Capítulo 4

"Se prende la luz"

-¡Despiértala!

-Está bien, bueno, solo no me presiones - dijo.

-¡Ejem! Elizabeth, ¡despierta!

"Se despierta de repente"

-¿Qué, cómo, dónde estoy? - preguntó Elizabeth.

-Elizabeth Malcolm, usted es acusada de matar a la Señorita Rosé Harrods. Está en la Estación de Policía. Espero que pueda colaborar, brindando la información de todo lo que has hecho, si se rehúsa su pena será aumentada a pena de muerte. Todas las pruebas indican que fuiste tú. La pistola conque mataste a Rosé estaba frente a ella, con las marcas de tu ADN, y la bala que tenía en su cerebro era de esa pistola. El cadáver fue encontrado en la Academia Abandonada de New Jersey, junto a unos cuántos más cadáveres de unos jóvenes aproximadamente de tu misma edad y unos hombres con ropa elegante. Así que, espero que puedas decirnos todo, ya no tienes escapatoria - afirmó el Policía Leo.

"Elizabeth era una joven de pelo negro azulado, estatura mediana, quizás su altura era de un metro con 63 centímetros, era delgada y parecía estar en buena forma. Había algo que destacaba en su alegre mirada y esos eran sus amarillentos ojos"

-Bueno, supongo que ya puedo revelar la verdad, si no quiero morir por supuesto. Aunque mi corazón y mi mente me estaban matando, ¡tengo que contarle a alguien! Y supongo que ese "alguien" serán ustedes - explicó Elizabeth.

Todo empezó ese horrendo día, estaba con mis audífonos escuchando mi canción favorita y caminando por el callejón oscuro que llevaba a mi casa. Todos los días, después de mi nuevo trabajo, iba por ese camino, aunque fuera un poco tenebroso, era el camino que más cerca estaba de mi casa.

Ya casi estaba en la esquina de mi casa, y guardé los audífonos, cuando escuché el sonido de una mujer gritando.

Me acerqué al lugar del ruido, que era en un callejón sin salida, vi que no había nada, así que di dos pasos hacia delante para salir del callejón cuando me taparon la cara con un saco de basura.

Intenté liberarme, pero sentí que las manos eran de un hombre fuerte, así que empezó a ahorcarme, casi me mata, pero a lo lejos sentí la voz de una chica diciendo:

-¡Basta ya! ¡La vas a matar! Inyéctale el somnífero y llévala hasta la camioneta.

-Está bien, jefa - dijo el hombre que me cogió por el cuello.

Cuando oí esas palabras me quedé completamente petrificada, y en ese momento sentí que la aguja era apuñalada en mi hombro, y en menos de 10 segundos me quedé completamente dormida y caí en un sueño muy profundo.

-Mm, ¡interesante! ¿Y qué pasó después? - preguntó el otro policía que se llamaba Gabriel.

-La verdad, es todo una gran historia de asesinatos, pérdidas de amistades, traiciones, engaños y mentiras. Prácticamente, Rosé Harrods fue la que empezó todo, yo no tenía la culpa de su sufrimiento, es verdad que mis amigos la hicieron sufrir en el pasado, ¡pero yo no le he hecho absolutamente nada! ¡Todo fue un gran malentendido! - explicó Elizabeth dando un pequeño golpe en la mesa.

-¡A ver, cálmate Elizabeth, explícame! - exclamó el Policía Leo sosteniendo de las manos a Elizabeth.

-Señor Oficial, por favor, no me llame más "Elizabeth" no soporto ese nombre que me puso mi madre, llámeme Lisa, mis pocos amigos me llaman así - afirmó Lisa quitando las manos de Leo de las suyas.

-Está bien, Lisa, ahora cuéntanos - dijo Leo.

Cuando desperté, estaba en el piso, ya no tenía el saco de basura, pero estaba atada a unas cadenas. Miré a mi alrededor y vi que era mi antigua escuela, la que está abandonada ahora. También vi a mis antiguos compañeros de clase, eran diez de ellos, igualmente estaban atados a las cadenas unos sujetos que parecían importantes por sus trajes, eran 5 de ellos, cuatro varones y una sola hembra.

-¡Amigos, son ustedes! - exclamó Lisa.

-¡Lisa, te hemos extrañado mucho! - dijo Daniel, el ex mejor amigo de Lisa.

-¿Y a mí? ¿No me extrañaron? - dijo con una voz diabólica.

"De repente en donde estaba la mesa de nuestra profesora apareció un trono desde el cielo, y aplastó toda la mesa de la antigua profesora. En ese trono estaba una chica sentada con una mirada asesina, la verdad cuando la miré me dio un poco de miedo"

-¿De verdad que no me recuerdan? - preguntó.

-¡Mm! ¡Conozco esa voz de algún lugar! ¡Fuiste tú quien mandó a ese hombre a que me inyectara el somnífero!

-¡En efecto, Elizabeth, fui yo! - dijo.

-¡Infeliz! ¿Por qué haces esto? ¿Qué te hemos hecho? - preguntó Elizabeth.

-De seguro que es una de esas lunáticas que les gusta secuestrar a los demás por diversión - dijo Jacob, el más inteligente de los quince.

Cuando ella escuchó las palabras de Jacob, agarró una hacha que estaba detrás de ella y la lanzó contra Jacob, el hacha estuvo a punto de cortarle la cabeza, pero solo le rozó por el cuello.

-Si vuelves a insultarme haré malabares con tus ojos - dijo con una sonrisa en su rostro.

Jacob estaba completamente paralizado por el miedo, pero Helen, su ex mejor amiga le dijo:

-¡Mantén la calma, Jacob, no te hará daño si no la insultas!

-¿Cómo quieres que mantenga la calma después de que esta chica estuvo a punto de cortarme la cabeza y luego me dice que si la vuelvo a insultar me sacará los ojos? - dijo Jacob asustado soltando una pequeña lágrima que caía por su ojo derecho.

En ese momento Helen solamente agachó la cabeza y dijo:

-Es verdad...

-¡Bien! Como nadie sabe quien soy, pues yo les recordaré - dijo la chica.

Primeramente, en esta misma escuela, cuando todos nosotros teníamos 15 años, ustedes me maltrataban, me hacían bullying. Me pateaban en la barriga, me hacían beber del retrete, me hacían comer con gusanos en mi comida, me obligaban a que les hiciera sus tareas y si no lo hacía me pegaban. Un día, tú, Helen, me empujaste por las escaleras de la escuela, y me partí una pierna, y no pude caminar por un mes. ¿Quieren que siga? - preguntó.

-¡Espera, tú, tú, eres Rosé, la chica a la que La Mafia Urquhart le mataron a sus padres en su cumpleaños número 18! - afirmó Helen.

"Rosé era una chica de pelos rojizos como el fuego, una mirada ardiente llena de odio y venganza, pero estos ojos mostraban miedo y tiempo de planeación debido a las grandes ojeras que disimulaba el maquillaje, una que dos cicatrices se podían ver en la cara de la chica"

-¡No me recuerdes este terrible día! - dijo Rosé metiéndole una bofetada a Helen.

-¡Y con ustedes, asquerosos asesinos de La Mafia! ¡Hablaré ahora! - exclamó Rosé.

"..........................."

-¡Espera, qué! ¿Los de la Mafia también estaban? - preguntó Gabriel.

-Exacto, era la Mafia Urquhart ahora les explicaré el motivo - afirmó Lisa.

"..........................."

Ustedes. Yo estaba muy feliz y tranquila en mi cumpleaños, pasándola bien con mis padres y mis hermanos, ¡hasta que ustedes llegaron! ¡Y mataron a toda mi familia, solo por una estúpida deuda! Logré escapar de la masacre, pero juré, que me iba a vengar de ustedes - afirmó Rosé.

-Deuda es deuda, cuando alguien no paga el dinero debido, muere, después de los 2 meses - dijo David, uno de los de la Mafia.

-¡Ya cállate estúpido! - exclamó Rosé golpeando a David hasta que lo desmayó.

-Bueno, bueno, ahora les contaré el motivo del secuestro, y como me vengaré de ustedes. ¡Será muy divertido! - exclamó Rosé.

Los secuestré para jugar un "Juego", en el cual tendrán que matarse entre sí para sobrevivir. Cada semana yo elegiré al asesino y él tendrá que matar a una sola persona. En caso de que el asesino mate a dos personas o no mate a ninguna, morirá de la forma más cruel que yo decida. Obviamente, la persona atacada por el asesino puede defenderse, matándolo, pero, nadie sabrá quién es el asesino, ¡tendrán que descubrirlo ustedes mismos! Y si la persona que no es asesina "esa semana" mata a alguien, también morirá de la manera que yo decida. El que logre sobrevivir podrá satisfactoriamente matarme, yo no me opondré ni negaré. Antes de que el sobreviviente me mate, le contaré todos mis secretos y desactivaré el campo de fuerza que rodea la escuela. Obvio que esta escuela está rodeada de muros de 50 metros de altura y está rodeada por muchísimos guardias. En todos los lugares hay cámaras, ¡hasta en el baño! Y obviamente tendrán comida, pero la comida dependerá de cuántas personas maten. ¡Y de no cumplir mis exigencias del Juego, vendrán castigos tan despiadados que no tienen idea aún ustedes de lo que puede desencadenar no hacer lo que yo diga! Bueno, ¿qué estamos esperando? ¡Qué empiece el Juego!

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