capítulo 19, SENSIBILIDAD Y CONFLICTOS

Todos habían pasado una tarde muy agradable , pero Vanina se veía un poco triste, cuando llegaron a casa Laura invito a Ismael a tomar café y Vanina se fue con María a su habitación la niña estaba cansada así que solo se quitó la ropa se colocó la pijama y se acostó Vanina se quedó con ella hasta que se durmió, luego ella va al baño y nota que su regla había llegado, respiró profundo y se alegró, se duchó y colocó su pijama

Decidió salir a la cocina y consigue que Ismael todavía está en la casa y se sorprende un poco, su madre se avergonzó un poco, pero Vanina más bien se sentía feliz de que su madre estuviera conociendo a un hombre, porque después que el papá de Vanina murió ella se dedicó a trabajar para ayudar con los gastos de la casa y ayudar a Vanina con la bebé, él fue su primer y único amor así que no creía que pudiera amar a otro hombre.

— Isma que te parece mi familia. Dice Vanina sentándose en la mesa con ellos.

— Encantadoras!!!

— Bueno humildemente esto es lo que somos, bienvenido.

— Gracias Vani me da mucho gusto ser bienvenido a tu familia.

Vanina sabía cuáles eran las intenciones de Ismael con su madre así que solo le estaba dando a entender que ella lo aceptaba.

La madre de Vanina va al baño y los deja solos.

— oye Vanina tú crees que yo pudiera salir con tu mamá? Que ella me acepte.

— claro que sí isma lo que si te digo es que no te atrevas a burlarte de ella.

— No señorita ella me atrajo desde que la vi, quiero conocerla.

En ese momento llegó Ginna y ve a Ismael con Vanina conversando y riendo, ella creía que él era su amante así que no tardó en derramar un poco de veneno.

— buenas noches!!

Ellos saludaron.

— veo que no pierdes tiempo Vanina ya mañana lo metes en tu habitación y pasado ya lo veremos viviendo aquí.

Ismael se sorprendió con lo que ella dijo y miro consternado a Vanina, ella solo respiró profundo y le respondió lo más calmada que pudo.

— Él es invitado de mi mamá así que respeta.

— jajaja si de mamá, no sé que pasa contigo.

Llega la Sra Laura y ve las caras de Vanina e Ismael que demostraban incomodidad y la Sra pregunta.

— Ocurre algo? Por qué tienen esas caras.

Ginna que estaba molesta de una vez le habla a su mamá.

— Mamá como es posible que tú aceptes esto!, Vanina está pasada de sinvergüenza, este señor dentro de poco dormirá aquí.

— Ginna que te pasa!? No seas grosera, no pareces una mujer profesional.

— veo que estás de parte de ella mamá te desconozco.

— Cállate Ginna no me hables así, eres una grosera y amargada, él es compañero de trabajo de Vanina y en todo caso. Si este señor entra a esta casa a mi casa es porque yo lo permito, así que deja de estarle diciendo cosas a Vanina porque si no.

— si no que mamá!? Me vas a correr y dejar a Vanina aquí, a la sin vergüenza esta!. Señalando a Vanina.

Vanina se puso nerviosa a ella la alteraban este tipo de discusiones, en seguida comenzó a llorar estaba muy sensible, Ismael tuvo que intervenir porque vio que las mujeres se alteraron un poco.

— Ginna yo veo a Vanina como una hija, pero a tu madre si la veo como mujer, y si estoy aquí es por ella, porque quiero conocerla.

— Que!!?? Pues mi mamá no está para estar saliendo con nadie así que váyase de mi casa.

Laura interviene y le da una cachetada a Ginna.

— Te exijo que te calles y respetes a todos los que estamos aquí Ginna, te he dejado pasar varias, pero ya está bueno.

Ginna se quedó callada y se fue a su habitación, Laura se sentía muy avergonzada y en seguida se disculpó con Ismael.

— Por favor Ismael disculpa a mi hija Ginna.

— tranquila Laura no te preocupes entiendo que al ver un hombre aquí se sienten celosas, de todas formas vengo después para poder explicarle mejor a Ginna.

Laura se acerca a Vanina quien había estado llorando.

— ya hija cálmate por favor, sé que ella te ha estado molestando.

Vanina estaba llorando no solo por la discusión sino también por toda la situación que estaba viviendo, sentía que todas las cosas malas se estaban uniendo.

— Mamá el tumor de María Laura volvió a crecer, por eso ella se ha estado sintiendo mal, es muy grande y puede que el tratamiento no sea suficiente.

— Hija porque no me lo habías dicho, tu sabías de esto Ismael.?.

El solo asintio, en ese momento tanto Ismael como Laura abrazaron a Vanina que solo tenía su cabeza apoyada sobre la mesa, ahora entendía el por qué Vanina estaba tan consentidora con su nieta.

Le dieron un té a Vanina y se quedaron con ella hasta que se calmó, luego se fue a dormir, Ismael y Laura se quedaron conversando un rato más, ella pensaba que Ismael después de ver todo eso no volvería, le agradeció el haberse quedado un rato más, Ismael se fue casi a la media noche, muy conmovido por lo que había sucedido.

Vanina se fue a su habitación y se acostó abrazando a su niña no podía siquiera imaginarse sin ella, sin su bebé.

La noche transcurrió y por la mañana Vanina hizo su rutina diaria, ducharse vestirse cómoda, preparar desayuno para todas; sin embargo, ese día solamente hizo tres desayunos, su hermana de ahora en adelante tendría que hacer lo de ella por sí misma.

María Laura despertó con muchos malestares y no hacía más que llorar al parecer se le iba la visión por segundos ella se asustó mucho.

Vanina se acercó a la niña la abrazó y pidió que se calmara, ellas sabían que eso podía suceder porque el Dr. Sebastián les había explicado, al cabo de un rato la niña se calmó ya podía ver sin problema Vanina la llevo a la cocina, pero ella no quería desayunar, aun así Vanina insistió hasta que la niña probó unos cuantos bocados, pero seguía irritable, llorando porque quería seguir acostada.

— mi amor por favor toma un poco más de jugo, te sentirás mejor.

— no mamá, quiero acostarme, ya no quiero.

— María solo un poco más si! Y ya no insisto.

Mientras terminaban de comer se acerca Ginna buscando su desayuno, pero se da cuenta de que no había para ella se molestó en gran manera y comenzó a reclamar el porqué no habían dejado desayuno para ella.

Su madre solo le dijo.

— ah quieres desayuno preparátelo tu misma. Se dio la vuelta y se sentó en la mesa.

Ginna solo agarró café y se sentó viendo con desagrado como Vanina intentaba dar de comer a María Laura, dijo con gran sarcasmo.

— ¡Otra Razón más para no tener hijos!

La Sra Laura la miró con decepción, mientras que Vanina la ignoró y aunque María se sentía muy mal y no quería comer decidió dejar de resistirse y tomó un poco más del jugo.

— Mami ya es suficiente, gracias.

— Está bien mi amor, vamos te voy a llevar afuera para que tomes un poco de sol.

Ella la tomó de la mano para ayudarla y salieron al pequeño jardín donde aún estaban los materiales de construcción.

— Mamá sé que está enfermedad es muy mala, pero deseo de todo corazón tener nuestro propio espacio, que más nadie te insulte o humille, o que digan cosas hirientes.

— y lo vamos a lograr mi amor, lo vamos a lograr. Con una gran sonrisa.

Después de pasar un rato allí, llevo a la niña al dormitorio ya su madre y hermana se habían ido a trabajar.

Vanina colocó música muy suave para no molestar a María y comenzó a hacer los quehaceres del hogar, limpio toda la casa organizó todo, preparo almuerzo, y lavo la ropa de ellas y su mamá.

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