Capítulo 4: Malentendidos Parte 1

Tomás:

"Lo siento por mi padre Tomás" dice ella en el trayecto a la fiesta.

Sonrió " Descuida, haría lo mismo, él te ama mucho y quiere protegerte, pero que pierda cuidado, conmigo estás a salvo" tomó su mano y la beso, ella me regala una hermosa sonrisa y le respondo igual.

Una vez llegamos a la fiesta, se puede ver una gran multitud de personas, estacionó mi auto y me dispongo a bajar y abrirle la puerta a Crystal. Ella asiente en agradecimiento.

Nos tomamos de la mano y emprendemos el camino. " vaya jamás pensé que fuese así" dice Crystal viendo con grandes ojos todo, reflejando sorpresa y a la vez desconcierto por la cantidad de vasos regados por todos lados y por si fuera poco chicos fumando marihuana sin Dios ni ley.

"Con el tiempo te acostumbras" la miro y está haciendo mala cara.

Crystal siempre es muy racional y seguro piensa que es una perdida de tiempo ver gente bebiendo y drogándose, y lo es lo acepto, pero a la vez quiero verla distraerse un poco, y que conozca este mundo conmigo, quiero ser yo quien la guíe y la proteja, quiero estar en cada experiencia de su vida, para siempre. Pensé exageradamente, pero lo que sea, como dije ella era mi primer y único amor. Continúe diciendo "Recuerdas estamos aquí para divertirnos, deja a un lado lo obsceno y vamos a bailar" ella levanta sus cejas como decidiendo que hacer.

"Prefiero estar en otro lugar más tranquilo, pero que más da, hay que intentarlo" su semblante se torna más relajado.

Tomo su rostro y la beso "No beberemos, solo bailaremos y la pasaremos bien, ok?", le digo y ella asiente

"Bien" tomó su mano y nos adentramos en la casa, casi pierdo de vista a Crystal, había demasiada gente y nos empujaron en varias ocasiones.

Atraje a Crystal a mi pecho para protegerla de cualquier incidente y logre encontrar un lugar despejado que quedaba justo en el pasillo que daba a la cocina de la casa. "¿Estas bien?" pregunto

"Si" responde algo tímida, la veo sonrojada y su mirada es muy consciente de nuestra cercanía, por el alboroto no lo tuve en cuenta, no quiero incomodarla así que me alejo un poco.

Le sonrió y le digo " Que tal si bailamos" en ese momento el sonido de la música suena fuerte en nuestros oídos, nos coloque en un lugar, donde hay un estéreo, mi error.

"Crystal salgamos de aquí" le digo pero me hace señas, diciendo que no me escucha, por la música alta. Noto que lo encuentra gracioso y se ríe. Es realmente preciosa.

Niego sonriendo, vuelvo a atraerla hacia mí y la sostengo fuerte, el único lugar que pude encontrar medianamente seguro para ella, fue la sala, así que permanecimos ahí.

Comencé a moverme al son de la música, ella sonríe y me sigue el ritmo. La miro sorprendido sí que sabe moverse, no puedo evitar sentir deseo por ella, cada roce de sus caderas y de sus manos que se deslizan por mi pecho me van a volver loco.

"¿Sorprendido?", pregunta ella, totalmente relajada y feliz.

"Solo creí que no venías a estos lugares" le pregunto con cierta incertidumbre, de que pudiera haber tenido otro chico en su vida, yo quería ser el único.

Pasa sus brazos por encima de mi cuello y se acerca más a mí " No lo hago, solo que tengo un amigo que me ha enseñado" arrugó el ceño, amigo? "No hagas esa cara" alza más la voz, la música se está haciendo más fuerte " No es lo que piensas lo conocí desde niña, es mi mejor amigo, es casi como mi hermano" dice ella para tranquilizarme.

Suspiro irritado, de nuevo estos celos irracionales . Aunque no quiero dudar de ella como es que pueden bailar así dos amigos?. "Ya sé lo que piensas y no es así, no nos hemos acercado así, Tomás?", dice ella, intenta alcanzarle pero me separo de ella.

"Solo déjame ir por algo de beber" me alejo y la dejo allí sola, sin pensar en las consecuencias.

Crystal:

Me quedo allí sola en medio de la multitud, trato de salir pero sí que es una misión imposible, tuve que empujar a ciertas personas para abrirme paso.

Me dirijo a la cocina a buscar a Tomás, en ese momento vibra mi móvil , anunciando un mensaje, lo reviso y es de Antón.

Antón: "Tu padre me pidió ayuda para cuidarte, donde estás"

Crystal: " No hay necesidad, pero gracias. Me haría bien algo de ayuda. Dirección: xxxxx". Tener un novio era más complicado de lo que pensé, si fuera cualquier chico, me iría de este lugar y lo dejaría en el olvido, pero Tomás se había vuelto muy importante para mí.

Además, de que no conocía sus hábitos de bebida necesitaríamos por si acaso alguien que nos condujera hasta casa, ya que en ese estado él no podía manejarse.

Antón: "¿Todo bien?" preguntó intranquilo por mi respuesta anterior. No quería preocuparlo así que respondí.

Crystal: "Si estoy bien, solo no tardes". Vuelvo a guardar mi móvil y me dirijo hacia la cocina. Al entrar veo varias personas dentro, recorro la habitación y notó a una chica lavándose la cara en el fregadero al parecer borrando rastros de vómito, aparto la mirada asqueada.

Sigo buscando y mi mirada se detiene un segundo en un par de chicos que están, sentados sobre la isla de cocina, riéndose de alguna broma que se estaban contando. Me acerco más al interior, miro detrás de ellos y logro divisar a Tomás.

Se encuentra recostado en una esquina con una botella de cerveza mirando hacia un punto fijo, luce enojado, no creí que le molestaría tanto que tuviera un amigo.

Me dirijo hacia allí, él me nota enseguida, cruzo mis brazos, tal vez venir fue una mala idea, u omitir a Antón en todo esto. "Que pasa Tomás" le pregunto " Estoy haciendo algo mal?, que es quiero saber, porque si va a hacer así todo el tiempo es mejor que..."

Él se acerca a mí y dice "No lo digas... solo estoy celoso" suspiro si está celoso solo por eso, que pasara cuando se entere que Antón se queda en nuestra casa.

"No tienes porque ya te lo dije es mi amigo casi mi hermano"

Él se pasa una mano por su cabello, totalmente irritado "Solo hubiese querido ser yo el que estuviera en todo momento contigo" aunque me perturbaron un poco sus palabras, también me sentí importante y sobre todo amada, nadie se había interesado así en mí.

Pero lo comprendía después de todo él había perdido a sus padres y solo tenía a su tía, pero ella pasaba más tiempo trabajando que con él.

Me acerqué y lo abracé, yo era todo lo que tenía. "Entiendo como te sientes, pero debes entender que no puedo tener a una sola persona en mi vida Tomás" Él me mira no conforme, claramente tiene problemas de inseguridad. Cuando empecé a conocerlo dije: vaya es tan fuerte, tan decido, pero detrás de esa apariencia se hallaba un chico frágil y destrozado. "pero la buena noticia es que, tengo suficiente espacio y amor para ti en mi corazón... yo te amo Tomás" dije las palabras sin miedo. Lo había venido sintiendo, hace algún tiempo, pero quería esperar el momento adecuado para decírselo y este parecio el correcto, esperaba que esto despejará sus dudas.

Él abrió sus ojos sorprendido "¿Es cierto?" me pega más a él.

"Lo es" sonrió. Él no pierde oportunidad y me besa, con tanta pasión y amor, y yo le correspondo igualmente. No se en que momento llegue a sentir tanto por él, se fue metiendo poco a poco en mi corazón, y en mi alma, lo amaba demasiado, sin duda no me arrepiento de haberlo aceptado aquel día.

Alguien se aclara la garganta, Tomás y yo nos separamos y nos encontramos a Victoria de pie cerca de nosotros "Victoria por si no ves estamos ocupados" dice Tomás enojado

"Lo sé solo vengo a invitarlos a jugar verdad o reto" quería pasar de esto, pero Victoria me miró con una mirada retadora.

"No lo creo" dice Tomás

Yo, en cambio, digo " Si porque no" dirijo mi mirada a Tomás y él sonríe.

Los dos nos alejamos, con una gran alegría en nuestro corazón, pero con un gran peligro a la acecho. Victoria sonreí maliciosamente esperando el momento para dar marcha a su plan todo estaba preparado "Esta misma noche Crystal, saldrás de la vida de Tomás" dice ella. Dirigiéndose a la sala donde estabamos todos reunidos.

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