Capitulo 13- ¿Por qué?

Luna estaba intentando con todas sus fuerzas prestarle la atención suficiente a la película, para que al volver Dereck pudiera contarle la trama, pero este nunca llego, se quedo hasta viendo los créditos, pero nunca volvió, Luna saco como pudo los envases palomitas y gaseosa que tenía consigo y los arrojo a la caneca de basura, miraba a ambos lados con la esperanza de verlo, no entendía que sucedía ¿Era a causa de aquella chica? ¿Tan importante era para él como para dejarla así? Técnicamente plantada, en eso una llamada entro, agarro rápido el celular pensando que era él, pero no, era Diego, empezaba a sentir un nudo en la garganta y como pudo contesto.

-¿Alo? -dijo tratando de sonar natural-

-¿Luna? ¿Puedo saber qué estas haciendo ahí parada sola?

Luna lo busco entonces con la mirada, entonces se dio cuenta que estaba una planta más arriba que ella, bajando por las escaleras automáticas, Diego al no recibir respuesta pregunto

-Luna ¿Estás bien?

Solo eso basto para que sus lagrimas cayeran, para que algo dentro de ella se rompiera ¿Por qué? ¿Por qué si se esforzaba tanto no podía ser tan fuerte como quería? ¿Por qué la vida le decía a gritos que no podía salvar al amor de su vida? ¿Por qué había dejado que se fuera? ¿Por qué no lo había detenido, sin darse cuenta ya tenía a Diego cerca de ella, este la abrazo tratando de ocultar su cara, puesto que varias personas la estaban viendo y él sabía que a ella no le gustaba eso.

-Ven, vamos a mi auto, no se que te paso, pero todo estará bien.

Luna no pudo más que aferrarse a un hilo de esperanza con esas simples palabras y sin decir nada, lo siguió.

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Dereck había salido casi corriendo del cine cuando recibió de un mensaje de Valentina diciéndole que estaba mal y que quería suicidarse, sintió pesar tener que dejar a Luna, pero no podía dejar a Valentina sola en estos momentos, ella lo necesitaba, al llegar a su apartamento la vio agachada en la puerta llorando, él la abrazo, la hizo pasar y la sentó en el sofá.

-¿Qué te pasa? -le pregunto acariciando su cabeza- ¿Qué te puso así?

-Odio mi vida Dereck -dijo llorando enojada- Creo que preferiría estar muerta que seguir con todo esto.

-No digas eso Valentina.

-Te odio -grito valentina a todo pulmón de seguro todo el edificio lo escucho- Por tu culpa estoy así.

Dereck se cayo de repente viendo hacia el suelo ¿Qué podía hacer? Nada, debía proteger a Luna costara lo que costara.

-Sino fuera por ti, mi hermano seguiría vivo -grito eufórica-

-Cálmate Valentina, esto no te hace bien y lo sabes ¿Tomaste tus pastillas?

-Esas jodidas pastillas solo me dan sueño, estoy cansada de todo esto.

-Puede que te den sueño, pero debes tomarlas -agarro su bolso y empezó a buscarlas- es por tu bien.

-Si quieres ayudarme, solo muérete.

Dereck se la quedo viendo, el sentimiento de culpa no se iba sin importar qué, apretó las palmas de su manos.

-¿Te sentirás bien con eso? -le pregunto-

-Si, no, no lo sé -rompió a llorar nuevamente-

Dereck veía impacientemente el reloj de pared, sabía que Luna lo estaba esperando, pero no podía hacer nada por el momento, tendría que meter alguna excusa al volver. Abrazo entonces a Valentina quien lloraba como una niña, no podía juzgarla, solo debía tenerle paciencia, esperaba que sus estados depresivos acabasen pronto, le sorprendió ver que había vuelto antes de lo que ella misma tenía planeado, pero al parecer vio que su medio hermano posteo algo y le dieron ganas de venir ¿Para qué? Seguramente para hacerle la vida de cuadritos, Valentina quería ver sufrir a todos porque ella no lograba ser feliz, Dereck sintió como Valentina empezó a besar su cuello y se puso tenso al tacto.

-Valentina, detente -dijo empujándola un poco- esto no pasará.

-¿No quieres hacerme sentir mejor? -dijo coquetamente-

Dereck la veía con sentimientos encontrados, no quería lastimarla aún más de lo que ya estaba, pero no podía lastimarse así mismo, si hacía ese tipo de cosas, se sentiría sucio y no podría intentar tener algo con Luna sin sentirse bien consigo mismo, ya mucho había echo al permitir que lo besara en la universidad, trataba de no hacerle daño de ninguna manera.

- De esta manera no -dijo levantándose del sofá- tomate las pastillas, te llevaré a casa.

-Algún día serás mío -dijo acercándosele- y ese día seré feliz, porque te veré doblegarte, te veré ser infeliz por estar con una mujer que no amas

Dereck sabía que su salud mental empeoraba con el pasar del tiempo, ya pareciera que iba al psicólogo por juego, busco un vaso de agua, se lo tendió y vio como se tomaba las pastillas, luego llamo al chofer de la familia de ella, ya era costumbre que la fueran a buscar cuando estaba sedada por los antidepresivos, el chofer tardo más de la cuenta diciendo que había mucho trafico, cuando se percato se dio cuenta que la película estaba por terminar o ya lo había echo, maldijo para sus adentro y corriendo bajo al estacionamiento, se monto en el auto y arranco para donde se hallaba Luna, al llegar parqueo el carro y empezó a correr, al llegar vio que la película había terminado, vio para todos lados buscando a Luna, camino de un lado a otro, hasta que la vio, estaba de lado, ella estaba ¿Llorando? Dereck iba a gritar su nombre, cuando vio a Diego, su compañero de asiento, acercarse y abrazarla, acto seguido vio como ella le correspondía el abrazo, Dereck no hizo nada, sentía que su cuerpo no le respondía vio como Diego le acariciaba la cabeza, le decía unas palabras al oido y como se la llevaba por el lado opuesto a donde él se encontraba. Dereck quería correr y detenerlos, pero ¿Con qué derecho lo hacía? Si él la había dejado sola, se golpeo mentalmente.

"Perfecto Dereck, la has embarrado hasta el fondo" se dijo mentalmente, mientras apretaba los puños, tanto que se lastimo las palmas con sus uñas, suspiro tristemente, luego se dio la vuelta para irse, debía hablar con ella, pero primero debía darle su espacio, le llego un mensaje y saco su teléfono.

-Espero que nunca seas feliz -Fueron las palabras que le envió Valentina-

"¿Acaso nunca iba a ser realmente feliz?" Se pregunto riendo amargamente, solo quería proteger a su primer amor, a la chica que consideraba el amor de su vida, todo aquello era más grande que él, Luna empezaba a tener señales en sueños sobre su infancia, una infancia que él prefería que no recordara, solo le traería sufrimiento, solo quería hacer las cosas bien, pero todo le salía al revés, solo quería ser feliz junto a Luna ¿Era mucho pedir? Dereck se quedo viendo un rato sus muñecas "¿Qué pasaría si acabase con su vida? ¿Alguien lo extrañaría? Tal vez el hacerlo acabaría con muchos problemas" Pero entonces recordó a Luna, no sabía porque, pero sentía que no era la misma, podía ver más madurez, más valentía en su ser, se estaba esforzando, la niña introvertida que conocía estaba empezando a florecer y él quería estar ahí, para apreciar la mejor versión de ella, no podía dejarse derrumbar tan fácilmente. Recordó entonces las palabras de Luna, una Luna de 7 años que le sonreía tan cálidamente, que le hacía olvidar todo lo malo.

-Recuerda que para todo hay solución -le dijo Luna a esa edad- menos para la muerte, debes ser fuerte.

Dereck sentía que escuchaba esas palabras como eco, al recordarlas siempre hacían que recobrara energías para seguir adelante, debía ser fuerte y tal vez la vida le recompensaría algún día su esfuerzo.

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