El buena funcionaria.

Miro a Denise, que dice que está pensando en dejarlo justo en su primera semana de trabajo. La miro indignado y le digo;

¿De verdad vas a renunciar a un buen trabajo con un buen sueldo por 6 piedras en el camino?

Aprende a saltarte estas piedras o utilízalas como peldaños hacia tu éxito. Tampoco les caigo muy bien y dejan el baño hecho un asco y ¿sabes lo que hago?

¡Voy allí y lo limpio! ¿Y sabes por qué? ¡Para eso me contrataron! Ahora tú, si estás ahí delante para vender joyas, ¡hazlo! Supera tu objetivo del mes y recibe tu bonificación.

-Denise- ¡Tienes razón, Eloa! No puedo dejar de apoyar a mi hijo con cosas buenas sólo por seres mezquinos y superficiales. Gracias por tus consejos Eloa.

-Bart- Denise, ¿Irina también se unió a los demás para molestarte?

-Denise- ¡Ella es la líder de la banda! Prácticamente lo que ella dice los demás lo obedecen fielmente.

Veo que Bart se pone triste y después de comer le llamo para hablar en la sala principal, donde hay unos pequeños sofás para descansar.

Bart, eres un buen hombre. Pero tu corazón ha elegido amar a alguien que no te ama, y eso te está llevando al fondo del pozo.

-Bart- -Lo sé... Pero no siempre fue una imbécil como lo es ahora. Incluso empezamos a "salir" para ver si funcionaba. Hasta que esos cinco idiotas le dijeron que trabajando delante tendría la oportunidad de conocer a un hombre rico y guapo. Y que no debería perder el tiempo con alguien como yo sabiendo que puede tener a alguien mejor.

¡Qué horror! Por eso llevan tanto maquillaje y perfume. Para atraer la atención de los hombres que entran en la joyería. Esto es patético.

Bart, dale a tu corazón otra oportunidad. Denise está criando sola a su hijo. Creo que ustedes dos tienen algo en común. Ambos vienen de malas relaciones. Podría funcionar. Dale una oportunidad.

-Bart- -¡Lo pensaré! No sé si aceptará ir al cine conmigo o a una heladería.

Para una primera cita, elige algo en lo que pueda participar su hijo. Además de ser algo que la impresionará, tendrás la oportunidad de conocer al pequeño.

-Bart- Me encantan los niños, esperaré al próximo fin de semana cuando las cosas le vayan mejor aquí en la joyería y la invitaré a tomar un helado con el pequeño.

Así es, todo a su tiempo. Volvemos a limpiar, porque para eso estamos aquí. Mi día transcurre sin sobresaltos, claro que he trabajado demasiado porque esas mujeres se complacen en ensuciar las cosas sólo para verme limpiar.

Pero no me importa si creen que me están humillando de alguna manera, están completamente equivocados.

Para eso estoy aquí, para limpiar y mantenerlo limpio. Incluso si son tan mezquinos como para duplicar mi trabajo durante el día, no me importa.

_Mientras Eloá sortea todos los obstáculos, Gael sigue intentando diseñar algo que le agrade._

He hecho tantos dibujos que parece que se me ha agotado la mente. Es como si no tuviera nada más que dibujar. No me gustaba nada de lo que hacía.

He diseñado cordón, pulsera, anillo, incluso pendientes y nada me ha gustado, nada ha brillado lo suficiente como para decir que es único. Quiero aquello en lo que sé que pondré mis ojos y me producirá una emoción diferente en mi interior.

Y hasta ahora no lo he conseguido, ni siquiera tengo una idea de lo que quiero como joya principal para el reparto. Estoy aquí hablando solo conmigo mismo hasta que mi ayudante dice;

-Petrus- Sr. Owens, siento interrumpir este momento de pensar en voz alta, pero como no tiene una noción exacta de qué tipo de joya querrá... Una colección, esa cajita que a toda mujer le encantará tener como regalo con pendientes, cadena, pulsera y anillo. Todo en un diseñador único, ¡seguro que será un éxito! Puede elegir piedras de colores como diamantes, rubíes, esmeraldas, amatistas, zafiros... Crear un arco iris y que puede ser el nombre del diseñador único.

Petrus, acabas de recibir una bonificación en tu salario. Ya sé lo que quiero diseñar y ya sé lo que quiero para mi juego de joyas.

Por eso estás aquí conmigo, sólo lo mejor con lo mejor. Vuelvo a dibujar y consigo dibujar un conjunto increíble.

Mirándolas en ese trozo de papel puedo sentir lo que quiero transmitir a las mujeres.

Un arco iris es colorido, lleno de vida, es bello un fenómeno raro que todavía se nos aparece y ¡así son las mujeres!

Son la fuerza de la naturaleza que cambia nuestra vida. Tengo hambre, miro a Petrus y le digo: creo que podemos hacer una pausa para comer algo;

-Petrus- ¡Puedo ir a buscarlo y podemos comer aquí!

¡No! Quiero salir de aquí un rato... ¡Vamos! Cuando llegamos a la sala de descanso, ¡no puedo creer lo que veo! Hay dos mujeres y una le grita a la otra.

La que grita trabaja en la sala principal vendiendo las joyas y la otra lleva un uniforme de limpieza, sólo mira con la cabeza levantada a los ojos de la mujer.

¡Y la mujer de la limpieza es Eloa! No puedo creer lo que estoy viendo, está trabajando en mi joyería... ¡En limpieza!

Si quería un trabajo... No la dejaría trabajar como limpiadora y no me gusta cómo le grita mi otra empleada.

Eloa aún no me ha visto, miro a Petrus y le digo; ¡llévame a la habitación! Cuando llegamos, respiro hondo y le digo: "Dile al director que quiero que despidan hoy mismo al empleado que gritaba a la limpiadora".

¡No la quiero en mis tiendas! Se fue. Me quedo pensando: "¡Así que ayer pasó el día aquí! Y estoy pensando cosas que no debería de ella".

Y en cuanto vuelve Petrus intento que me hable de ella y me cuenta todo lo que pasó ayer y hoy. Y dice que es una gran empleada.

Pero que los demás empleados de la sala principal se meten con ella. Si me lo hubiera contado todo anoche, hoy no estaría trabajando en la limpieza, pero me callaré. Esperaré y observaré a ver a dónde llega.

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