Capitulo 8 Mi novia no se entere

Tom

Después de salir del apartamento de Sam me dirijo hacia la dichosa cena que tengo que ir, yo usualmente soy muy puntual, pero ya que a Sam le molesta un poco la situación, intentaré llegar lo más tarde que mi puntualidad me deje, tal vez corra con la suerte de que la chica se cansé de esperar y se vaya, ya después solo le digo al abuelo que se me hizo un poco tarde porque tenía mucho trabajo y la chica se fue.

Llegó al restaurante pregunto por mi reservación y me encuentro con la sorpresa de que todavía la directora del Génesis no ha llegado, me frustra saber qué tal vez sea a mi a quien dejen plantado, pero bueno son cosas que pasan, pasan aproximadamente 20 minutos y se me acerca un camarero con la carta y bueno, ya que estoy aquí creo que debería cenar, así cuando regrese le digo a Sam para ver una película o hacer otro tipo de cosas más divertidas, estoy concentrado en la carta cuando llega la dichosa mujer y dice

- Sr Campbell disculpe la tardanza tuve un problema con el auto- tengo colocado la carta frente a mi, pero puedo reconocer esa voz, esa voz, es la de mi princesa!, no lo puedo creer, las casualidades de la vida, sonrió detrás de la carta como un niño pequeño y decido jugarle una broma, coloco mi voz de negocios, la cuál es una voz fría y oscura que suena muy intimidante, veamos si logra reconocerme

-- Llega tarde señorita Harrison, este tipo de comportamiento es inaceptable para la directora de una de las empresas más importantes- me sorprendo al escuchar su respuesta, ya que pensé que se intimidaría, pero fue totalmente lo contrario

- Sr Campbell, hay personas que tienen asuntos mas importantes, que una triste cena con un desconocido- me hace sonreír porque ya casi le reclamaba por no decirme que “su reunión” también era una cita a ciegas, pongo nuevamente seriedad en mi cara y digo

-- Señorita Harrison, tengo cosas mucho más importantes que hacer, que estar en esta cena, no estuviera aquí si no fuera estrictamente necesario, no estoy aquí por mi voluntad, inicialmente esto tendría que haber sido una cena más allá de lo laboral, pero no me interesa tener esa clase de relación con usted, así que porque mejor no hablamos de negocios?- Se que en estos momentos debe estar odiándome, pensando que soy un horrible ser humano y para nada un caballero, pero bueno que les puedo decir me estoy cobrando que no me haya dicho que tenía una cita

- Ja! Sr Campbell, no me haga reír, ni siquiera me ha visto desde que llegué, pero sabe que? Ese tipo de relación tampoco me importa, no con usted, antes de venir estaba muy a gusto con mi novio, si vine, fue porque mis padres querían que saliera más, en vez de estar trabajando, ellos todavía no saben que inicie algo con alguien, pero su idea no me parece para nada mal, es mejor concentrarse en el trabajo, es lo mejor que podemos hacer - Bingo!! Me llamo su novio, ahora sí la voy hacer poner muy nerviosa

-- Su novio? Tenía entendido que usted no tenía novio- le digo sonando interesado

-No tenía, pero estoy iniciando algo

--Vaya! Quien lo diría señorita, al parecer usted al igual que yo hemos conocido a alguien que sabe llegar a nosotros

-Usted también tiene a alguien en su vida sr Campbell??

--Si, es la mujer más maravillosa del universo, no se ofenda señorita, pero es mejor que usted y que todas las mujeres del mundo, es la más hermosa del universo, usted no se le podría comparar, así que disculpe pero no le llega a los tacones

Se que se molestó, estoy siendo un bestia, aún cuando no le estoy coqueteando, se que cualquier mujer se sentiría muy ofendida con las palabras que le acabo de decir a Sam, pero no me crean un monstruo por favor, se que es una broma un tanto ruda pero oigan, la chica que me deja sin aliento iba a tener una cita y no me lo dijo, sin contar también, que me hizo una escena de celos cuando yo si le dije lo que iba hacer

Se levanta de la mesa y dice

- Sr Campbell, está cena es más que absurda y la verdad es que quiero regresar a mi casa, mi día estuvo muy complicado como para perderlo aquí con usted- se levanta de la mesa, da media vuelta y antes de que consiga alejarse, la tomo de la muñeca y la jaló hacia mí, quedando muy cerca de mi cuerpo

-- Princesa, aceptarías cenar conmigo?? – Veo en su cara confusión y sé que, o lo arreglo rápido, o estoy en graves problemas, le doy un corto beso y digo-

-- Princesa, mucho gusto, Thomas Campbell, me puedes llamar Tom o como mejor te parezca – Veo que sus mejillas se tornan rosadas y me dice

- Cuando lo supiste?- Oh Ho-

-- Apenas llegaste –

-Y me dejaste hacer el ridículo todo el tiempo – Dios!! Está enojada, que digo enojada, está furiosa!!, Dios!! Ayúdame

--No corazón!! No digas eso, no pensé que te enojarías por decirte que la chica que me gusta es mucho mejor que tú!, Aunque esa chica también seas tú!- la miro con ojos suplicantes y le pido al cielo que me ayude

-Te la voy a dejar pasar, solo porque tengo hambre y quiero comer algo antes de regresar a casa- sonrió con suficiencia y le doy unos cuantos besos en las mejillas

- Ya basta, me corres el maquillaje

--Eres preciosa con o sin maquillaje- me mira a los ojos, esos hermosos ojos azules que me hipnotizan y le digo- Y si nos saltamos la cena y volvemos a casa??

-No, tengo hambre, comamos y después nos devolvemos- bufeo y digo

--Está bien, tu mandas- me sonríe, se aparta de mí  y luego se sienta, me siento y pregunto

--Así que señorita Harrison, su nombre completo es..?-

-Samantha, Samantha Harrison, señor Thomas- me mira con una cara un poco coqueta y le digo

--Guao permítame decirle señorita Harrison que está usted muy bella esta noche, espero mi novia no se entere que compartí la cena con una mujer tan bella, porque seguro se molestaría mucho- me mira y se sonroja recordando que me llamo “su novio” –

-Debe ser una chica muy insegura esa-

--Para nada, solo un poco enojona, pero es la mujer más maravillosa del planeta, tal vez algún día se la presente, todo depende si ella acepta ser “mi novia” oficialmente

-Estoy segura de que ella va aceptar encantada- voy a decir algo más y llega el camarero a pedir nuestras órdenes, pido mis platillos y ella pide los suyos, y luego continuamos charlando un poco más

- Así que tengo que agradecerle al abuelo esta salida, no?

--Je! Si, esta salida es un extra por parte del abuelo, pero que conste que yo conocí a “Sam” en el parque así que el mérito debería ser mío, Porque si fuera por la salida con “la señorita Harrison” estaría en estos momentos comiendo solo- me ve y se sonríe

Llegan nuestros platos, comemos entre charlas y risas le pregunto si quiere algún postre y me dice- Si!, Amo una tarta que hacen en este lugar, aunque le agregan un poquito de maní y no me gusta mucho- la miro a la cara con un poco de nerviosismo y me dice

 -Pasa algo?

--Es que soy alérgico al maní y cuando comas el postre no podré besarte- me mira con ternura y me dice

- Lo pediré sin maní, en verdad no me gusta para nada el maní-sonrió y pido un postre de chocolate para mí

Terminamos de comer y decidimos irnos a casa, bueno nuestras casas

Salimos al edificio, me adelantó un poco  y espero un tiempo corto, ya que me adelante en la carretera para llegar antes he ir a su puerta, espero y al cabo de unos pocos minutos llega con una cara interrogativa y tal vez un poco enojada, me mira y dice

- Creí que te habías ido a dormir- la miro, sonrió y le digo-

-- Disculpe señorita me habla a mi??- me mira con cara de no entender y responde

- Si, a quien más le hablaría?- me río por lo bajo, mientras ella coloca la clave en la cerradura inteligente y digo

-- Señorita, creo que usted se ha equivocado de piso y apartamento,  aquí vive mi “No-VI-A” la mujer más hermosa del mundo -me mira con cara de entender el juego y con una sonrisa pícara dice

- Caballero creo que se equivocó de lugar, y si no, le aconsejo que se aleje porque mi NO-VI-O puede que sea celoso y no estoy segura de que le agrade ver a cualquier hombre cerca de la puerta de mi casa -me rio a carcajadas y me acerco a ella, le rodeo con mis brazos su cintura y la beso como si mi vida dependiera de ello, abre la puerta de su casa y los dos entramos sin separarnos, nos dirigimos al sofá de su casa y estamos a punto de llevar las cosas un poco más allá, cuando de repente, suena su celular, ella lo deja sonar y sonar, me apartó un poco de sus labios, me acerco a su cuello  y le susurró bajo la oreja-

--Cariño, creo que deberías contestar están muy insistentes- hace un sonido de queja con su boca y se levanta de dónde estaba, busca su teléfono, en la pantalla se refleja la palabra *Mamá- siento algo de envidia, al pensar que muchas personas tienen la dicha de recibir ese tipo de llamadas, y pensar que ella casi deja que la llamada acabe, no dejaré que eso vuelva a ocurrir, de eso me voy a encargar.

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