-Ahora prepárate para morir, Noza...
-Noicacolsid. -Se escucha decir a una voz que interrumpe a Tiba haciéndola gritar sujetando su mano.
Al ver la mano de Tiba la señorita Orea se da cuenta de lo que la había hecho gritar y era que su dedo índice se había dislocado. ¿Como era posible? De un momento a otro el dedo de esa mujer se había torcido y ahora estaba dislocado, no sé que era lo que estaba pasando ni como era posible todo esto.
Todo eso era algo muy extraño para mí y algo que me daba miedo pero ese mismo miedo y sorpresa ahora me tenía paralizada y no me permitía escapar, no podía hacer nada más que quedarme ahí.
-Maldita! -Grito Tiba volteando a ver hacia la cueva.
Al ver en esa dirección la señorita Orea pudo ver a una mujer de pie sosteniéndose con una mano de la pared de la cueva. Ella era una mujer esbelta con cabello largo y lacio que caía sobre sus hombros.
-Como escapaste?. -Le dijo aquella mujer.
-Ellos me liberaron. -Le contesto Tiba sosteniendo su mano.
-Volvere a encerrarte! -Aseguro la mujer sosteniéndose.
-Te ves cansada ¿Que más podrías hacer?. -Le dijo Tiba con una sonrisa.
-Tengo lo suficiente para detenerte. -Le dijo aquella mujer.
-Si, tal ves aún no esté tan fuerte pero pronto lo estaré. -Exclamo Tiba con una sonrisa mientras se acercó al doctor Applebee.
-Alejate de ellos! -Le ordeno aquella mujer.
-Dadevarg sam on. -Dijo Tiba apuntando con una mano a ella y con la otra al doctor Applebee.
En ese momento ambos comenzaron a flotar.
-No escaparas! -Le dijo la mujer soltando de la pared para avanzar hacia ellos pero cuando intento dar un paso se cayo al suelo.
-Pronto volveremos a enfrentarnos y va a ser muy diferente. -Aseguro Tiba desvaneciéndose en el aire junto al doctor Applebee.
En ese momento la mujer se quedó desmayada en el suelo ante la mirada de la señorita Orea quien corrió hacia ella.
Ciudad Jazak. Buenos Aires. Argentina.
Lunes, 11:58 am
Cuando aquella mujer abrió sus ojos calmadamente por unos segundos antes de sentarse sobresaltada.
-¿Que...? ¿Pero que...?
-Oh ya despertaste. -Le dijo la señora Orea con una sonrisa.
-¿Dónde estoy? -Le pregunto la mujer.
-En mi casa. -Le contesto la señorita Orea. -Te desmayaste... Estuviste dormida dos días enteros.
-¿Dos días? -Le pregunto aquella mujer sorprendida.
-Si, dos días. -Le contesto la señorita Orea asintiendo con su cabeza. -Te atendí ahí y te traje aqui cuando te pude estabilizar.
-¿Que es esto que tengo puesto? -Le pregunto.
-Es mi ropa es que tú ropa estaba sucia así que aproveche para lavarla. -Se excuso Lara. -creo que somos casi la misma talla.
-Yo... -Exclamo la mujer llevando su mano a su frente.
-¿Te sientes mal? -Le pregunto la señorita Orea.
-Me siento algo mareada... -Dijo la mujer cerrando sus ojos.
-Recuestate y descansa. -Le dijo la señorita Orea.
-Esa mujer se escapó ¿Verdad? -Le pregunto la mujer.
-Si, pensé reportarlo pero nadie me creería, incluso los cuerpos desaparecieron... -Le contesto la señorita Orea. -No se porque siempre me persiguen este tipo de cosas pero ¿Que está pasando?
-Pues...
-Luego me cuentas, ahora te traeré algo para comer debes tener hambre. -Le dijo la señorita Orea.
-Si, creo que sí. -Le contesto la mujer.
-Bien, comerás algo y después hablaremos. -Le dijo la señorita Orea dándose media vuelta.
La señorita Orea iba a dirigirse a la cocina pero antes de llegar a la puerta de la habitación se detuvo y de volteo a ver a la mujer para decirle;
-Me llamo Lara, por cierto..., Lara Orea ¿Y tú?
-Soy Carol. -Le respondió aquella mujer.
-Carol ¿Que? -Le pregunto Lara.
-Carol Walker. -Le contesto la mujer.
Lara no podía creer que aquella chica rubia de piel clara (blanca) ojos celestes y sonrisa encantadora tuviera algo que ver con lo que había sucedido pero no podia negar lo que había visto con sus propios ojos.
Más tarde 15:30 pm luego de haber almorzado y dejar que Carol descansará un poco, ella sentía algo confundida y desorientada en la habitación, el ventilador estaba encendido y ella cerraba sus ojos disfrutando de aquel viendo refrescante cuando repentinamente entro Lara a la habitación.
-Oh, despertaste. -Exclamo Lara al verla con sus ojos abiertos. -¿Como te sientes.
-No muy bien. -Le contesto Carol.
-Te sientes mal? -Le preguntó Lara.
-Estoy algo débil, pero mucho mejor comparado ahora a cuando desperte. -Le contesto Carol.
-Me alegra oírlo. -Le contesto Lara.
-¿Quien... Libero a Tiba? -Le pregunto Carol a Lara.
-¿Te refieres a la que mató a los demas? -Le consulto Lara.
-Ella misma. -Aseguro Carol asintiendo con su cabeza.
-Creo que nosotros. -Exclamo Lara apenada.
-¿Porque? -Le pregunto Carol observandola molesta.
-Nosotros...
-Yo tuve que sacrificarme para que ella no le hiciera daño a nadie, tuve que estar atrapada junto a ella y dejar atrae todo lo que conocía y todo lo que amaba. -Le reclamo Carol.
Lara la observó pudiendo sentir el dolor de Carol cuando hizo una pausa para quedarse en silencio un momento, su mirada y la expresión en su rostro revelaba un profundo dolor. Cuando Lara iba a decirle algo Carol tragó saliva sintiendo como si una gran bola de angustia se deslizaba por su garganta, luego de eso hablo con una voz quebrada para decir;
-No pude ver crecer a mi hijo... (Carol hizo una pausa para aclarar su garganta) no pude pasar tiempo con el y nunca podré porque obviamente ya hasta esta muerto!... ¿Y todo para que? ¿Para que la liberen y vuelva a hacer daño?
-Te juro que no lo sabíamos que eso pasaria. -Replico Lara. -Habian leyendas de espíritus en esa cueva pero no nos imaginamos nada de esto.
-Si habían leyendas, entonces ¿porque entraron a esa cueva? -Le pregunto Carol bastante molesta.
-Aquel hombre, Applebee, el nos sobornó para ir. -Le explico Lara. -Nosotros no queríamos ir despues de escuchar lo que decían de ese lugar.
-¿Que quería ese hombre en la cueva? -Le pregunto Carol.
-Eso quisiera saber. -Exclamo Lara.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 23 Episodes
descargar
¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
Comments