Eso no es lo que me asusta, ¿Ese de verdad es un león?

Oliver se echa a reír, llamando la atención de sus acompañantes.

- Lo siento, pero eres una mujer ingenua, ¿supongo que es primera vez aquí?- pregunta

- Supone mal, he estado aquí, pero no en el VIP- respondo.

De un momento a otro el lugar se pone en silencio y las mujeres desnudas que paseaban por ahí, se detienen.

Los hermanos Tall, bienvenidos!!!, un hombre mayor les da la bienvenida calurosa, mis vellos se erizan al escuchar esos nombres, en un momento el tiempo se detuvo al tener contacto con George, este le da una mirada fría, que deja perpleja a Kathy, sigue su camino a la mesa.

Kathy siente calor en sus mejillas y decide dar la espalda, Oliver no dejaba de observar a Tall y solo alza su copa hacía él

- Gracias por invitarme aquí- decido romper el hielo y pasar desapercibida.

- No es nada, linda!, siéntase cómoda, debo irme.

Sin decir más, se levanta y deja algunos billetes ahí, marchándose tranquilamente, dejándome sola y estúpida.

-Ayuda!!, ¿Qué debo hacer?

Pero al otro lado no había salvavidas, tomo un trago que Oliver dejo servido, necesitaba aplacar los nervios y las miradas que me daban, no podía estar más tiempo allí, así que me dispongo a sentirme derrotada..

- Le envían este trago y la invitan a sentarse en la mesa de allí- dice la camarera.

Observó y era la mesa de un hombre mayor con una chica joven, inmediatamente siento náuseas, pero sonrió en agradecimiento.

- Gracias, pero ya me iba, me pongo de pie lista para salir.

Pongo el vaso en la mesa y doy media vuelta, antes de salir siento una mirada que me desnuda, pero hago caso omiso, salgo sin más.

Bajo al primer piso y me siento en la barra, mi nuevo amigo Barman, me sonríe y me sirve el cóctel.

- Pensé que se había ido- me reclama

- Me encontré a un viejo amigo- Sonrió.

Llega la media noche y me sentía exhausta, había tomado varios tragos y fue imposible acercarme a Tall, así que me rindo y me dirijo al baño para irme a mi casa, estaba arrepentida de ponerme el vestido, había olvidado el frío intenso de afuera, me miró al espejo y me dispongo a salir, no me percato al caminar, preocupada por sacar un labial de mi bolso,me golpeó con alguien, lanzándome al piso.

- Maldita sea!!, ¿Has perdido la vista?- grito molesta.

Tenía de frente a Río, quien me sonríe burlón.

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