Trato.

Han transcurrido dos semanas desde el último encuentro que tuve con Elizabeth, a eso sumándole asunto de Dimitri y los Ricci, los clanes están hechos un caos por mi decisión, hoy han venido varios líderes a pedirme explicaciones lo cual me hace enojar.

- Escúchame bien, no tengo por qué dar explicaciones, cuando son ustedes quiénes actúan a mi espalda y no pierden el tiempo para derrocarme, solo hice lo necesario para defender lo que me pertenece.- hablo firmemente a los presentes.

- Entiendo tu punto Marc, pero creía que antes de tomar una decisión tan importante como esta, debes tan siquiera consultarnos, no es algo que te concierna solo a ti.- interviene Gaél Mancini.

Este es la cabeza de clan Mancini, a pesar de su corta edad se considera como el más estratega y peligroso enemigo en la mafia italiana.

- Tú mejor que nadie sabe la posición en la que me encontraban Gaél, no voy a darles la oportunidad de atacar, no piense que porque estuve lejos de aquí no estoy enterado de sus movidas.- les advierto.

Soy consciente que más de uno de los presentes no esperar verme caer para atacarme, son como feroces lobos que esperan que su líder se lastime para atacar.

- Si eso es todo, ya se pueden retirarse, tengo cosas que hacer.- les comunico mientras me sirvo un trago.

Estos salen rápidamente, para dar paso a un Antonio molesto.

- Es en serio que vas a seguir bebiendo?, has pasado esto últimos días así, debes volver a tus sentidos y estar sobre todo sobrio, recuerda que tu hermano ando suelto.- me reclama este.

- No te preocupes, estoy lo suficientemente lucido para encargarme de los asuntos, pero cambiando de tema, ¿has encontrado algo de Dimitri?, me urge saber que planea, es como una bomba de tiempo que puede estallar en cualquier momento.- le comunico mis preocupaciones.

- Con respecto a eso me enteré que va a asistir a la gala de los Grecos, sería problemático si lo dejamos hacer conexiones.- me informa mientras me da una invitación.

- ¿Quieres que asista?.- le pregunto mientras muestro la invitación.

- Si los Grecos te invitaron es porque quiere formar lazos contigo y eso es algo que nos conviene, ellos cuentan con influencias en los clanes franceses y tener su respaldo, sería maravilloso.- me dice mientras mueve sus hombros.

Puedo notar su intención y su idea no están mala, sería estupendo no aliarme con los Grecos, tendría la posibilidad de intervenir en la mafia francesa y mi poder se extendería.

- Confirma que voy a asistir.- una sonrisa diabólica se forma en mis labios.

Quiero ver la cara del bastardo de mi hermano cuando me vea en el lugar, tenemos mucho tiempo sin vernos y creo que es hora de que la familia se reúna.

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Por fin puedo tener un momento para relajarme y tomarme un buen trago en mi despacho, aún no me acostumbro a esta nueva vida, sabiendo que mi padre está en una cama de hospital muriendo y que mi supuesta familia no pierde el tiempo en quererme ver bajo tres metros de tierra consume mis energías, pero lo que más me molesta y no me deja descansar es Elizabeth, estoy creyendo que esa niña me lanzó algún tipo de hechizo, cualquiera parte que voy puedo visualizar sus ojos avellana miel, lo único que puede hacerme olvidar todas mis problemas es un buen Whisky.

De tanto beber hasta he perdido la cuenta de cuantas botellas van, de lo único que soy consciente es de mi propia miseria, de tanto lamentarme me quedo profundamente dormido, pero unos pasos me sacan del tal estado, los cuales están acompañados de un olor a lirios que atrapa mis fosas nasales y al instante sé que se trata de mi pequeña Isa, la cual intenta marcharse al ver que estaba profundamente dormido, sin esperar dos veces la llamo.

Está tarda en responder pero cuando lo hace sus palabras expresan miedo, un poco exhausto intento no asustarla más, pero todo se complica cuando me pide que la deje ir, controlando mi enojo le digo que pare y que se retire, pero parece que mi respuesta no es de su total agrado, ya que está vez insiste aunque con mayor seguridad. Rápidamente, me levanto de mi silla y me acerco hasta ella, la cual al sentir mi tacto entra en pánico, lentamente reposo mi cabeza en su hombro para después preguntarme si tiene miedo mi, cosa que afirma de inmediato.

Unas palabras de mi nana viene a mi cabeza, estoy de acuerdo que si quiero acercarme a ella y que esta elimine el terror que tiene hacia mí tengo que ser amable y demostrarle que no soy tan malo, teniendo presente esto le propongo que se puede comunicar con su familia, pero con algunas condiciones a lo cual se muestra dudosa e insegura, observando su confusión enrollo mis brazos alrededor de cintura mientras Inhalo su aroma, para más tarde proponerle un trato, cosa que llama su atención y acepta después de un momento, teniendo confirmada su asistencia la suelto y me encaminó a mi asiento, esta no lo piensa dos veces y sale de la habitación apresuradamente.

Su visita sube de inmediato mis ánimos, ahora sé que aunque me tema aún tengo posibilidades de acercarme y eso me entusiasma, sin ganas de seguir tomando me dirijo a mi habitación a descansar, he pasado mucho tiempo en vela y es momento de reponer fuerzas.

A la mañana siguiente le informo a Antonio sobre mis planes, este un tanto dudoso asiente ante mis órdenes para luego retirase en silencio, observando que se acerca la hora del desayuno me encaminó hacia el comedor, donde visualizo a mi hermosa y pequeña Isa, la cual viene vestida muy casual con su cabello suelto, definitivamente esta mujer es hermosa en las condiciones que sea, está al notar mi presencia se pone un poco rígida, pero sé obliga a reaccionar y un tanto dudosa toma asiento un tanto alejada de mí, esta acción me causa cierta risa pero contengo las ganas de molestarla.

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