Pacto

¿Qué los demonios buscan almas? ¡ha ha ha! Eso es absurdo, solo buscamos la forma de salir un rato de esta oscuridad eterna.

Los humanos creen que salimos a una hora determinada o cuando nos invocan mediante juguetes o rituales que pueden “abrir portales” 

¿Cuántas veces he escuchado “te doy mi alma a cambio de…”? Venden el alma como si fuera de ustedes, como si fueran dueños de algo intangible, es tan patéticamente absurdo como decir que son dueños del aire. 

Si un demonio buscara algo, sería el contenedor de dicha alma, eso sí podemos usar… El cuerpo que se mueve, que anda, que saborea, que huele, que siente… ¡Eso! ¡Eso es lo que buscamos!... A menos que tengamos hambre y necesitemos energía…

Esta novela trata de un “sacrificio” hace aproximadamente mil años atrás, Akbal un gran demonio se movía entre los reflejos y los espejos (las puertas hacia este lado) 

Unos jóvenes se encontraban jugando a la tablita esa que según invoca espíritus, entre el parloteo sin sentido, uno de ellos pidió (como siempre) dinero y poder, pero lo que le llamó la atención fue lo descabellado o cruel de su ofrecimiento. 

Arion- (Jugando a invocar espíritus) ¡Espíritus! ¡escuchen mi plegaria! ¡Ahora tengo una pequeña empresa que quiero hacer crecer! ¡Ayúdenme a obtener lo que quiero! A cambio les daré a mi tercera hija como novia! 

Hana- (Temerosa) Arion esto no es un juego, que tal si un día tenemos hijos

Arion- (Despectivo) ¡NAAA! Ya sabes que no creo en esas cosas y si existiera no creo que nos de nada

Muyal- (Bromista, se dirige a Hana) ¡Vamos cuñada! Solo estamos divirtiéndonos 

Hana- (Incómoda) Yo no quiero jugar así y se los dije…

Temerosa, Hana salió de la habitación y se sentó en el patio, la noche era fría y oscura. Tenía ya dos años saliendo con Arion, pero sus bromas no le causaban nada de gracia, siempre jugaba con todo llegando a los extremos.

Arion- (Saliendo a toda prisa de la casa) ¡Vámonos! 

Hana- (Sin comprender) ¿Por qué? ¿qué ocurre?

Muyal- (Asustado) ¡No preguntes y vámonos! 

Los tres salieron de la casa sin mirar atrás, Hana no entendía lo que pasaba y solo se limitó a seguirlos volteando de vez en cuando hacia la casa. Por un momento le pareció ver una sombra por la ventana, asustada regresó la mirada y siguió caminando con el corazón acelerado.

Luego de dos años Hana y Arion se casaron, a este le comenzó a ir de maravilla, los negocios crecían y de ser un simple chico del barrio, se convirtió en un importante CEO. 

El CEO de la empresa NAUL la más sólida y poderosa hasta ese momento. Todos los admiraban y constantemente les preguntaban por herederos, al principio Arion no quería tocar el tema, pero ante la insistencia de los medios más las súplicas de Hana accedió con la condición de solo tener dos hijos y sería todo…

Arion- (Molesto en su habitación) ¡Ya te dije que no! ¡no vamos a tener más hijos!

Hana- ¡Pero querido! ¡Siempre quise tener una familia grande y quiero un varoncito! Tenemos dos hermosas hijas, pero me gustaría un niño y según el doctor, podemos someternos a ciertos procedimientos que nos asegurará sea niño. 

Arion- ¡No! (suspirando cansado) por favor hazme caso y desiste por la propia seguridad de ese bebe

Hana- ¿Por qué dices eso?

Arion- (Mirando a la ventana, pensativo) Solo… solo olvídalo ¿ok?

Con el corazón roto, Hana desistió de su idea de tener otro bebe. El tiempo transcurría y luego de diez años la familia se mudó lejos de la ciudad para tener más calma y dejar el ajetreo.

Clay- (Subiendo a su cama) Madre, ¿mi padre llegará noche?

Hana- (Arropandola) Yo creo que si amor

Clay- (Triste) Últimamente bebe mucho 

Hana- (Intentando ocultar su melancolía) Es por que está muy tenso por los negocios, por eso nos mudamos aquí…

Luego de mudarse, Arion se había vuelto huraño y todo le irritaba, por las noches se levantaba y tomaba un trago para volver a dormir. Luego comenzó a llegar cada vez más noche y con aliento alcohólico.

Nay- (Acomodada en su cama) ¡Buenas noches mami!

Hana- (Apagando la luz) ¡Buenas noches! 

Luego de cerrar la puerta, Hana se regresó a su habitación y se durmió triste pensando en su marido y se preguntaba una y otra vez qué pasaba con él. 

Arion- (Conduciendo por la carretera) ¡Mierd&! ¡Mierd&! ya ni en la oficina estoy a salvo…

Las manos de Arion temblaban mientras giraba en una pendiente, el sudor comenzaba a bajar por lo que pasando su antebrazo se limpió perdiendo unos segundos de vista la carretera.

Cuando regresó la vista vió una persona en medio de la carretera por lo que giró el volante de forma brusca y frenó tan rápido que su frente golpeó con el volante. Por un momento se quedó atontado, luego volteó hacia el lugar donde había visto al sujeto mientras bajaba del auto.

Arion- (Confundido no ve nada) ¿Pero qué? ¡yo vi a alguien!

Dió dos pasos y las luces del auto se apagaron

Arion- (Temeroso) ¡Mierd&! ¡no otra vez! 

El lugar se quedó en penumbras, no se escuchaba nada, solo el silbido del viento y la respiración de él. Con ojos desorbitados regresó poco a poco al auto y cuando entró en él, una extraña bruma negra se materializó en la parte trasera 

Akbal- (Saliendo con ojos aterradores) ¡¿Dónde está la novia que se me prometió?! 

Arion- (Aterrado) ¡AAAHH! 

El sobresalto lo hizo caer del auto y al mirar abajo de este, vió unas manos saliendo como queriendolo atrapar

Arion- (Aterrado) ¡Dame más tiempo! ¡Quiero que me des más tiempo! 

Akbal- (Acercándose al oído de Arion) No… no más tiempo. Esta noche… 

Con brusquedad Akbal tomó a Arion del cuello y luego de mirarlo fijamente a los ojos, Arion se levantó, subió a su auto y luego condujo a su casa.  

Hana- (Somnolienta, siente que la comienzan a desvestir) ¿Qué? ¿Arion? (sintiendo que la besa) ¡buag! ¡hueles a alcohol!

Sin recibir una respuesta, Arion la tomó con fervor. Al otro día Hana se levantó y se fue a bañar. Mientras estaba en la tina cerró los ojos y se relajó ya que su cuerpo se sentía un poco entumecido y adolorido. 

Hana- (Pensando) [¿Qué habrá pasado anoche? Arion jamás es así, realmente estaba como loco]

Mientras se dejaba mecer por el agua de la tina, sintió una sensación como de opresión en su pecho, abrió un poco los ojos y vio una silueta parada a su lado, asustada gritó y se enderezó de golpe.

Hana- (Asustada) ¡AH! ¿quién? (sin ver a nadie) ¡estoy segura que vi a alguien! ¡Lo sé!

Arion- (Entrando asustado) ¡¿Qué ocurre?! 

Hana- (Desconcertada) ¡Me me me me pareció ver a alguien! ¡tal tal vez me confundí!

Arion- (Tocándose el pecho) ¡UF! ¡me asustaste! 

Hana- Perdón… (señalando) es solo que creí ver alguien aquí parado…

Arion- (Indiferente) Bueno, estabas adormilada, termina de bañarte y baja que las niñas ya están despiertas

Sin más, Maryo salió y Hana se quedó inquieta por el acontecimiento. Luego de unos minutos bajó a desayunar y su tarde transcurrió con normalidad. 

Dejó en el colegio a sus hijas y ella se dirigió a su pequeña tienda de juguetes, tienda que habían abierto luego de mudarse para que tuviera una distracción. 

Hana- (Cociendo una muñeca) ¡Eres muy linda! …. ¿cómo te llamaré? ¡Yuritzi! Mi pequeña Yuri, Rayito de luna… 

Luego de ese día Hana comenzó con cambios de apetito y una tarde mientras comían en el jardín, Hana tomó un plato de guisado de hígado que era su favorito. No había terminado de masticarlo cuando sintió unas terribles náuseas y se levantó para vomitar. 

Hana- (En el baño) ¿Qué pasó? El hígado es mi plato preferido… (Asustada, se ve en el espejo) ¡¿estoy…?! 

Arion- (Del otro lado de la puerta) ¿Amor está bien? 

Hana- (Abriendo la puerta del baño) Amor… creo que tengo que ir al doctor…

Arion- (Preocupado) ¿Por qué? ¿te sientes mal?

Hana- Creo que estoy embarazada… 

Arion- (Con una cara de terror y desagrado) ¡¿Qué?!

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