Capítulo 5

Ya pasaban de las 12 del día cuando mi madre me vino a despertar. Empecé abrir y cerrar los ojos, después de la visita de Samuel pude dormir y descansar como nunca, aun no tenía ganas de levantarme pero terminé por hacerlo para poder ayudar a mi mamá con los que haceres de la casa.

Madre: En que quedaron por fin tú y Samuel.

Renata: Mamá siento que también es la que importa aquí.

Madre: Hija, a caso crees que sus papás no investigarán donde se encuentra?

Renata: Si, aun falta bastante para tomar una decisión, pero tampoco me gustaría depender de él.

Madre: Bueno, bueno has los labores y estudia para presentar el examen para la preparación.

Asentí con la cabeza, después de un buen rato terminé con los labores de la casa ya que no quería cargarle la mano a mi madre. Ella bastante cansada está como que además esté haciendo aquí cosas.

Tome mi ropa interior poniéndola en la cama para tomar la ducha, así mientras estudio un rato me voy preparando igual para la reunión que hoy los Ferretti tendrán.

Me metí al baño para la ducha. Abrí la regadera dejando salir el agua helada para que quedara tibia, me desvestí mirándome al espejo, sonreí al recordar a Samuel de cómo llegó haciendo tremendo escándalo. Me puse a pensar en todo lo que dijo en irnos lejos para seguir con nuestra vida lejos de su familia, negué con la cabeza, mi madre tenia razón, sus padres darían rápidamente con nosotros.

Me imagino que hoy estaremos más vigilados de lo normal para que no nos acerquemos, pero al menos Samuel y yo ya nos habíamos puesto de acuerdo de como hacer las cosas sin que nadie se dé cuenta. Al menos ahora que todos saben y piensan que terminamos es lo mejor que puede pasar.

Me metí bajo la regadera sintiendo agradable el agua al tacto con mi cuerpo.

Me preguntaba como es posible que sus padres no lo apoyen en sus decisiones, es cierto hay una diferencia garrafal entre él y yo pero sin embargo nos queremos sinceramente y quizá sea amor de adolescentes pero me gustaba la idea que tanto él como yo nos visualizabamos en el futuro.

Samuel siempre ha sido un chico muy encantador, siempre ha sido el chico que no necesita demostrar lo que no tiene, al contrario si solo hay 3 bocados y quedamos 4 personas él se sacrifica para que los demás puedan tener opciones. Sonreí al recordar cuando mis amigos y amigas nos fuimos de paseo y juntamos para la comida, él nunca se quejó de querer algo más.

Cerré la llave saliendo de la ducha. Tomé una toalla secandome el cuerpo, me enrollé la toalla en mi cabello empezando a vestirme. Me lave los dientes, una vez que terminé me dispuse a tirarme en la cama con mis libros.

Bastian:

Hoy era un día en donde me iba anunciar mi compromiso con Lucrecia, después de lo de anoche ni ganas me daba de ir, pero tendría que cumplir después de todo faltaba dos meses para la boda.

Levanté la mirada al ver que había entrado uno de los oficiles entregandome unos documentos.

Oficial: Hasta hoy sábado viene!

Bastian: No me queda de otra. Toma entrégale esto al Juez Morgan para que firme los documentos de las entradas de los chicos.

Oficial: Si señor.

Entro mi amigo de toda la vida Abogado, Capitán de los oficiales, uno de mis mano derecha en todo el tiempo que hemos sido Abogados.

Gerard: Para hacer oficial tu compromiso no pinta nada bien tu rostro.

Bastian: Ni me lo digas!

Gerard: Eso por que?

Bastian: Anoche presentó Samuel a su novia en la cena que tuve en la mansión de los Ferretti.

Gerard: Y que tal? Es 90-60-90. Digo Samuel debe tener excelentes gustos.

Bastian: Para nada es una gran modelo. Es una niña le calculo entre 14 y 16 años.

Gerard: Vaya! Algo como para él.

Bastian: Si, solo que resultó ser la chica de la limpieza.

Gerard: De cuando aquí eso te afecta.

Bastian: A mi no, para nada. Es una chica demasiado hermosa. El detalle es que no sabes como la ofendieron entre Los padre y sobretodo Lucrecia que no se midió de las palabras!

Gerard: Bueno que te esperabas? Es normal que los padres se esperaban una de buena familia.

Bastian: Si, pero en los sentimientos no se mandan. Me sorprendió muchísimo Samuel, hubieras visto como la defendió de la familia, sin importarle nada. Nunca había visto algo así. Samuel ama a esa niña. La pobre estaba asustadisima de ver como la trataban.

Gerard: Ni hablar. Tu familia política siempre ha dado de que hablar.

Bastian: Lo sé.

Me levanté tomando mi gorra, hoy sábado por lo general me gustaba estar casual, además que quería tomarme el tiempo para llegar a casa de los Ferretti. Me despedí de Gerard saliebdo del reformatorio juvenil, donde soy el director y dueño. Mi padre me heredó un legado donde justos nos hicimos que nuestro apellido sea conocido por defender a los inocentes que acusaban injustamente. Mis padres fallecieron en un terrible accidente junto con los padres de Gerard y fue en ese entonces que nos hicimos más unidos de lo que ya éramos.

Miré el reloj sacando un cigarrillo mirando que ya era hora de ir a mi villa para prepararme para la noche, sabia que tenía que estar listo y mentalmente preparado ante mi compromiso.

Renata:

Sentí que me removían, me desperté rápido sentándome en la cama.

Madre: Renata, ya es tarde, sabes que a la señora Ferretti cuando tiene este tipo de eventos no les gusta que lleguen tarde.

Renata: Si mamá ahora me apresuró.

Me levanté dando un brinco para empezar a prepararme, miré la hora eran las 5:00 pm así que como pude me arreglé, mi madre me entregó mi uniforme ya listo, me lo puse, mientras me ponía mis tenis, me cepille el cabello. Me acerqué a mi madre dejandole un beso en su mejilla, tomé mis llaves y mi bolso para ya salir.

Renata: Adiós mamá!

Madre: Que Dios te bendiga hija. Cuídate,no hagas nada imprudente.

Renata: No, te quiero mamá.

Me acerqué de nuevo dándole un fuerte abrazo que me respondió con mucho amor.

Madre: Eres la luz de mis ojos hija. Te amo tanto.

Renata: Eres la mejor madre que me pudo tocar. Nos vemos.

Salí corriendo hacia la calle para estar en busca de un taxi.

Levanté la mano y rápido uno se detuvo. Me subí indicándole al taxista donde me llevaría, el hombre asintió dirigiéndose al lugar.

Mi móvil empezó a sonar. Lo saqué de mi bolso sonriendo como tonta al ver que era Samuel.

Llamada:

- Hola mi hermosa.

- Hola guapo.

- Ya estás viniendo?

- Si.

- Quieres que pase por ti?

- No, ya casi estoy cerca.

- Muero de ganas de verte ya.

-Ni me lo digas, solo podré verte de lejos.

- Lo sé pero basta con que esté cerca para admirarte y enamorarme más de ti.

- Bueno ya casi llego. Te amo Samuel.

- Te amo Renata eres mi vida. Ten siempre presente eso.

Terminé la llamada mirandonque ya casi llegaba, el hombre se detuvo, le pagué y me baje.

Como siempre me caminé hacia la puerta de atrás donde entraban los empleados.

Renata: Hola María.

María: Hola Cariño, ayúdame con eso. que no quiero que venga o la señorita o su madre solo para regañarte.

Empece ayudar a Maria en todo lo que me pedía total era lo único que podía hacer, tampoco era que pudiera hacer mucho, ya que no me iban a permitir estar cerca de los invitados por nada del mundo.

Samuel: Hola María.

Me dí la media vuelta mirando esos ojos encantadores, le sonreí sin que lo viera María pero al menos ella sabía lo mío con Samuel, pero lo último era que estábamos separados para todos.

Renata: Le sirvo algo Joven?

Samuel: No, me basta con verte para llenarme.

Maria: Samuel no deberías estar aquí, puedes meter a Renata en problemas.

Samuel: Por que, no la estoy perjudicando.

María: Sabes a lo que me refiero.

Samuel paso de las órdenes de María, todo el tiempo estuvo En la barra solo jugando su móvil, cruzábamos miradas y sonrisas que solo él y yonpodiamos entender sin necesidad de decirnos palabras.

Miranda: Samuel aun no estas listo. Los invitados ya están en la recepción. Además Melissa la amiga de Lucrecia te esta esperando ansiosa.

Como supuse, su madre y la señorita harán todo lo posible por hacer que él conviva con algunas de las amigas de ella.

Samuel: Tengo que estar presente?

Miranda: Es la fiesta del compromiso de tu hermana, así que ve a cambiarte y bajas.

Samuel rodeo los ojos pasandonpor la espalda de su madre.

Samuel: Que sepas que para mi todo esto es 7na completa farsa.

Miranda: Ve a cambiarte, es lo que tienes que hacer. Estarás con Melissa.

Samuel: Si, si si ya voy ya voy.

Samuel se alejó de la cocina cuando miré a su madre salir igual.

Renata: Serán muchos invitados?

Maria: Claro, siempre los Ferretti derrochan para tener bien a sus invitados.

Me dispuse a limpiar con cuidado las copas, para poder llevarlas eb su lugar. Tomé las botellas de champagne para que a los invitados no les hiciera falta nada. María terminó por llevar todo hacia adelante para que no tuviera la necesidad de ir.

Después de un buen rato María llegó con el carrito vacío, acomodé las demás copas.

Maria: Vamos adelante por que nos pueden necesitar. Te quedarás en todo momento conmigo.

Las dos salimos juntas de la cocina, nos quedamos paradas en la entrada de la recepción mirando a todos que vestían muy elegantes. La señora Miranda se nos acercó.

Miranda: Donse está Samuel, hace rato que debió haber bajado. Melissa lo espera.

Maria: Lo mando a cambiarse.

Miranda: Renata, ve a buscarlo y con la misma bajas, no quiero que andes cerca de mi hijo.

Miré a Maria asintiendo con la cabeza, empecé a caminar subiendo rápido las escaleras, en verdad si se había tardado Samuel, a lo mejor con eso que no quería estar pues si decidió no bajar.

Llegue al pasillo de las habitaciones mirando la puerta de la habitación de Samuel entreabierta con la luz apagada.

Renata: Que raro!

(Escuchen- Unsteady)

Empuje lentamente la puerta escuchando el rechinar, la luz del baño desde lobque se había abierto parecía estar encendida, metí mi brazo empezando a palpar la pared hasta dar con el interruptor. Entre sintiendo resbalar mis tenis, miré hacia abajo abrí más la puerta levantando mi mirada y viendo la terrible escena que había en la habitación, toda llena de sangre por todos lados.

Entre apresurada hacia el baño que estaba cubierto casi todo de sangre.

Renata: Sa.. Sa... Sa...mu...él

Pero que había pasado aquí.

Samuel: Re...

Escuche casi un susurro dando media vuelta mirando a Samuel tirado en el piso cubierto de sangre y golpes en todo su rostro. Corrí hacia él. Pase mi mano de bajo su cabeza levantandolo un poco.

Renata: Samuel, mi amor dime... Quien te hizo esto? Quien te hizo esto?

Trataba de apretar su pecho mirandonque de allí provenía la sangre que no dejaba de salir, me había manchado casi toda con su sangre.

Renata: Por favor Samuel dime quie fue? Que paso? Que sucedio? Por que?

Samuel: Re... Reni. Te amo...

Renata: SAMUELLLLLLL!!!! NOOOO!

No se les olvide dar me gusta y seguirnos para mas capítulos.

Renata

Samuel

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