Ciudad Jazak. Buenos Aires. Argentina.
En algún lugar nos encontramos al doctor Applebee quien está junto a Tiba.
-Este mundo moderno pronto estará a mis pies. -Exclamo Tiba viendo a través de la ventana antes de darse media vuelta. -Solo debo esperar a recuperar toda mi fuerza.
-Pero antes cuando lo hagas me mostraras como haces todo ¿verdad? -Le pregunto el doctor Applebee.
-Mas te vale que no estés exigiendo me algo. -Le advirtió Tiba observandola.
-No, yo solo quería recordarle nuestro trato. -Se excuso el doctor Applebe.
-¿Que ganas tu con eso? -Le pregunto Tiba.
-Gani conocimiento. -Le contesto el doctor Applebee. -Lo único que quiero conocer los secretos del universo.
-Admiro eso. -Lo algo Tiba. -Te estás portando como una buena mascota así que si cuando tenga más fuerza te mostraré algo increíble, el mayor secreto y misterio que existe.
Más tarde en la casa de Lara Orea ella se encontraba conversando con Carol quien no podía dejar de pensar aún en todo lo que había sucedido.
-No entiendo cómo es que ella tiene un cuerpo. -Exclamo Carol con confusión.
-¿Ella es un fantasma? -Le pregunto Lara.
-No, aunque el hechizo con el que la sellé debió haber atrapado su alma. -Le responde Carol recordando aquel momento. -A no ser que haya conseguido un nuevo cuerpo.
-¿Crees que eso fue lo que paso? -Le consulto Lara.
-Es probable. -Dijo Carol.
-Si ella no es un fantasma entonces ¿Que es? -Le dijo Lara.
-Es una bruja. -Le contesto Carol.
-¿Cómo es eso posible? -Repitio Lara abriendo sus ojos sorprendida.
-Es una larga historia pero ahora tengo tiempo para contarte. -Aseguro Carol con una sonrisa.
-Te escucho. -Le dijo Lara.
-Mi historia comienza en el año 1580. -Comenzo Carol a relatar su historia.
Año 1580, Argentina, el Pueblo Zugamurdi, aquí está localizada la hacienda Walker donde nos encontramos a una pequeña de a penas 11 años, el nombre de esta niña es Carol Walker. Ella está caminando descalza por un jardín, ella puede sentir la vegetación en la planta de sus pies mientras camina por el lugar oscuro. Está tan oscuro que no puede distinguir absolutamente nada más haya del suelo y una puerta a abierta la distancia. La pequeña niña caminó hasta esa puerta de la cual parecía salir una luz brillante, Carol Walker camino hacia la esa puerta abierta que era lo único que ella podía distinguir claramente. Al llegar a esa puerta Carol pudo ver en el interior de esa extraña choza dos muñecos los cuales estaban rodeados por dos velas de color negro encendidas.
Carol aún recordaba esos momentos tan vividos que casi podría verlo en su mente.
-Mi adolecencia fue algo fuera de lo común al igual que mi infancia porque desde pequeña tuve estás... (Carol Walker hizo una pausa para pensar antes de continuar relatando su historia) habilidades.
-¿Que habilidades eran? -Le pregunto Lara Orea.
La verdad es que si no fuera porque había presenciado algo que no hubiera creído si no lo hubiera visto con sus propios ojos en ese momento se hubiera reído, aún así, si bien Lara no se consideraba como tal una persona atea tampoco se consideraba una persona que creyera todo lo que le dijeran.
-Yo fui criada por mi padre y una pareja de empleados de la hacienda, eso se debe a que mi madre murió al poco tiempo que yo naci. -Exclamo Lara continuando con su historia.
La madre de Carol se llama Joaquina Domínguez aunque es conocida comúnmente como "Doña Joaquina" y su padre se llamaba Antonio Walker aunque igualmente solo era más comúnmente llamado "Don Antonio". Doña Joaquina es una mujer morisca, hija del comendador Domínguez y una mujer mulata de piel clara Intermedia (bronce) que fue hija de una mujer de piel muy oscura (ébano) que fue esclava y logró conseguir su carta de libertad al conocer al amor de su vida; un importante hacendado español. Era una mujer de complexión robusta y piel clara intermedia (color durazno), ella tiene ojos café oscuros, cabello color negro peinado estilo rodete. Por otro lado, su padre es un hombre apuesto y esbelto que tiene piel color clara (marfil), su cabello es liso y castaño peinado con raya al medio.
Carol heredó el color de piel clara intermedia de su madre y el cabello castaño liso de su padre.
Carol casi perdió a su madre cuando nació, algunos miembros del pueblo creen que fue debido a una mujer llamada Merga Waterhouse, ella es una mujer que acostumbra usar ropa estilo puritana antigua y común de aquella época, también siempre se la podia caminar con la ayuda de un cayado que usa de baston a lo Moisés. Al verla podrían pensar que aparenta ser una señora de entre 50 a 60 años, aunque muchos aseguran que aquella anciana tenia más de 100, su piel es de color clara (Blanca) con una ligera tonalidad más oscura en sus mejillas (color bronce), lo más extraño eran ojos de un color que podría parecer celeste o gris dependiendo de la iluminación. Ella tenia cabello largo y pajoso que caía sobre sus hombros saliendo de aquel sombrero antiguo, aquel cabello era canoso que contrastaba con sus cejas de color castaño claro y eso no hacía más acentuaba las facciones de su rostro;
una nariz larga y ganchuda con una berruga del lado derecho y una más grande del lado izquierdo.
A pesar de eso lo que llamaba la atención no de ella no era su apariencia si no el hecho de que era una mujer a la que la mayoría de la gente intentaba mantener alejada y es que algo que toda la gente del pueblo de Zugamurdi comentaba es que Merga Waterhouse era una bruja.
Todas las familias cuidaban celosamente a sus hijos pequeños, de una forma casi sobre protectora y es que durante muchos años los niños del pueblo desaparecían, es por eso que no solo habían grandes rumores de que ella era una bruja si no que incluso estaban seguros que ella secuestraba a niños pequeños y recién nacidos para ofrecerlos como sacrificios a su señor Satán. A pesar de todo eso ella era una mujer tan respetada y tan temida que aquel que se atreviera a tocarla... Bueno, ya se lo imaginarán.
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