Y tal cual se lo prometió a sí misma, así lo hizo.
Se ocupó de conseguir empleo, comenzó sacando su agenda personal y buscando los contactos de sus antiguas compañeras, así como también los números de los lugares donde había trabajado.
Al principio, cuando se contactó con los lugares donde había trabajado, se encontró con algunas negativas y también con que algunos de esos lugares ya no estaban en el rubro o simplemente habían dejado de existir. Esa situación le complicaba las cosas, pues no solamente veía truncado el hecho de volver a trabajar en alguno de esos lugares, sino que tampoco obtendría referencias de ellos.
Fueron varios los días en los cuales se ocupó de conseguir empleo. Hasta que se contacto con sus ex compañeras, algunas de ellas le atendieron pero otras al parecer ya no tenían los mismo números por lo tanto no responderían. Al igual que cuando se contactó con las empresas en las que había trabajado, tampoco consiguió buenos resultados con sus excompañeras, algunas ni siquiera estaban trabajando. Recién entonces Ángeles se dio cuenta de que habían pasado muchos años y que no sería tan fácil como había pensado, pero no se daría por vencida...
Así pasaron los días y meses también, ella se dedicó a sus niñas consiguió algún que otro empleo temporal, alquiló un lugar donde vivir con sus hijas, las cuales se adaptaron a cada situación nueva rápidamente dejando a Ángeles satisfecha de que al menos ellas no estaban sufriendo tanto la separación. Su ex pareja no volvió a aparecer y eso le dolía a las niñas pero con el tiempo se acostumbraron al hecho de que solo su mamá estaba presente.
Mientras seguía buscando empleo de lo que ella amaba hacer; se dedicó a hacer trabajos en su casa diseñando vestidos de fiestas. Luego de realizar un vestido para una boda, la cliente con la cual había entablado una relación de amistad, la invitó a su boda. Al principio Ángeles no quería asistir debido a que la boda era en un lugar muy exclusivo lo cual solo significaba una cosa, los que asistirían iban a ser solamente gente de dinero y ella allí no encajaba.
-Vamos, Ángeles. ¡Por favor!- le decía la muchacha por teléfono intentando una vez más que aceptará su invitación- Quiero presentarte a algunas personas que pueden ayudarte con lo del empleo.
-Cariño- decía ella tratando de excusarse- estoy muy atareada estos días, además las niñas tienen sus últimas clases en el colegio…
-¡Ya, basta! No seas mala, es solo un día.- le rogó la chica y Ángeles sintió incomodidad ante el pedido- Ok déjame ver como puedo hacer- respondió con dudas.
-¡Fantástico!-exclamó la chica con alegría- mañana te llevo la invitación.
-Tranquila niña, dije que voy a ver, no aseguré que iría- trató de calmar el entusiasmo de la muchacha
-Como sea- respondió esta otra- igual te la voy a llevar, nos vemos...- y sin más corto la llamada.
Ángeles y la joven gracias a las idas y venidas de esta para hacer pruebas y ver detalles del vestido de novia ,habían hecho una linda amistad, la muchacha tenía conocidos en el rubro textil y creía que alguno de ellos podía darle empleo a su amiga.
Al día siguiente la muchacha llegó a realizar la última prueba de su vestido y se puso feliz al ver que era tal cual ella lo había querido. De verdad su amiga era una experta diseñadora y quería ayudarle con eso del empleo, ya que no era lo mismo hacer de vez en cuando algún que otro vestido a trabajar en un lugar donde si o sí tuviera un sueldo fijo.
Antes de irse le extendió la invitación a su boda y cuando ya se había ido Ángeles quedó pensativa mientras veía aquella tarjeta, en eso su hija mayor entró al local donde la mujer tenía su taller.
-¿Qué te pasa mamá?Estás muy pensativa.- preguntó al verla.
-Bueno... una de mis clientes me invito a su boda- respondió con poco entusiasmo.
-¡Qué bueno! ¿Y supongo que vas a ir?- interrogó su hija.
-No. Me parece que no, tengo mucho que hacer todavía, ocuparme de los preparativos de las cosas del colegio de tus hermanas ...- la muchacha puso cara de disconformidad.
-Yo me ocupo de eso, hace años que no sales a ninguna parte. Ya es tiempo de que empieces a hacerlo. Además, no es como que vas a irte para nunca regresar -aclaró la joven y a Ángeles no le quedó otra que darle la razón.
De esa manera la muchacha logró convencer a su madre de que ya era tiempo de que saliera un poco.
Así que le ayudó a elegir que se pondría para aquel evento, si bien luego de su separación Ángeles se había dado cuenta de lo mucho que se había descuidado físicamente, con el correr de los días comenzó a ocuparse de eso, no se sentía con ánimos para ir a hacer actividad física en un gym así que se dedicó a salir a caminar, realizar aquella actividad le transmitía mucha paz y tranquilidad, a la vez despejaba su mente oyendo música. De esa manera consiguió bajar de peso, tonificar sus músculos, a la vez se encargó de su cabello yendo a un salón de belleza, lo corto a la altura de los hombros y lo tiño castaño oscuro, logrando con esto verse diferente, y hasta unos años más joven. Sus hijas estaban felices por el cambio.
El vestido que eligió para asistir a aquella boda era sencillo, color vino tinto, con hombros caídos , falda ajustada al cuerpo y a la altura de la rodilla. El cabello lo usaría suelto colocando en el un pasante en forma de flor.
Si bien Ángeles no estaba segura de que fuera buena idea asistir a aquella boda, tomó valor y llegado el día se preparó para ir.
Cuando estuvo lista, sus hijas se pusieron felices al ver a su madre tan bien arreglada; cosa que antes no habían tenido oportunidad de ver cuando estaba con su padre.
Llamaron un taxi, dándole la dirección adonde debía ir y se despidieron de ella deseándole suerte y pidiéndole que disfrutara de aquella fiesta.
Mientras iba de camino los nervios iban haciendo de las suyas en el interior de la mujer, la boda era en una casa quinta bastante retirada, tanto el sacerdote como el juez de paz habían sido pagados para estar presentes en el lugar. Al llegar descendió del coche, sus manos temblaban pues hacía ya tiempo que no iba a ninguna fiesta, también hacía mucho que no se vestía de aquella manera y mucho más tiempo era el que había pasado sin compartir con gente que no conocía.
Se detuvo en la entrada del lugar, respiro profundamente, tomando coraje se encaminó hacia la puerta, miró a todos lados esperando ver a la muchacha o quizás a la madre o hermana de esta y por suerte la madre de la chica estaba allí, al reconocerla se le acercó.
-¡Ángeles! Que bueno que pudiste venir, Lucy va a estar feliz- le dijo la madre de la muchacha saludando cortésmente.
-Es un placer estar aquí- respondió ella y en eso la hermana de Lucy se acercó rápidamente
-¡Mamá, mamá!- exclamó preocupada-¡Tenemos un problema!- al ver que su madre estaba con otra mujer la muchacha sintió pena- lo siento no vi que estabas ocupada.
-Está bien, cielo. ¿Qué ocurre?- preguntó su madre, la muchacha la miró dudando de si podía hablar frente a la mujer que estaba allí pero su madre al darse cuenta le dijo- Puedes hablar tranquilamente, es Ángeles.
-¿Ángeles? ¿La que confeccionó el vestido de novia de mi hermana?- indagó sorprendida y su madre afirmó con una sonrisa-¡Guau! ¡Estás preciosa!- le dijo a Ángeles y esta le sonrió.
-Bueno, niña, dinos ¿qué ocurre?- la sacó de su asombro la madre.
-Bueno pues... mi hermana está teniendo problemas para cerrar el vestido...-se encogió de hombros al notar sorpresa en el rostro de su mamá.
-Bueno mejor vamos a ver.-dijo la mujer caminando hacia donde estaba su hija-¿Nos acompañas?- le preguntó a la recién llegada y está asintió comenzando a caminar detrás de ella.
Caminaron por un pasillo repleto de flores y adornos en colores pastel y al llegar a la habitación donde la novia estaba preparándose, la situación era peor de lo que esperaban Lucy no solamente estaba sin su vestido puesto, sino que había llorado tanto que el maquillaje que antes la hacía ver como una princesa ahora era un desastre.
La muchacha al ver a su madre y hermana hizo puchero y su llanto se intensificó, más cuando notó a la mujer junto a su madre, secó sus lágrimas para asegurarse de que lo que estaba viendo era real.
-¿Ángeles?-preguntó incrédula
-Así es- respondió la otra
-¡Guau! Me encanta tu look- le dijo sonriendo al ver tan bien arreglada a su amiga.
-A nosotras también nos gusta- le dijo su madre- pero va a ser mejor que ahora nos ocupemos del tuyo que está horrendo.
Y de esa manera las tres mujeres se dedicaron a ayudar a la novia a colocarse el vestido, retocar el maquillaje para que en pocos minutos estuviera lista para salir.
Cuando ya estuvo preparada, la hermana de Lucy acompaño a Ángeles al lugar donde estaban los demás invitados y la dejó allí. .
Unos minutos después tras haberse oído el Ave Maria, la novia se presentó y fue recibida por su esposo quien además de estar impecable se veía feliz. Ángeles se alegró por la muchacha que estaba a punto de unir su vida con el hombre que amaba y que también sentía por ella lo mismo. Luego de que los novios manifestaran sus votos, todos aplaudieron, los presentes se acercaron a felicitar a los recién casados y Ángeles quien estaba conversando con Lucy , sintió algo extraño, alzó la cabeza y a unos metros de ellas pudo observar a un hombre con una copa en su mano, mirándola fijamente y este al darse cuenta de que ella lo miraba también, levantó su copa como saludo y le regalo una sonrisa que hizo temblar el interior de la mujer.
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Updated 75 Episodes
Comments
Charity Vain Rivas
angeles x no sigas teniendo hijos de cada obre que se atraviesa en tu vida
2024-10-03
0
Adoración del Carmen Martinez sonni
interesante comienzo 👌
2024-04-05
3
Calo
Está muy bonita la historia
2023-02-25
1