Al día siguiente en el primer receso, Arkon se encargó de enseñarle los conceptos básicos de la magia a Marina aunque al principio no entendía llegó a comprender.
— a veces la magia elemental reacciona con las emociones. — dijo Arkon. — cuando hiciste el hechizo durante el examen te sentías nerviosa ¿no es así?
Marina asintió.
— si quieres empezar con lo básico deberías empezar sintiéndose cómoda o desestresada.— le sugirió Arkon
— es fácil decirlo... — suspiro Marina
— seguiremos con esto después, muy pronto dará comienzo el siguiente bloque de clases.— dijo Arkon listo para irse
< debo admitirlo, ella no me causa mucho estrés... Hasta es aceptable su presencia. >
Momentos antes del toque de la campana, los alumnos que ya estaban en el salón de clase vieron con sorpresa como Arkon y Marina entraban juntos.
Lo cual generó muchos rumores.
— ¿esa no es Marina? —
— ¿por qué entro al mismo tiempo con Arkon? —
— a lo mejor solo se cruzaron.—
— pero si se fueron juntos cuando empezó el descanso. —
— ¿y si están saliendo? —
Marina estaba un poco avergonzada, no quería que pensaran que ella y Arkon eran pareja. Ni siquiera estaba lista mentalmente para eso.
< esto es malo, Arkon ni siquiera le gustan los rumores... Esto sería terrible para su reputación. > pensó Marina
Sin darse cuenta, ya se había encendido la chispa del odio de alguien.
El resto de la clase transcurrió con normalidad hablando sobre los fundamentos mágicos.
Al finalizar la clase, Marina fue a su habitación pero se detuvo en seco al ver como en su puerta habían rayones y dibujos feos de ella con mensajes horribles.
"Zorra"
"mujerzuela"
"mentirosa"
Ante esos insultos inmediatamente buco al culpable con la mirada, pero estaba completamente sola.
<¿por qué hacen eso?> se preguntó indignada por este acoso.
Al día siguiente, cuando llego a su salón se dio cuenta de que su carpeta estaba garabateada con tinta.
< ¿enserió piensan acosarme? > pensó muy molesta
— siempre sucede eso todos los años, si dejas que te moleste solo empeorará.— habló Arkon detrás de ella.
Marina se sorprendió y asusto al escucharlo.
— Arkon ¿cuándo llegaste?— pregunto Marina aún sorprendida
— hace medio minuto — respondió secamente
Marina suspiro aliviada, aunque no había escuchado a Arkon llegar.
Así transcurrió una semana, durante ese tiempo Marina fue víctima de amenazas e insultos, intento hablar con los profesores y le prometieron ayudarla a encontrar al culpable, sin embargo, no han hecho ningún progreso.
Y por si fuera poco, las otras compañeras de su clase la ignoran y hablaban mal de ella a sus espaldas por tener "encuentros" con Arkon. Ella intentó varias veces explicar el malentendido, pero solo consiguió ser ignorada.
El día presente no era la excepción.
< quiero morir... > pensó Marina Sin ningún ánimo.
Miró al frente para ver a Arkon leyendo un libro ignorando lo que pasé a su alrededor.
< es sorprendente que no se inmute por los rumores. Se ve que le da igual lo que piensen los demás. >
Durante esa semana, gracias a Arkon, Marina ha logrado controlar mejor su magia de agua, pero aún tenía que practicar.
Sin embargo, en ese momento...
— ¡oye Arkon! — lo llamo Red.— ¿es cierto que estas seduciendo a la protegida de la reina?
< ¿qué dice este tipo? > pensó Marina Sin ocultar la sorpresa y desagrado en su mirada.
Arkon apartó la mirada del libro para ver directamente a Red.
— son rumores sin un buen fundamento. — dijo Arkon
Eso, enfado a Red.
— ¡oye! ¿Crees que emparejándote con ella puedes ascender de posición y dejar de ser un bastardo? — dijo Red con una sonrisa burlona
— te equivocas como siempre — le respondió Arkon
— recuerda tu posición, solo eres un bastardo repugnante que no debería mezclarse con la nobleza. — agrego Red
— "a palabras necias oídos sordos" — recito Arkon
— ¿qué acabas de decir imbécil? —
— "y a gente necia vista ciega"—
Y así inició una discusión entre los gritos e insultos de Red y las respuestas indiferentes de Arkon.
Con toda esta situación Marina se sintió incómoda, tal parece que acercarse a Arkon solo trajo problemas para ambos y no deseaba ser una molestia para él.
En la hora acordada para su entrenamiento con Arkon. Sin embargo...
— Arkon Argenta, lo mejor para nosotros es dejar de reunirnos. — le dijo Marina
Arkon no se esperaba eso.
< ¿no que quería controlar su magia? Entonces ¿por qué quiere dejar el entrenamiento? > pensó Arkon.
— ¿puedo saber el porqué? —
— usted tiene una gran reputación y se que para usted no fue fácil construirla. Temo que por estar conmigo todo se arruine. — respondió Marina. — además, yo también estoy pasando por problemas y lo mejor para ambos es no volvernos a reunir, pero no significa que no podamos hablar de vez en cuando.
Sin esperar respuesta Marina se largó dejando a Arkon solo.
< se junta conmigo y luego se va... Como aquella Paladina. > pensó Arkon con disgusto.
Sin tener nada más que hacer se marchó de regreso a su casa, aunque se fue con un sentimiento extraño...
Disgusto; decepción y molestia.
< ¿enserió me molesta mucho que ya no quiera estar conmigo?...>
Arkon se detuvo al ver a una pareja conformada por una chica bajita de cabello rubio y rizado junto a un chico bastante atractivo pasando frente a él.
< ¿o es porque solo me ha usado y luego desechado? >
Inconscientemente, apretó sus puños y siguió su camino.
No obstante, con la pareja de antes... Ambos se hallaban en un callejón.
— ¿este lugar no es muy solitario? — pregunto la chica rubia asustada
— no te preocupes, no hay nada ni nadie por aquí — dijo el chico.— estamos solo nosotros
— eso me gusta — dijo la chica rubia acercándose al cuello de su pareja para besarlo.
Pero lo que le dio no era un beso sino una mordida.
— ¡eso duele!— se quejó el chico
Pero su novia no se detenía, es más, el dolor fue aumentando al igual que los gritos del joven.
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