Cap 5

Me quedo sola e inmersa en un dolor tan profundo, que veo mi mundo caer sin poder hacer nada. En medio de de esta situación no puedo dejar de preguntarme por qué un hombre como este, me quiere a mi de esposa?. Estoy tan confundida con todo esto que no se que hacer y no se que pensar. Después de tanto tiempo de haber abandonado la idea de encontrar el amor, ahora me toca esperar un año más para permitirme sentir por primera vez enamorada. No les puedo mentir, eso es lo que más me duele de todo esto, que perderé un año antes de enfocarme en lo que realmente deseo en este momento.

Debo firmar no tengo más opciones, no quiero seguir leyendo este contrato tan absurdo, así que tomo el bolígrafo y empiezo a firmar donde dice mi nombre, después de eso miro hacia la ventanilla del avión y mi mente queda en blanco. No se con exactitud cuánto tiempo ha pasado pero mis ojos pesan y no puedo seguir despierta así que caigo en un profundo sueño. Han pasado algunas horas y el movimiento del avión me hizo despertar, cuando abro mis ojos me veo en una cama amplia, y al enfocar bien lo veo al frente sentado en una silla, tiene una tableta en sus manos y se ve muy concentrado, estoy petrificada no quiero moverme, quien me traería hasta acá, yo soy gordita y pues mi peso no es liviano; él se ve muy fuerte pero no se si con lo frío que es se tomaría tanta molestia para que yo descansara adecuadamente. Después de unos minutos él levanta la mirada y dice - veo que ya ha despertado, me alegra que haya firmado sin más cuestionamientos… lo miro con seriedad y le respondo - pero eso no significa que no los tenga; y si firme es porque usted no me dejo opción… su rostro inexpresivo me mira y dice -mañana será la boda en el registro civil, después viajaremos a EE.UU, tengo unos pendientes allá y así aprovecharé para que la gente crea que estuvimos de luna de miel… lo miro confusa y le digo -usted y yo no tendremos intimidad, por ninguna parte del contrato estipula eso… se levanta de la silla y camina hacia la cama, luego se sienta despacio a mi lado sin quitarme esa mirada sensual que tiene; con decirles que no puedo mantener mucho tiempo el contacto visual, después se acerca a mi, de una manera lenta y sensual, pone una de sus manos a mi costado y la otra acaricia mi rostro, siento como las pulsaciones de mi corazón están a mil por hora; luego delicadamente pero con firmeza toma mi barbilla entre su mano grande; y acercando su rostro al mio quedando a tan solo milímetros de distancia dice -si a mi se me pega la gana usted será mía, acaso no pague 10 millones por usted?, así que sus palabras o deseos no me importan; pero tranquila que meterme con una gordita y nada agraciada como usted no está en mis planes… me siento en una montaña rusa de emociones, por un lado tranquila de que no tendré que hacer nada que no quiera y por otro lado me siento humillada y dolida, no puedo creer que sea tan “fea” para producirle asco a alguien; así que ante este témpano de hielo debo verme fuerte; y con fuerza le respondo - me siento entonces tranquila, porque compartir un espacio tan sagrado como el lugar donde se duerme con un iceberg, no es muy saludable… sin quitarme la mirada dice - asi que soy como un iceberg?, muy creativo de su parte señorita Rueda, no me rete, solo se lo advierto no tengo mucha paciencia y los retos me estresan y no me gusta sentirme estresado…lentamente retira la mano en la que tiene sujetada mi barbilla, por último acaricia mi rostro, se levanta y se va, camina unos cuantos pasos hacia la salida de la habitación, se voltea y dice - será muy divertido tenerla de mi esposa… cierra la puerta y me siento como si no hubiese podido respirar durante mucho tiempo, y en ese momento suelto un gran suspiro y lanzó una almohada hacia la puerta.

Frustración es lo que siento ahora mismo, nada de lo que soñé en un momento he podido cumplir, tengo 30 años y siento que la vida se me va sin poder tener algo de amor. Esta situación cambió mi vida y le dio un giro de 180 grados, no se si eso es bueno o malo, ahora pienso en la ironía de la vida, pedia a gritos un cambio y ahora que lo tengo quiero huir sin detenerme. Después de un tiempo siento como el avión toca tierra, cuando salimos veo dos autos que nos esperan, un deportivo de muy alta gama y una camioneta polarizada, estando ahí escucho decir a Antonio - Lucciano, lleva a la señorita a mi casa… el hombre que recibió la instrucción asienta con la cabeza diciendo - si señor… luego veo cómo Antonio se pone gafas oscuras y se sube al auto deportivo; sin alientos, se ve hermoso, como esos protagonistas de novela que solo existen ahí. Luego escucho una voz que me saca de los pensamientos que dice - señorita por acá por favor… me señala la camioneta, camino hacia ella y me subo. El camino transcurrió en silencio, vamos tres personas, Luciano y otro señor, que venía con nosotros en el avión. En el recorrido del aeropuerto a casa de Antonio, trato de disfrutar la vista observando la ciudad, definitivamnete Roma es hermosa.

Después de un recorrido de casi 40 minutos llegamos, a una entrada de condominios, pero claramente solo hay una casa gigante, todo es gigante y hermoso, al entrar a esa gran mansión le pregunto a Lucciano - Oye Lucciano… él mira por el retrovisor y responde - si señorita, que se le ofrece?… lo miro y pregunto - el señor Williams vive acá con su familia?… Lucciano responde - no señora, acá solo vive el señor, su familia vive en otra ciudad… quedo sorprendida y solo pienso que es una gran casa para una sola persona.

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