Tiempo de verdades

Leonardo

Después de hablar con Izadi tengo un poco de sentimientos encontrados; que le pudo pasar a Bianca cuando ella era joven para que los hombres como yo le resulten repulsivos; mientras camino a mi cuarto veo la luz de la habitación del fondo encendida con música muy triste, me acerco despacio, la puerta está abierta; ella no se percata de mi presencia por lo que puedo ver lo que hace, sus movimientos no necesitan traducción o letra; es dolor puro expresado atraves de la danza; sigue moviéndose casi hasta caer derrotada en el piso sollozando de aflicción, por lo que no puede evitar entrar para abrazarla; ella, solo llora desahogándose como si el mundo le estuviera cayendo encima; cuando al fin se detiene su llanto, simplemente me dice gracias, limpiándose la cara

para ponerse de pie

_Oye, no sé qué pasó, pero si necesitas que alguien te escuche sin juzgarte, estoy aquí. Alzó la mira con gran tristeza

_Tú no me conoces y conozco a personas como tú

_Cómo yo, me puedes decir cómo soy yo Bianca. Un poco molesto por lo que acaba decir

_De los que creen que pueden usar a las mujeres y desecharlas como si fueran un plato desechable

_Wau vaya que me conoces; las monedas tienen dos caras, niña y si pueda que sea una persona que ha recorrido un poco de mundo y que en su camino a conocido muchas mujeres interesadas, pero no te equivoques, que yo no me he pintado de niño inocente para llevar a mi cama a ninguna; las que han querido amanecer junto a mí, es por así lo han querido, no a base de cuentos chinos o engaños

_No creo que un hombre como usted, se interese sinceramente en alguien que tiene un horrible pasado, que es una mala persona, que no vale nada. Bajando su cabeza; al escucharla no me queda duda que ese día,

en esa fiesta algo muy malo le pasó

_Mira Bianca cuéntame por qué dices que no vales nada o peor aún que eres una mala persona; te juró que yo no te voy a juzgar. Veo como baja su cabeza e inicia hablar apenas audible

_Cuando yo iba en secundaria era inexperta, creía que todas las personas eran buenas, pero me equivoqué; un día fui a una fiesta muy ilusionada con una persona, que se decía ser mi mejor amiga, quien al final resultó

ser un ser despreciable

_Qué te hizo

_Ella subasto mi virginidad sin que yo lo supiera

_Que hizo qué. Evidentemente muy molesto por lo que acababa de escuchar

_Sí y la peor parte no fue esa

_A que te refieres

_A los tres que no ganaron la subasta, les vendió sexo conmigo; como si yo fuera una prostituta; ella coloco algo en mi bebida, luego yo me comencé a sentir mareada, cuando desperté estaba totalmente desnuda, adolorida, con sangre y semen en mi cuerpo; sin recordar nada de lo ocurrido

_Tú no la denunciaste

_No por vergüenza, pronto empezaron a circular videos en la secundaria donde se veía lo que esos malditos me hicieron; no sé cómo llego uno a manos de mi padre quien al verlo prefirió dejar a mi madre; según él porque

no había sabido criarme, yo sentía tanto miedo, que de que me hubiesen contagiado de alguna enfermedad, como el SIDA que me realice todo tipo de exámenes hasta confirmar que estaba completamente sana de alguna enfermedad de transmisión sexual

_Es increíble lo que me estás diciendo

_Las semanas comenzaron a pasar, en el colegio me hacían la vida miserable, como si yo hubiese tenido la culpa de lo que me habían hecho, pero no queda ahí; la ayuda económica se esfumó con mi padre, por lo que mi madre tuvo que conseguirse tres trabajos para sacarnos adelante a mi hermano y a mí, de una escuela para niños ricos de clase acomodada, a una de clase baja y a vivir en un barrio marginal, donde la delincuencia era pan de cada día

_Qué más pasó

_Conforme pasaban las semanas mi periodo no llegó y para mi desgracia estaba embarazada, sin siquiera saber quién era el padre

_Abortaste

_No, pero créeme que lo pensé muchas veces, al principio odiaba a ese bebé más que a nada en el mundo, cada visita al médico ni siquiera podía ver el monitor del ultrasonido

_Que pasó con tú bebé

_Las semanas empezaron avanzar cuando tenía casi los cuatro meses sentí como se movía en mi vientre y me di cuenta que él no tenía la culpa, que era inocente más que yo y por primera vez me atreví a verlo en el

ultrasonido, tan pequeña e inocente

_Es una niña

_Los meses avanzaron así también como mi amor por ella, cuando llegue a los ocho meses su corazón simplemente dejo de latir. Ella empieza a llorar con mucho sentimiento de culpa

_Qué pasó, porque su corazón dejo de latir

_No lo sé, siempre he creído que todo mi odio y rechazo del inicio de mi embarazo, lo pague al perderla, yo soy un monstro que odiaba a una bebé inocente que no tuvo ninguna culpa de lo que a mí me hicieron

_En eso tienes razón tú no tuviste la culpa de lo que te hicieron y la bebé no murió por que tú, por ese gran dolor que sentías la rechazaras, luego la amaste porque sabías que ella era inocente como tú; Bianca eres fuerte e inteligente yo jamás te juzgaría por tú pasado, en este momento tienes un ángel que me imagino es igual de hermosa que su madre en el cielo cuidándote

_Gracias Leo por tus palabras

_No hay por qué; pero sabes una cosa deberías ir hablar con Izadi ella está muy preocupada por ti

_Crees que ella me vaya a juzgar por mi pasado

_No, de hecho, te va a entender mejor que nadie

_Tú crees

_Estoy seguro, ya lo verás; ustedes tienen más en común de lo que te imaginas y serán grandes amigas

Saco un pañuelo de la bolsa de ni camisa para limpiar su hermoso rostro, mientras ella me mira fijo a los ojos; estoy convencido que después de lo que le ocurrió a mi sobrina y al escuchar lo que vivió ella por unos infelices cobardes, mi percepción hacia las mujeres cambio por completo, después de que me rompieron el corazón yo solo quería jugar al cazador de mujeres hermosas, llevarlas a mi cama para satisfacerme con sus cuerpos, pero ahora no, creo que no siento esa necesidad, de conquistar a nadie que no sea Bianca, ella me gusta muchísimo, no tengo duda de ello

_Voy a ver si Izadi está despierta muchas gracias por escucharme, me ayudó mucho

_Cuando quieras. Veo como se retira, mientras yo me quedo un poco sumido en mis pensamientos luego me dirijo a mi habitación

Bianca

Jamás imaginé que alguien como Leonardo Morgan fuera tan bueno escuchando todo mi horrible pasado sin juzgarme, dándome su apoyo en mi momento de debilidad, que sus palabras fueran lo que yo necesitaba escuchar; “que no fue mi culpa, nada de lo que me ocurrió, que mi bebé no murió por ese rechazo que yo tuve al principio”, camino hasta el cuarto de Izadi la luz aún sigue encendida por lo que le toco

la puerta

_Puedo pasar

_Adelante Bianca, te ocurre algo

_No solo necesito hablar contigo

_Dime te escucho

_En el restaurante yo te mencioné que fui traicionada

_Sí

_Lo que pasó fue que la que yo creí que era mi mejor amiga, subastó mi virginidad sin que yo lo supiera

_Qué me estás diciendo

_Sí y eso no es todo, los otros tres tipos que no ganaron la subasta, ella les vendió sexo conmigo; como si yo fuera una prostituta; coloco algo en mi bebida, luego yo me comencé a sentir mareada, cuando desperté estaba

totalmente desnuda, adolorida, con sangre y semen en mi cuerpo; sin recordar nada de lo ocurrido

_No te voy a preguntar que, si lo denunciaste, porque yo no lo hice

_De que me estás hablando Izadi

_Sí, Bianca te acuerdas que yo te mencione que me encuentro todavía en recuperación por una cirugía

_Sí lo recuerdo

_A mí me violaron en frente de la vista de mi padre, sin que él pudiera hacer nada, luego lo mataron enfrente de mis ojos

_Por Dios, esto tiene que ser una broma, con razón tú tío me dijo que me entenderías mejor que nadie

_Sí, mis heridas fueron tan severas que me tuvieron que intervenir de emergencia, fue Derek quien me encontró casi muerta y por casualidades de la vida Joan era una persona que conocí hace varios años quien me dijo que quería ser mi amigo y en realidad se portó como uno cuando más lo necesité

_Me dejas sin palabras, es por eso que tú no sonríes

_Es muy probable; necesito que lo que hablemos hoy en está habitación sea algo solo de nosotras dos Bianca, que no salga de estás cuatro paredes

_Te lo juro por la memoria de mi bebé

_Tienes un bebé

_En el cielo me cuida como me dijo tú tío

_Me alegra saber que ya se llevan mejor

_Sí mis pensamientos hacia él, variaron un poco la noche de hoy

_Me alegro, ya que, a pesar de todo, sé que es un gran hombre no porque sea mi tío

_Eso espero

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