Un gusto verla nuevamente

🗨️ Violeta llega justo a tiempo a la reunión con el señor Zhen, por fortuna el día anterior dejó todo revisado, el ascensor la lleva directo al piso dieciocho, donde quedan las oficinas de presidencia, sueña con algún día tener una empresa de un nivel tan superior como la de la familia del esposo de su amiga.

El ascensor se abre y la sonrisa de la secretaria la recibe con mucha amabilidad.

—Señora De la Vega, muy buenos días.

—Buenos días, Lorna, su jefe me está esperando.

—si señora bien pueda pase, desea que le lleve algo de tomar.

—Un té de manzanilla, me caería de perlas.

—Bien pueda, pase yo se lo llevó a la oficina.

Violeta se dirige a la oficina, pero al escuchar otra voces en el interior, decide tocar, la voz de Ian le autoriza y ella se dispone a entrar.

—Buenos días, Señor Zhen ¿le  interrumpo? Si deseas puedo esperar a que te desocupes.

🗨️ Al parecer se encuentra ocupado, Ian y un elegante hombre lo acompaña y tienen varias carpetas sobre la mesa.

—No por favor, pasa te estábamos esperando, sigue, sigue te quiero presentar al hombre que te ayudara a crear y con sus creativas ideas a lanzar nuevos productos, es un gran conocedor de la cultura oriental y estoy seguro de que juntos crearán cosas magníficas, que llamaran la atención a este lado del mundo.

Además ya conoces a mi hijo y desde hoy te entenderás con él, será el nuevo presidente de esta compañía, es hora ceder el puesto a los jóvenes. 

🗨️ Violeta no logra entender, que podía crear su poco conocida empresa, que ya en el mundo no hubiera sido creado.

Pero bueno, con su mejor cara se acercó a saludar. 

Ian se encarga de las presentaciones, mientras el señor Zhen se despide. 

—Ahora si los presentó, Violeta él es mi amigo de toda la vida, soltero, amante de la naturaleza, ama las mascotas, adora los niños, por eso te informo que junto a él serás la madrina de mi primer hijo.

—Es un gusto verla de nuevo, señora Violeta.

🗨️ Nerviosa y sin que sus palabras lograrán salir de su boca, Violeta extendió su mano y Ángelo no dudo en atraparla entre las suya, sus miradas se cruzaron y lo que para ellos fueron segundos, para Ian, que a escondida le graba un video a su esposa del inusual momento, fue una eternidad, por lo que decide aclarar su garganta, para devolverlos a la tierra.

—Bueno no sabía que se conocían, me hubieran ahorrado las referencias,  teniendo claro este punto, creo que ya podemos pasar a la sala de juntas y revisar los detalles de nuestro primer pedido.

Ángelo y Violeta, están en las nubes, sus tímidas miradas se cruzan y ambos se sonrojan.

—Creo que la calefacción está prendida, hace un poco de calor aquí.

🗨️ Ian hace su mejor esfuerzo para no reírse la cara de sus amigos, mientras su esposa que desde su oficina está disfrutando del momento y ya ha unido a Pilar a la charla, está feliz de ver en su amiga esa mirada que solo le vio hace siete años, cuando Omar al ser expulsado  por un problema de conducta bastante reprochable de la universidad en la que estudiaba, ingresó a la universidad donde cursaban  ellas su carrera.

Violeta haciendo gala de su profesionalismo, realizó la presentación de lo que serían los productos de este primer envío, ya estaba proyecta la imagen con el cambio de idioma para llamar la atención del público del país donde se comercializará.

Los halagos no se hicieron esperar, Ángelo está deslumbrado, esta mujer tiene todo lo que él busca, hermosa, inteligente, atenta, buena para los negocios, tiene una voz melodiosa y sus ojos brillan cada vez que su sonrisa ilumina su rostro.

La reunión termina de forma exitosa, Ángelo opina que la mejor forma de celebrar es con una invitación a almorzar, pero ya la esposa de Ian se les ha adelantado.

—Les cuento que mi amada esposa, les ha enviado una invitación a almorzar y ya saben que ella no acepta un no como respuesta.

—Está bien, no quiero que a mi amiga se le encienda la llama, pienso que tendremos varias reuniones y muchas ocasiones para aceptar la invitación del Señor Morgan.

—Nada de señor Morgan, llámeme solo Ángelo.

—Está bien, pero si usted me llama solamente Violeta, la señora De la Vega, es mi madre.

🗨️ Los tres salieron de la oficina y un poco más adelante se unieron Sonia y su hermano, quien almorzar a con ellos, también estará Pilar que muere por ver a su amiga bajo el flechazo de cupido.

Ya en casa las mujeres se dirigieron a la cocina, mientras los hombres ponen la mesa.

—Y bien Violeta, tienes algo que contarnos.

—No, nada en especial, solo estaba haciendo las últimas correcciones del pedido para empezar a producirlo.

—No te hagas, hemos visto como tú y el amigo de Ian cruzan miradas.

—Ustedes como siempre imaginándose cosas, recuerden que soy una mujer casada.

—Pero hace rato dejaste de llevar el anillo, además ese matrimonio no creo que llegue a los seis años, es más nunca debió comenzar.

🗨️ Y mientras las amigas atacan a Violeta en la cocina, en el comedor Ángelo no se libra de los suyos.

—Pero me hubieras dicho que el flechazo había sido mutuo.

—¿Te parece qué le intereso?

—Pero amigo por Dios, eres tan inocente, estoy seguro de que cupido les pondrá el corazón a latir más fuerte cada vez que se vean, tendré que coordinarles varias reuniones.

—Pero y su matrimonio, sé que no anda muy bien, pero no quiero ser un tercero que cree la discordia.

—El tercero ya está, mejor la tercera ya está y la discordia se  generó desde el día que esa relación empezó. 

Digamos mejor que tú serás el salvavidas, que llega en el momento justo a demostrarle a Violeta que el amor existe, me encargaré de que ambos se decidan a ser felices.

—Y tú desde cuando andas de celestino.

—Desde que me case con Sonia y a ella se le metió en la cabeza que sus amigas y amigos debían ser felices.

—Simón tú solo te ríes, no ayudes tanto.

—No te preocupes, ya yo pasé por eso,  estos dos llevan varios meses haciéndole seguimiento a los sentimientos que hay entre Pilar y yo.

—¿Y si ha dado resultado? 

—Claro que si, le ponen todo su empeño, ya hemos salido un par de veces.

—Antes de que finalice este año, esperamos que por lo menos se hagan novios.

—hmmm, he estado a poco de proponérselo, pero y si me dice que no.

🗨️ Las chicas aparecen para empezar a servir, los guapos caballeros se acercan y e ayudan con las charolas que llevan en la mano y muy estratégicamente los sienta uno al lado del otro, mientras ellos en cada punta de la mesa disfrutan de la timidez de sus amigos.

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