Falta poco tiempo

🗨️ Desde muy temprano, Sonia, junto a su esposo, se encuentran muy preocupados por Violeta, por lo que deciden hacerle una visita sorpresa a su oficina.

María: Señora, Violeta, la señora Sonia y su esposo, pregunta si los puede atender.

Violeta: Claro María, hazlo pasar, será que pasó algo, ¿tienen cara de preocupación?

María: No señora están muy sonriente.

🗨️ Sonia y su esposo entran muy sonrientes a la oficina, Violeta dejando todo a un lado los saluda afectuosamente y es que su amistad se ha consolidado en estos últimos años, Sonia, Pilar y Violeta eran las mejores amigas en la universidad, por lo que Violeta no tarda en llamarla para que se una a la reunión.

— Me pueden decir a que se debe esta inesperada visita, nuestra reunión es para mañana o estoy con los días trocados nuevamente.

—Tranquila, nuestra reunión de mañana sigue en pie, nuestra visita es por dos cosas, la más importante para saber cómo estás de ánimo.

—Al parecer la noticia está en todas partes, pero pueden estar tranquilos, hace mucho tiempo lo que haga Omar dejó de afectarme.

En este momento ese suceso únicamente me motiva para continuar cimentando las bases de un divorcio más cordial o por lo menos uno en el que mi esposo no tenga más opción que darse por vencido si ninguna batalla legal.

—Pues me alegra mucho escucharte hablar de esa manera, ya has perdido cinco años de tu vida al lado de alguien que no te merece.

Siendo así, pasaré a decirte el segundo motivo de nuestra visita.

—cuéntame soy toda oídos.

Sonia: amor se lo dices tú o se lo digo yo.

Ian: Díselo tú, tienes más confianza, a mí aún me dice señor Zhen, me siento como si estuviera negociando con mi padre.

—No me hagas berrinches, solo es formalidad laboral, en poco tiempo tú estarás a cargo de los negocios de tu padre.

Pero sabes que te quiero tanto como a un hermano, ustedes junto a Pilar han sido mi apoyo, desde que mi familia adoptó a Omar como el hijo varón que nunca tuvieron.

Pero bueno cuenten pues, ya despertaron mi curiosidad.

—Bueno, recuerdas que por culpa de tu esposo te perdiste nuestra boda y entonces decidimos que Pilar sería nuestra madrina de boda y tú la madrina de nuestro primer hijo.

—Si claro, del primero y de otros tres más, tú debes tener los hijos que pilar y yo no tendremos.

—Creo que tendré mucho trabajo entonces.

— Ni lo pienses, no tendré hijos por ustedes, no estoy tan loca, cada una tendrá hijos, así tenga que buscarles quien las embarace y me toque ayudar a criarlos.

—Si, si como digas y entonces, acaba de contarme lo que debo saber.

—Pues mi estimada Violeta, te informo que debes ir alistando el ajuar con que se bautizara a tu ahijada o ahijado aún no sabemos que será.

🗨️ En ese momento llega Pilar, quien alcanza a escuchar la noticia y junto a Violeta corren a abrazar a su amiga, que se encuentra tan feliz como ellas.

Ian se hace a un lado para darle espacio a las amigas de celebrar la noticia.

Pero como no hay felicidad completa, la puerta se abre nuevamente y la figura de la madre de Violeta aparece, poniendo una muy mala cara al ver la felicidad en el rostro de su hija.

—Pero que es esto, que tanto tienes que celebrar, mientras tu matrimonio se derrumba, cualquiera diría que estás feliz con lo que está pasando.

🗨️ Sin darle mayor importancia a lo dicho por su madre, Violeta se concentra en hablarle al aún invisible vientre de su amiga.

Pero ante la mirada venenosa de la señora Diana De la Vega, la visita decide retirarse y se van a la oficina de Pilar, para esperar que madre e hija tengan la conversación requerida.

Ya a solas, Violeta se dirige a su madre.

—No entiendo que haces aquí, en casi cuatro años es la primera vez que pisas mi empresa, no te parece que está en un sector muy poco exclusivo, no es digno de una mujer como tu pisar este suelo impuro.

—Déjate de majaderías, sabes muy bien el motivo de mi visita, me preocupa tu matrimonio fui a buscarte a tu casa y no te encontré, por un momento pensé que estarías buscando soluciones, pero me encuentro con que celebras la felicidad de tus amigas.

—Entiendo tu molestia, me imagino yo que tú esperabas encontrarme, hecha un mar de llanto, con los ojos hinchados, una caja de pañuelos y un pote de helado, viendo el video de mi boda.

— Pues no, pero por lo menos esperaba que estuvieras un poco indignada con todo esto, cualquiera que te ve puede considerar que nada de lo que está pasando te afecta.

— Pues que opinen lo que quieran, pero te doy la razón, ya no me afecta nada de lo que está pasando, porque no es ni la primera, ni la segunda, ni la tercera y te puedo decir que ni siquiera es la décima vez en las que me entero de lo que Omar hace fuera del hogar.

Es más ya no me importa, si tener amantes me ayuda a soportar el tiempo que mi padre me impuso para qué durará este matrimonio, que tenga las que desee.

— No puedo creer que después cinco años de matrimonio desees tirarlo todo por la borda—dice su madre mostrando un alto grado de indignación.

—Si estuvieras más enterada de la vida de tu única hija, te hubieras dado cuanta hace rato, que desde el primer año de matrimonio no soy feliz, Omar siempre me ha humillado, siempre ha tenido amantes, su único interés en mi era embarazarme para asegurar la fortuna de mi padre y el bienestar de su familia.

—Como puedes decir eso, Omar siempre te ha amado.

—Mamá, yo sé los motivos por los que mi padre aceptó que me casara con Omar, sé que el padre de Omar y el mío son buenos amigos desde la infancia.

— Y eso que tiene que ver, el querer que las dos familias se unieran no es un pecado.

—Mamá, yo no soy como tú, que sabiendo la verdad se hace la de la vista gorda, Omar se aprovechó de lo que en algún momento sentí por él, para que su padre no perdiera la apuesta que hicieron nuestros padres.

El que logre que su hijo o hija se case primero se quedara con la mitad de las riquezas del otro, los años pasaron y Omar que es mayor que yo no mostraba interés en casarse, pero como yo de tonta botaba la baba por él, les facilite el negocio.

Nos casamos y ninguno de los dos perdió y de una vez los papas de Omar salían de la ruina en la que estaban a punto de caer por los malos negocios de su padre.

— Y tú como sabes eso, te dije muchas veces que no estaba bien escuchar detrás de las puertas.

—Como sea mamá, lo importante es que lo sé y que si he soportado tantos años de angustia y desamor ha sido para no perjudicarlos a ustedes en su estúpida apuesta.

Pero ahora solo me aguantaré los próximos meses, hasta cumplir los seis años, en el momento en que se cumpla ese tiempo, mi compromiso moral llegaría a su final y podré ser libre, de ustedes y de Omar.

—No sabía que te sentías así, pero igual debes pensar en tu reputación, que dirán nuestras amistades.

—Dirán lo mismo que han estado diciendo en estos cinco años, que no entienden como ustedes permitieron que me casara con un perdedor como Omar.

—Pero tu padre no estará de acuerdo con que tú te divorcies de Omar.

—Y quien te ha dicho a ti madre, que yo pienso o estoy considerando pedir su aprobación para tomar las riendas de mi vida.

🗨️ Molesta, preocupada, pero en el fondo orgullosa de su hija, la señora De la Vega le da un beso en la frente a su hija y sale de su oficina, sabiendo que su hija está haciendo lo correcto y que tiene la valentía que a ella le ha faltado toda su vida.

Pero aún así no está de acuerdo con que se divorcie, el escarnio público es algo a lo que siempre le ha temido, ella prefiere someterse a lo que sea por conservar las apariencias.

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